Podcast INIA sobre “Sostenibilidad de los sistemas arroz-ganadería”.

Podcast INIA sobre “Sostenibilidad de los sistemas arroz-ganadería”.

Ing. Macedo: “La llave debe ser que sea económicamente viable”.

Montevideo | Todo El Campo | El Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) presentó un nuevo episodio de podcast titulado “Sostenibilidad de los sistemas arroz-ganadería”, de 9 minutos de duración.

En la descripción del episodio se plantean interrogantes: “¿Qué se está investigando en Uruguay? ¿En qué consiste el trabajo que se desarrolla hace 12 años en la UPAG Versión 2 (Unidad de Producción Arroz Ganadería)?  ¿Qué ventaja comparativa tiene el país? ¿Cómo se trabaja para avanzar en procesos de certificación?”

El Ing. Agr. Ignacio Macedo ha trabajado bastante en un experimento de largo plazo que existe desde el año 2012 en la UPAG, donde se evalúan distintas cuestiones relacionado a los sistemas de producción basados en arroz y con rotaciones. Específicamente en el experimento de rotaciones, se está evaluando la eficiencia de uso de agua a nivel de rotación, esto es, no solo en el cultivo de arroz, sino en los otros componentes o fases de la rotación.

El técnico define que la sostenibilidad refiere a la capacidad de mantener la productividad y rentabilidad de la actividad agropecuaria en largo plazo, sin comprometer recursos naturales y garantizando el bienestar económico y social. Y esta puede ser evaluada a través de distintos indicadores que reflejen alguna o todas las dimensiones, o cuando digo menciones hablo de la dimensión económica, social y ambiental.

Macedo subraya que “la llave debe ser que sea económicamente viable”. Y en este sentido, Uruguay es pionero porque siempre ha tratado de “entender el impacto ambiental de los sistemas de producción”.

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INIA indicó que seguirá con el foco puesto en los sistemas de producción arroz-ganadería.

Por aportes, preguntas y comentarios, escríbenos a: inia@inia.org.uy

Encefalitis equina detectado en Salto es la variante menos agresiva.

Encefalitis equina detectado en Salto es la variante menos agresiva.

Tranquilidad en la región. De las tres variantes posible, la de Argentina y Uruguay es la de mortalidad más bajas. Igualmente se trabaja en su erradicación.

Montevideo | Todo El Campo | La ministra de Salud Pública, Karina Rando, había advertido que una de las cepas de encefalitis equina tiene un comportamiento agresivo con el ser humano pudiendo causar la muerte de los afectados, sin embargo esa posibilidad -el peor escenario- fue descartado al identificarse y tipificarse el virus detectado en un caballo en el departamento de Salto.

Hay tres tipos de encefalitis equina: encefalitis equina del Este (EEE), encefalitis equina venezolana y encefalitis equina del Oeste (EEO).

La detectada en Uruguay fue la encefalitis equina del Oeste, informo el MSP en la tarde noche del martes 5. Esta variante comparte con las demás al mosquito como vector trasmisor, pero tiene una tasa de mortalidad más baja que las otras y es la misma que se detectó en Argentina.

La EEO afecta principalmente a caballos, pero también puede infectar a otros mamíferos, incluidos los humanos. Las aves a menudo actúan como reservorios del virus en la naturaleza y pueden contribuir a la propagación del virus.

Los síntomas en caballos infectados incluyen fiebre, letargo y signos neurológicos graves como incoordinación, ceguera y convulsiones.

Las medidas de prevención incluyen el control de mosquitos y la vacunación de caballos, por lo que se están haciendo todas las gestiones para el ingreso de más vacunas a nuestro país.

Los equipos técnicos y veterinarios del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP) trabajan en colaboración con los profesionales del MSP en el monitoreo y control permanente de esta enfermedad.

Paysandú fumiga zonas aledañas a donde hay más caballos para evitar mosquitos.

Paysandú fumiga zonas aledañas a donde hay más caballos para evitar mosquitos.

Paysandú cumple con las condiciones de proliferación de los mosquitos: inundaciones, humedad y calor. Para contrarrestar esa situación se entregarán repelentes y ya se están aplicando fumigaciones.

