El clima extremo amenaza importantes zonas agrícolas del mundo.

El clima extremo amenaza importantes zonas agrícolas del mundo.

Desde el mar Negro hasta el Medio Oeste de Estados Unidos, el clima extremo amenaza la producción agrícola.

Montevideo | Todo El Campo | Las adversidades climáticas se dan de forma simultánea en varios puntos del planeta. Sequías duras, abundantes precipitaciones, con áreas donde un fenómeno es seguido de otro sin que haya tiempo de recuperación. La afectación a los cultivos es evidente y crece la amenaza sobre el correcto funcionamiento de las chacras; también distorsiona el mercado mundial, la disponibilidad global de alimentos y debilita la seguridad alimentaria, principalmente en los países más necesitados de adquirir productos agrícolas para garantizar el suministro en su población.

Un reporte de Reuters fechado el lunes 24 indica que desde el mar Negro hasta el Medio Oeste de Estados Unidos, el clima extremo amenaza la producción agrícola.

La nota señala que por la sequía pronosticada en el granero de la región del mar Negro frene los rendimientos de girasol y maíz, sin embargo, las fuertes lluvias en Estados Unidos después de que las temperaturas casi récord amenazan con afectar los cultivos. Sea sequía o precipitaciones, el resultado es el mismo: se perjudican los suministros mundiales y  suben los precios.

Chris Hyde, meteorólogo de Maxar, con sede en Estados Unidos, dijo que “el pronóstico del tiempo para la región del mar Negro es una gran señal de alerta”.

Lo que sucede es que en todo el mundo están habiendo registros de situaciones adversas extremas. Las temperaturas récord en las principales regiones productoras del mundo han retrasado la siembra y perjudicado a los cultivos en desarrollo. Zonas agrícolas en Rusia, China, India y Estados Unidos están pasando por condiciones extremadamente calurosas y precipitaciones por debajo de lo normal.

Los precios mundiales del trigo subieron a un máximo de 10 meses en mayo después de que el clima adverso recortó los rendimientos de la cosecha madura en Rusia, el mayor exportador.

El clima caluroso en el sur de Rusia afectará a los cultivos debido a la falta de humedad del suelo, y también se esperan menos precipitaciones y calor en los Urales, Siberia occidental y Transbaikalia, dijo el Centro Hidrometeorológico de Rusia en un pronóstico también citado por Reuters.

Más acá, en el sur y el este de Ucrania, también se está sufriendo un clima cálido y seco, con precipitaciones entre el 1° de mayo y el 10 de junio de solo el 20-50% de lo normal, según el meteorólogo estatal, y la sequía dificulta el desarrollo de los cultivos de invierno y primavera en partes de las regiones de Kharkiv y Donetsk.

“El mes de mayo en Ucrania resultó ser uno de los más secos de los últimos 30 años”, dijeron los meteorólogos estatales. De todas maneras, “en las regiones septentrionales, en particular en Zhytomyr, el granizo causó daños en los cultivos de primavera, como el maíz, la soja y el girasol”.

LLUVIAS: DE LA FALTA AL EXCESO.

Estados Unidos en tanto, uno de los principales exportadores de alimentos, pasa por un intenso calor en la costa este, mientras que las lluvias excesivas en la región clave de cultivo del Medio Oeste y los pronósticos de un clima más húmedo han aumentado los temores de inundaciones.

Hyde agregó: “En el Medio Oeste, el enfoque está cambiando del calor al exceso de lluvia, lo que podría resultar en inundaciones en las áreas productoras de maíz y soja, especialmente en el Medio Oeste Superior”.

Para Asia, se espera que las abundantes lluvias alivien la sequía severa que están afectando algunas zonas de China, uno de los principales compradores de soja, mientras que es probable que las lluvias durante el monzón de la India, que están una quinta parte por debajo de lo normal, se recuperen, impulsando la agricultura. India es el mayor exportador de arroz del mundo y el principal importador de aceite comestible.

