Las propuestas del FA es un “listado de buenas intenciones”.

Las propuestas del FA es un “listado de buenas intenciones”.

El Frente Amplio presentó una serie de propuestas con el fin de reactivar la economía, pero no explica ni sugiere cómo financiarlas.

Hébert Dell’Onte | El FA presentó una batería de medidas que tienden a ayudar en la difícil situación del país, con una inflación que se dispara y que según se ve en todo el mundo continuará siendo así en tanto la economía, el comercio y las finanzas globales no se encausen en los senderos perdidos primero con la pandemia y luego con la invasión de Rusia a Ucrania.

Para el senador Jorge Gandini (Partido Nacional) las propuestas que presentó el Frente Amplio son bienvenidas, pero no pasan de ser “un listado de buenas intenciones.

“Lo primero que hay que destacar es el diálogo. Anoche las presentaron públicamente y hoy las recibe el presidente de la República, y se instala un espacio de diálogo directo entre el presidente del partido de la oposición y el presidente de la República, eso es muy destacable.”

No obstante ese diálogo necesario en todo sistema democrático, al profundizar en el contenido de las propuestas, el legislador dijo que es un “listado de buenas intenciones”.

“Es un listado de buenas intenciones, pero no dice como se costean. Algunas tienen un alto costo económico en materia de renuncias fiscales y de dedicación de recursos, que hay que saber de dónde salen, porque, obviamente, si hay que financiar eso a través de renuncias fiscales o dedicaciones presupuestales nuevas, eso aumenta el déficit fiscal que empuja la inflación, y la inflación le pega a los bolsillos de los trabajadores y de los jubilados, es un círculo vicioso que también hay que romper”.

“Da para analizar, hay algunas medidas que compartimos, hay otras que hay que estudiarlas mejor. El Fondo de Estabilización de los Combustibles es una medida compartible, pero hay que saber de dónde sale. Cuando lo hicimos para la energía eléctrica, cuando había exceso de producción y exceso de ingreso, se guardaba para cuando había sequía, y en lugar de prender las centrales termoeléctricas para generar combustible y aumentar la tarifa, se sacaba el dinero de allí”, expresó.

FORMACIÓN DE PRECIOS.

“Hay otras cosas que nos invitan a discutir y no están” en el documento. A mí me preocupa la formación de precios. Hoy miraba el observatorio de precios de la UAM y es claro que el precio de frutas y verduras al productor está bajando. El productor vende al mercado más barato que la semana anterior, sin embargo en el cajón del mercado, de la feria y del supermercado, no baja”, comentó.

Desde la producción al precio final “hay diferencias importantes. ¿Qué pasa en el camino?”, se preguntó.

Por otra parte, “la importación de una cantidad de alimentos de Argentina con un dólar más barato, seguramente se está comprando también más barato”, por lo que la pregunta vuelve a ser la misma: “¿Por qué aumenta en la góndola?”

“Hay que trabajar sobre la formación de precios”, insistió.

LA NUEVA PANDEMIA.

Para el senador hay “una invitación a discutir sobre estos temas que nos desvelan a todos, que es la nueva pandemia. Ahora otra vez empezamos a mover perillas”.

“El Frente Amplio en ese comunicado descalifica por insuficientes y tardías las medidas del gobierno. Lo mismo nos dijo cuando tomamos medidas en plena pandemia, y lo mismo nos dijo con las vacunas, y al final los hechos nos dieron la razón”.

Finalizó diciendo que ante las diversas propuestas que lleguen a la Torre Ejecutiva, “el Gobierno tiene que gobernar, tiene que medir cada una de las consecuencias de sus decisiones y mover todas esas perillas al mismo tiempo”.

LAS PROPUESTAS DEL FRENTE AMPLIO.

Las propuestas del Frente Amplio fueron presentadas a la opinión pública en conferencia de prensa y luego al presidente Luis Lacalle.

Sobre los precios de la canasta básica, el FA propone “la eliminación del IVA” y apoya “la minuta que se presentó en el Senado, aprobada por la unanimidad de los partidos políticos en Comisión de Hacienda del Senado, que establece la eliminación de dicho impuesto sobre 19 productos, y agregamos que debe extenderse al supergas”.

Esas medidas “deben implementarse por un período no menor a seis meses y de forma inmediata, dado el amplio consenso político que genera esta urgencia”.