Paysandú | Todo El Campo | El intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, dijo en rueda de prensa que la encefalitis equina ya es conocida en Uruguay, “ya nos ha pasado”, y anunció que para evitar más contagios se está fumigando.

“Quien tiene la capacidad de transmitir ese virus es un mosquito, y estamos en el peor de los mundos. Con las lluvias que ha habido, con las inundaciones que tenemos en Paysandú y en la zona ribereña, y con la presencia de esta amenaza”, planteó.

Señaló que “obviamente” la Intendencia está coordinando con el Sinae “la entrega de muchos repelentes y en proceso de fumigación”.

“Las fumigaciones tienen cierto alcance, no resuelven el problema del todo pero los mosquinos son hoy el gran problema” y “nuestra preocupación están en las zonas donde hay caballos, zonas aledañas al hipódromo, zonas donde la gente tiene caballos”, enfatizó.

“El mosquino no se desplaza más de cien metros, y tenemos que evitar el contacto entre el mosquito, el caballo y las personas. Hoy el gran combate que debemos generar es contra el mosquito”.

“Tenemos el río dentro de la ciudad, el calor y ahora con la presencia de esta peste, la verdad que no estamos ligando”, concluyó.

Fucrea cerró un muy mal año para las empresas agrícolas ganaderas.

Fucrea cerró un muy mal año para las empresas agrícolas ganaderas.

En agricultura, los resultados son los peores de la historia. La lechería mantuvo la productividad pero a fuerza de altísimos costos, en un ejercicio muy trabajoso, pero no muy malo.

Hébert Dell’Onte Larrosa | Montevideo | Todo El Campo | El lunes 4, Fucrea realizó la conferencia de cierre de fin de año, un evento anual en que la institución presenta un resumen de sus actividades y los resultados de las empresas CREA.

La bienvenida, presentación de la conferencia, así como el cierre, estuvo a cargo del presidente de Fucrea, Pablo Sánchez, en tanto que los datos de las empresas las expuso Martín Aguirrezabala, coordinador general de la institución.

Fucrea cuenta con 50 grupos en cuatro sectoriales, 598 empresas dispersas en todo el país y 70 técnicos. 2023 cierra con más de 500 actividades de los grupos y 38 conferencias, jornadas, talleres y giras, en un año particularmente difícil por las condiciones adversas generadas por la sequía acumulada.

RESULTADOS ECONÓMICOS 2022/2023.

Respecto a la siguiente gráfica, cabe precisar que el ingreso de capital (IK) estima el resultado económico simulando que la tierra y el capital son propios; no se considera el costo de la tierra y capital. Permite comparar sistemas, pero sin considerar situación financiera.

Las empresas ganaderas CREA lograron un producto bruto de US$ 301 por hectárea y un ingreso de capital de US$ 77 por hectárea. La variación respecto al año 21/22 fue de -66%, la variación sobre el promedio de -38%. Y la rentabilidad 22/23 de apenas 1,8%.

Para las empresas agrícolas ganaderas, el producto bruto se ubicó en US$ 839 por hectárea; el ingreso de capital de US$ 12. La variación sobre 21/22 de -98%; la variación sobre el promedio de -96%; y la rentabilidad de 0,1%.

Las empresas lecheras fueron las mejor posicionadas: el producto bruto fue de US$ 2.919 por hectárea; el ingreso de capital de US$ 375; la variación sobre 21/22 de -50% y la variación sobre el promedio de -7%. La rentabilidad de 3,7%.  

AGRICULTURA, LOS PEORES RESULTADOS DE LA HISTORIA.

En el análisis del ingreso de capital en dólares por hectárea y los costos de producción, la lechería es el único sector que cubre el costo de la tierra y el costo capital.

Ante los datos expuestos, Aguirrezabala comentó que hace un año, en diciembre 2022, ya se comenzaron a dar mensajes sobre las dificultades que se veían venir: alerta sobre costos, sobre la productividad, y la amenaza de sequía.

El año 22/23 efectivamente se presentó sumamente desafiante, con costos altos, la caída de la productividad por la sequía y una caída estrepitosa de precios ganaderos en comparación con los meses anteriores.