“La producción de maíz y soja de China en el norte y el este ha estado seca y es preocupante”, dijo Hyde. “Pero se espera que el clima sea normal o ligeramente superior a las precipitaciones normales en el período julio-setiembre, lo que será beneficioso para los cultivos”.

Las inundaciones son también una amenaza, ya que se podría pasar de la falta al exceso de agua. “Habrá que estar atentos a los rápidos cambios en las sequías e inundaciones”, dijo, y agregó que la mayor humedad también puede aumentar el riesgo de enfermedades y plagas en los cultivos.

Se espera que el tiempo en Australia sea normal, con algunas zonas recibiendo lluvias superiores a la media, lo que mejorará las perspectivas para la cosecha de trigo, mientras que también se pronostica un tiempo principalmente normal en los próximos meses en Argentina y Brasil.

En base a artículo de Naveen Thukral en Reuters

EE.UU. Sequía otoñal preocupa a ganaderos por los daños en los pastizales en el invierno.

EE.UU. Sequía otoñal preocupa a ganaderos por los daños en los pastizales en el invierno.

El 17% del estado de Alabama se encuentra en sequía extrema y el 31% en sequía severa.

Montevideo | Todo El Campo | En el estado de Alabama (sur de Estados Unidos), la falta de lluvias en el otoño hemisferio norte han hecho que la sequía se intensifique y afecte negativamente la producción de ganado.

Clay Kennamer, un ganadero y productor de vacas y terneros en el condado de Jackson (sur del estado de Alabama), dijo que si bien no planea sacrificar ningún ganado más allá de su cantidad normal, anticipa gastar una cantidad significativa de dinero para mantener a sus animales alimentados durante el invierno.

Este año, el productor no pudo plantar avena hasta tarde, y la poca o ninguna lluvia no ha permitido que el cultivo crezca a un nivel pastable. “Normalmente, ya habría estado pastando el ganado”, contó, pero este año es imposible.

Kennamer comentó que la avena y el raigrás que sembró para forraje de invierno no lo ayudarán hasta marzo como muy pronto, y advirtió que ni siquiera puede encontrar las hileras donde se plantó. Sin embargo, el forraje no está muerto, sino que es la falta de un clima y luz adecuados, junto con una siembra tardía, está impidiendo que crezca. Pero si pudiéramos tener aunque sea una semana con la temperatura adecuada “podríamos cultivar algo”.

Pero el último mapa (publicado a continuación) muestra la sequía para Alabama, donde el 17% del estado se encuentra en sequía extrema (D3). El 31% está en sequía severa (D2). El 19% está en sequía moderada (D1). Y el 22% está anormalmente seco. Solo el 11% del estado está libre de estrés por sequía. (Mapa detallado del monitor de sequía de Alabama).

Matt Webb, un agente de extensión, también en Jackson (Alabama), y productor de ovejas, dijo que algunas lluvias de las últimas tres semanas han ayudado a que los pastos germinen, pero que no ayudarán a los productores de ganado en lo inmediato.

El invierno será un desafío para los productores, que puedan estirar sus reservas que este año comenzaron a distribuirlas entre el ganado antes de lo acostumbrado. Los productores ya están preocupados en ver cómo complementar el alimento para estirar sus suministros de reservas forrajeras.

Según Webb, la calidad de los pastizales es realmente baja y ha sido mala desde octubre. Afortunadamente, una buena temporada de crecimiento permitió a los productores guardar reservas para alimentar al ganado durante los meses de invierno, lo cual es y será de ayuda.

Sin embargo, lo que realmente le preocupa, debido a las condiciones de sequía, es la cantidad de daños a los pastizales que tendrán lugar durante el invierno. “Me temo que vamos a ver muchos pastizales sobrepastoreados”, señaló.

En un esfuerzo por evitar demasiado daño a los pastizales, los productores deberían trasladar su ganado a un área que no les importe sacrificar, “ya sea cerca de la fuente de alimento o de un campo con problemas de fertilidad”, entonces los costos de renovar esas áreas serán menores, planteó Webb, pero no todos tienen esa posibilidad.