Además “proponemos un aumento al doble de las transferencias monetarias y luego ajustar mensualmente por IPC durante un año el monto de las transferencias realizadas por Tarjeta Uruguay Social (TUS) y Asignación Familiar Plan de Equidad (AFAM PE)”.

Para los salarios y jubilaciones, el FA propone “un aumento inmediato de los salarios públicos” a partir del 1º de mayo; “aumento adicional del salario mínimo nacional”; “aumento permanente en las jubilaciones que no sea deducible del aumento por Índice Medio de Salarios en enero de 2023”; “aumento adicional al anterior para las jubilaciones mínimas”.

Para los grupos que no tengan el correctivo de julio próximo, se propone su convocatoria y que “el Gobierno asegure aumento salarial en el mismo sentido de lo propuesto para el sector público”.

También “otorgar aumentos diferenciales para los trabajadores rurales de aquellos sectores que tuvieron un desempeño extraordinario en el último año, con ganancias extraordinarias”.

Para los combustibles, el FA insta al Gobierno a “crear un fondo de estabilización de precio de los combustible, con cargo a Rentas Generales para amortiguar el impacto de la suba de los combustibles”; y que se “profundice la política de protección de riesgos de los precios” con Ancap contratando “una cobertura de precio de petróleo y el tipo de cambio”.

Como últimos puntos la oposición reclama “medidas para atender a los sectores afectados por la pandemia que generaron endeudamiento”, y mayor “alivio fiscal en los comercios de frontera, con el objetivo de amortiguar las dificultades de competitividad que está sufriendo y que sufrirá con la apertura plena de las fronteras”. Cabe puntualizar que en sus propuestas, el Frente Amplio no explica cómo podrían ser financiadas.  

“La economía del mundo está complicada” y “todos tenemos que adaptarnos un poco”.

“La economía del mundo está complicada” y “todos tenemos que adaptarnos un poco”.

Ante las críticas de la oposición política, de economistas y del empresariado, el senador Jorge Gandini explicó el alcance de la decisión del Gobierno y defendió el equilibrio de la política económica y salarial en momentos de crisis e incertidumbre.

Hébert Dell’Onte | El lunes 18 de abril el presidente Luis Lacalle anunció el aumento de sueldos a empleados públicos y de pasividades, en un 2% y 3% respectivamente, a partir del 1° de julio. Aunque la medida había sido planteada por algunos referentes del Frente Amplio, como el senador Daniel Olesker (Partido Socialista), fueron muchas las voces que se levantaron en contra, coincidiendo en la crítica con algunos empresarios y economistas que generalmente la izquierda repudia por sus posiciones.

Para seguir con el ejemplo de Olesker, el senador escribió en sus redes sociales que “hace un mes dijimos que el Gobierno debe decretar un aumento de salarios del sector público y de jubilaciones en el mes de julio y convocar consejos de salarios para aplicar correctivos por inflación”. En ese momento “se cuestionó su validez, pero la realidad es más fuerte que la teoría”, recordó.

Agrega el legislador: “Hoy (por el lunes 18) el Gobierno que cuestionó (mi propuesta), la decreta”, con lo cual se reconoce “que la pérdida era muy grande y que, como dijimos, sin un cambio en la política salarial no hay solución posible”.

Sin embargo, el Frente Amplio, economistas del perfil de Javier de Hedo y empresarios han manifestado sus críticas por la decisión del Gobierno.

LA POLÍTICA SALARIAL DIRIGIDA A “MANTENER EL PODER DE COMPRA DE LOS SALARIOS”.

El martes 19, el senador Jorge Gandini (Movimiento Por La Patria, Partido Nacional) fue consultado en rueda de prensa sobre los anuncios del presidente Lacalle y opinó que la condiciones en que está el mundo han obligado al Gobierno a tomar decisiones que no estaban previstas con el fin de mantener el poder adquisitivo de los uruguayos, y que ese es el objetivo junto con la generación de empleos. Los dichos del legislador están en clara consonancia con lo expresado por el presidente y la ministra de Economía, Azucena Arbeleche.

“Hoy tenemos una pérdida del poder adquisitivo de los salarios por una inflación que estamos importando, y que es mayor de lo que estaba pensado, entonces se corrigen salarios antes del 1° de enero del próximo año”.