Otro consejo es que protejan sus pastizales y para eso deben mantener al ganado alejado de ellos hasta que el pasto pueda alcanzar una altura considerable y apropiada a las circunstancias.

“Cierra las porteras, y cualquier hierba que haya por ahí, dale un respiro”, para que pueda ser una buena fuente de alimento en los próximos meses, concluyó.

En base artículo de Charmayne Hefley en Success ful Farming.

Foto de portada: bandera de Alabama.

Banco de Desarrollo CAF realizará aportes al MGAP para atender efectos de la sequía.

Banco de Desarrollo CAF realizará aportes al MGAP para atender efectos de la sequía.

El acuerdo del MGAP con CAF es para “atender a las poblaciones más vulnerables frente al impacto de la sequía en Uruguay”.

Montevideo | Todo El Campo | El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca anunciará hoy, oficialmente y en conferencia de prensa, que firmará un convenio con el CAF-Banco de Desarrollo de América Latina- por US$ 250.000.

En contrapartida se financiarán 19 soluciones colectivas que comprenderán la construcción de pozos y tajamares por parte del Ministerio, además de la instalación de sistemas de bombeo, líneas de distribución y bebederos.

El acuerdo del MGAP con CAF es para “atender a las poblaciones más vulnerables frente al impacto de la sequía en Uruguay”.

La sequía golpeó la producción agropecuaria en US$ 1.809 millones, de acuerdo a la información que el equipo económico trasladó al Parlamento al hacer entrega de la Rendición de Cuentas en estudio.

El anuncio del acuerdo MGAP-CAF se realizará hoy a las 12.30.

La conferencia de prensa contará con la participación del ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, y del representante de CAF en Uruguay, François Borit. Participará un representante del Congreso de Intendentes y la coordinadora referente Mercedes Antía, subdirectora de Dirección General de Desarrollo Rural del MGAP.

¿Se viene un “regalo” del norte? Advierten que no puede descartarse una sequía feroz en EE.UU. que catapulte el precio de los granos

¿Se viene un “regalo” del norte? Advierten que no puede descartarse una sequía feroz en EE.UU. que catapulte el precio de los granos

Cuando todo indicada que las principales variables presentes en el mercado global de productos agrícolas eran fundamentalmente bajistas, apareció un factor inesperado que puede llegar a torcer ese pronóstico.

Algunos analistas de mercados agrícolas comenzaron a advertir que no puede descartarse que este año ocurra en el Medio Oeste de EE.UU. un evento similar al registrado en 2012, cuando una sequía destruyó buena parte de las cosechas estadounidenses y catapultó los precios del maíz y a soja hacia la estratósfera.

Tal es el caso del veterano analista Jerry F. Welch, quien este domingo advirtió que las restricciones hídricas presentes en varios sectores del Medio Oeste son peores que las presentes en la misma fecha de 2012.

La mala noticia para los “farmers” es que siguen sin aparecer perspectivas de precipitaciones para los próximos siete días, lo que implica que el déficit hídrico seguirá agravándose día tras día en las zonas afectadas.

Por supuesto, si llegasen a aparecer lluvias abundantes en la segunda quincena del próximo mes de junio la situación podría restablecerse para retornar hacia condiciones cercanas a las normales. Pero hasta el momento no es factible saber si tal evento ocurrirá.

Vale recordar que en 2012 muy pocos advirtieron en EE.UU. la feroz sequía que venía en camino hasta que la tuvieron directamente en “frente de sus narices”, pues la mayor parte de los analistas, técnicos y productores se quedaron esperando la aparición de lluvias que finalmente jamás llegaron.

El dato clave es que las existencias de maíz y especialmente de soja correspondientes al presente ciclo comercial 2022/23 son muy limitadas y EE.UU. necesita, por lo tanto, lograr cosechas abultadas de ambos productos para recomponer stocks internos.

Por otra parte, el hecho de que los administradores de fondos de inversión agrícolas que operan en el CME Group (“Chicago”) hayan desarmado ya posiciones “compradas” en futuros de soja y maíz contribuirá a consolidar un eventual escenario alcista propiciado por el riesgo climático presente en EE.UU.

Fuente: Valor Soja

¡Cuidado, la sequía aún no terminó!

¡Cuidado, la sequía aún no terminó!

 Las lluvias registradas “son alivios que no resuelven el problema, no hay tiempo suficiente de recuperación ni de los cultivos, ni de las pasturas”.,

Hébert Dell’Onte Larrosa | Montevideo | Todo El Campo | El jueves se confirmó que el Gobierno va a extender, desde el 24 de abril y por 150 días (5 meses), la declaración de emergencia agropecuaria en todo el territorio para las rubros ganadería, lechería, horticultura, fruticultura, agricultura, apicultura, avicultura y forestación. El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, dijo que con la medida se busca “mantener todas las estructuras productivas de pie”.

El dato -la extensión de la emergencia agropecuaria para todo el país hasta setiembre próximo- importa a todo el sector agropecuario, especialmente a los rubros mencionados, por eso fue el Ministerio del agro el que lo comunicó, sin embargo, es un tema que afecta al país y que debería interesar a todos.

No obstante, durante mucho tiempo, el déficit hídrico y la sequía solo fueron tratados en profundidad por los medios, secciones o programas especializados en rurales, y apenas marginalmente por el resto de los medios de comunicación, lo que hizo que buena parte de la población no tomara conciencia del tamaño del desastre.

Por supuesto que todos sabíamos que no llovía desde hace meses y que eso no es bueno para nadie. Pero una cosa es saber que tenemos un problema y otra es calibrar su gravedad.

En la capital, donde muchos creen vivir en un país que no necesita del agro, durante diciembre fue frecuente escuchar comentarios de personas que ante alguna nube gris en el horizonte miraban el cielo esperando que no lloviera para no ver arruinadas sus despedidas de fin de año; lo mismo pasó en enero y febrero, cuando descansar e ir a la playa se convierte en una prioridad; o en marzo durante el Carnaval: “Que hoy no llueva porque se suspende la etapa”, decían. Era la diversión desplazando en importancia todo lo demás.

Pero hubo un punto de quiebre: los principales informativos de televisión comenzaron a mostrar imágenes o hacer informes debajo de los puentes sin agua, allí donde siempre hubo un acaudalado río, ahora se podía cruzar a pie y sin mojarse. A eso se sumó la escasez en las reservas para consumo humano. Recién entonces muchos se espabilaron y asumieron conscientemente que estábamos en un problema de magnitud, que la sequía no solo jorobaba a la gente del campo, también al de la ciudad.

Para entonces hacía tiempo que los cultivos se habían perdido, las aguadas secado y el ganado continuaba muriendo de sed y hambre. Y en ese escenario, el productor tratando de sacar lo mejor de la naturaleza, aunque ésta se lo negara.

Luego de mucho tiempo las lluvias finalmente llegaron y trajeron un alivio generalizado. Es verdad que los cultivos perdidos no se recuperaron, que la ganadería corre contra el tiempo para recuperar kilos y estado antes que llegue el invierno, y obviamente los animales que murieron son irrecuperables. Pero en su natural optimismo el productor cambió su semblante y sabe -confía- en que debe mirar para adelante pensando en lo que se viene.

Pero cuidado, porque la sequía aún no terminó. El propio Mattos lo dijo: A pesar de las lluvias del mes de marzo que causaron alivio en buena parte del país se espera un abril deficitario en cuanto a precipitaciones. “Son alivios que no resuelven el problema, no hay tiempo suficiente de recuperación ni de los cultivos, ni de las pasturas”, sostuvo.

En ese sentido, el 17 de abril, el presidente del Instituto Nacional de la Leche (Inale), Juan D Vago comentó en su cuenta de Twitter: “Poca lluvia por Colonia, 5mm o menos. Se precisaría un 40 o 50mm antes de entrar al invierno”.

Foto: Twitter productor.familiar @enryyarzon1

Pin It on Pinterest