“Se da un aumento a los jubilados del 3%, que no es índice medio, es directo 3% a todos los jubilados y pensionistas; y un 2% para todos los públicos”. Paralelamente “se exhorta a los privados que no acordaron ajustes en esta época para que lo hagan”.

“Eso es política salarial” y va dirigida a “mantener el poder de compra de los salarios”, enfatizó.

Explicó que el comunicado del Poder Ejecutivo es claro cuando dice que es un “aumento adicional a mitad de año, o sea que no es un adelanto de lo que debería ajustarse el 1° de enero. En ese momento se analizará cuál es el aumento que corresponde por la inflación proyectada y se hará el correctivo que pueda haber por perdida de salario y recuperación como dice la Ley de Presupuesto”.

“No hay que olvidarse que durante la pandemia hubo un sacrificio de todos los sectores y se perdió salario, pero la ley establece que en 2022, 2023 y 2024 tiene que recuperarse” y equipararse con los guarismo de 2020.

LOS EMPRESARIOS CUESTIONAN EL CAMBIO EN LAS REGLAS DE JUEGO.

Algunos sectores empresariales criticaron la media. El presidente de la Cámara de Industrias, Alfredo Antía, opinó que la decisión sorprendió y es disruptiva. También se ha mencionado que hubo un cambo en las reglas de juego.

Al respecto Gandini dijo que “las reglas de juego han cambiado para el mundo entero. Que en EE.UU. haya 9% de inflación no se vio nunca, España tiene una inflación que solo tuvo en el año 85” y que toda Europa está de esa forma. “No quiero hablar de Argentina que ni siquiera tiene recursos de gas y petróleo para su propia producción y ya está violando el acuerdo que hizo con el FMI”.

Comentó que “la economía del mundo está complicada, entonces todos tenemos que adaptarnos un poco” para que no sigan perdiendo quienes viven de ingresos fijos, quienes tienen salarios mayoritariamente bajos. “Así que creo que todos vamos a tener que adaptarnos”.

En esa adaptación “el Gobierno va a tener que poner más de cien millones de dólares de aquí a fin de año por el aumento salarial y de pasividades” del 2% y 3%. “Eso no estaba pensado, hay que poner más de lo que pensábamos. Sí, a todos nos cambia un poco”, reflexionó Gandini.

EL EMPLEO ES LA PRIORIDAD.

Sobre las prioridades, el senador dijo que “una de las prioridades es el empleo”.

Describió a la economía como un equilibrio: “Si usted aumenta salarios, sobre todo en el sector privado, puede estar generando desempleo. Entonces hay que mantener el empleo y hacerlo crecer”, pero también “hay que recuperar el salario para que no se pierda poder de compra” y “hay que tratar de contener precios de productos de la canasta básica que aumentan en todo el mundo por la situación pospandemia y por la guerra”. Son “perillas” que “hay que mantener”, pero también “hay que dar confianza para que los inversores sigan creyendo en el país, sigan generando empleo y actividad”, finalizó.

De cuando “el susto despertó al mamado”, a la LUC.

De cuando “el susto despertó al mamado”, a la LUC.

Fue por el 550 antes de Cristo que Esopo escribió la fábula de la liebre y la tortuga, así que hemos tenido tiempo de aprender la lección, y ser liebres sin menospreciar la actitud de la tortuga.

Hébert Dell’Onte | En agosto del 2014 la senadora frenteamplista Lucía Topolansky dijo a los medios de comunicación una frase recurrente e inolvidable, que resultó ser una lección de política en tiempos de campaña: “El susto despertó al mamado”.

Con ese refrán la referente del Movimiento de Participación Popular (Frente Amplio) contestó a una consulta sobre la evolución de las encuestas que no había sido favorables al Frente Amplio en la campaña electoral de cara a las elecciones de noviembre.

Todas las encuestadoras habían divulgado resultados que indicaban que la oposición podría desplazar al Frente Amplio del Gobierno luego de 10 años de mayorías absolutas, pero el efecto de los porcentajes difundidos generó un empujón en el entonces oficialismo que repuntó y eso se reflejó en los estudios de opinión pública de ese momento.

Gracias a las encuestas adversas la militancia “se puso las pilas”, comentó Topolansky y agregó que “ojalá el mamado se despierte bien”. Luego dijo que “la única lucha que se pierde es la que se abandona, y no hemos abandonado, vamos a pelear hasta el último día”.

El resultado final fue que en noviembre de 2014 el Frente Amplio volvió a ganar y gobernó hasta 2020. Efectivamente, el susto despertó muy bien al mamado.

Actualmente todas las encuestas sobre el referéndum por la Ley de Urgente Consideración (LUC) dan una amplia ventaja al No, lo que genera entusiasmo en quienes defienden la ley, pero solo una voz se ha levantado para advertir lo peligroso y fácil que es pasar del entusiasmo al triunfalismo que siempre es irracional.

Esta semana el senador Jorge Gandini, líder de Por la Patria (Partido Nacional) advirtió que las encuestas que dan ventaja al No son las mismas que decían que no se llegaba a las firmas.

“Le tengo mucho respeto a la izquierda”, dijo Gandini a la emisora Principal de la ciudad de San José, y advirtió que los defensores del Sí pueden hacer un importante y efectivo despliegue de campaña “en los últimos 15 días” con un trabajo “de cuerpo a cuerpo y de comer orejas”, graficó.

El legislador recordó que esas cosas “ya nos pasaron”, y que el ejemplo más reciente fue en el balotaje de noviembre de 2019, donde “un Daniel Martínez muy debilitado y con una fórmula con problemas, sacó el 42% en octubre y 49% en noviembre. Mejoró 7 puntos, remó más de 100.000 votos. Y lo mismo nos pasó con las firmas: las encuestadoras que hoy le dan bárbaro al No son las mismas que decían que no se juntaban”.

El mensaje es claro: la capacidad de recuperación de la izquierda es formidable y los seres humanos somos propensos a dejarnos estar cuando las cosas van bien.

Fue por el 550 antes de Cristo que Esopo escribió la fábula de la liebre y la tortuga (luego reescrita por otros), así que hemos tenido tiempo de aprender la lección, y ser liebres sin menospreciar la actitud de la tortuga.

Si el Senado vota el proyecto sobre forestación, el Ejecutivo va a vetar.

Si el Senado vota el proyecto sobre forestación, el Ejecutivo va a vetar.

El presidente dijo que el Poder Ejecutivo elaboró “un decreto que llevó mucho tiempo zurcir por las tensiones que eventualmente pueden surgir entre los ministerios de Ambiente y de Ganadería respecto al sector forestal, y estamos muy conformes con esa reglamentación”.

Hébert Dell’Onte | En la tarde ayer, en conferencia de prensa a su regreso del viaje a Catar, el presidente Luis Lacalle fue preguntado sobre la muy probable votación a favor de del proyecto de ley que regula la forestación. “Si se vota el proyecto de ley el Ejecutivo va a vetar”, respondió el mandatario. El texto en consideración es impulsado por Cabildo Abierto y cuenta con el apoyo del Frente Amplio.

Lacalle explicó que los cinco partidos que conforman la coalición de Gobierno (Partido Nacional, Partido Colorado, Cabildo Abierto, Partido Independiente y Partido de la Gente) conformaron “el documento ‘Compromiso por el país’ que nos compromete a todos, entre nosotros y con la opinión pública. Todo lo que está por fuera de ese acuerdo no tiene un compromiso recíproco entre los distintos partidos”.

Agregó que el proyecto en cuestión fue presentado por Cabildo Abierto (su autor es el diputado Rafael Menéndez) y ese partido “está en todo su derecho”, pero “está por fuera de ‘Compromiso por el país’, con lo cual quien habla se ve liberado a actuar según su propia concepción”.

Por tanto, “si se vota el proyecto de ley el Ejecutivo lo va a vetar”, enfatizó.

Lacalle dijo que el Poder Ejecutivo elaboró “un decreto que llevó mucho tiempo zurcir por las tensiones que eventualmente pueden surgir entre los ministerios de Ambiente y de Ganadería respecto al sector forestal, y estamos muy conformes con esa reglamentación”.

DOMENECH – GANDINI, DOS VISIONES.

El senador Guillermo Domench (Cabildo Abierto) dijo que si el presidente veta el proyecto de ley, “sería un desaire y una grave discordancia con un socio de la coalición”.

En una visión diferente, el senador Jorge Gandini (Partido Nacional) comentó que el hecho “no influye el funcionamiento de la coalición”.

Pin It on Pinterest