Respecto a la ganadería en sí, los precios cayeron más del 30%, pero las estrategias comerciales de los productores lo atenuaron (implícito cae 20%). Por otra parte, la productividad cae sólo 6%, a pesar de la sequía. En ese período las pérdidas patrimoniales fueron muy altas.

En agricultura, a pesar de precios razonables y buena zafra de invierno, los resultados son los peores de la historia con una consecuencia de abandono de buena parte de las chacras.

La lechería mantuvo la productividad pero a fuerza de altísimos costos y el traslado de las deudas hacia adelante. Fue “un ejercicio muy trabajoso, pero no muy malo”, definió Aguirrezabala.

En cuanto a la granja, observó que hubo una muy importante caída de rendimientos, y problemas de calidad en la fruta, a excepción de la uva de vino. “Resultados muy malos”, sintetizó.

PERSPECTIVAS DE LO QUE SE VIENE.

En el cierre, Aguirrezabala planteó la interrogante de qué esperar para el futuro inmediato.

Para los ganaderos, la visión de Fucrea es que continuarán los precios deprimidos, aunque hay expectativa de mayor productividad, que difícilmente compense la caída de precios.

Las empresas agrícolas-ganaderas esperan un invierno con buenos rendimientos, pero calidades complicadas. Los precios limitan los márgenes de invierno, aunque Fucrea esperas que se pueda compensar en verano.

La lechería muestra precios menores pero firmes, y costos de alimentación menores. La primavera está ayudando, pero también es clave atender y hacer un buen manejo de deuda. Los resultados esperables son similares a 22/23, vaticinó.

Resultados de ganadería bajo riego en Coronel Suárez, Argentina.

Resultados de ganadería bajo riego en Coronel Suárez, Argentina.

Impresionante producción de carne bajo riego.

Buenos Aires, Argentina | Todo El Campo | En Coronel Suárez, localidad ubicada el centro sur de la provincia de Buenos Aires, y de fuerte producción agropecuaria se produce carne bajo riego.

La consultora ganadera Elizalde & Riffiel informó sobre el excelente resultado en 411 hectáreas de raigras anual sembrado en marzo bajo suelo profundo con algunas lomas de tosca. “Se realizó una ambientación y para las lomas con tosca se utilizó la variación Sancho y para lo profundo el tetraploide Magno”, explicó.

DATOS TÉCNICOS.

El planteó técnico: “100 kg de diamónico a la siembra más 350 kg de urea en 3 fertilizaciones previo al riego. Durante el cultivo se regó con 210mm y llovieron 530mm”.

“Carga de 7,4 terneros por hectárea y en primavera se agregó 1,5 vaca parida por hectárea”.

“Se pastoreó durante 170 días a partir del 20 de mayo, hasta el 20 de noviembre”

DETALLE DE LA PRODUCCIÓN.

La producción de carne por hectárea: 1.132 kg más producción de un rollo promedio por hectárea y 2 toneladas verdes de silaje de raigrás.

Fotos de Elizalde & Riffiel.

Documento de IICA muestra que emisiones adjudicadas a ganadería no se contabilizan adecuadamente y son menores a las alegadas.

Documento de IICA muestra que emisiones adjudicadas a ganadería no se contabilizan adecuadamente y son menores a las alegadas.

En la presentación del documento en la COP28 participó el ministro Fernando Mattos, entre otros.

Dubái, Emiratos Árabes Unidos | IICA | Todo El Campo | La ganadería bovina tiene un impacto mucho menor sobre el calentamiento global al que se alega si se miden las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que efectivamente le corresponden, las del período de cría de animales, y se excluyen las que le adjudican, que provienen de otros sectores de la economía, reveló un estudio presentado en el pabellón del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) en la COP28.

El estudio, plasmado en el documento “Ganadería bovina y cambio climático en las Américas: hacia modelos de desarrollo bajos en carbono” de autoría del científico argentino Ernesto Viglizzo, advierte que las publicaciones que atribuyen a la ganadería una parte significativa de la responsabilidad sobre el cambio climático son equivocadas porque le adjudican emisiones que no le corresponden, provenientes de otros sectores de la economía, como el industrial, el transporte, el residencial, la distribución o el consumo doméstico.

El investigador puntualiza en el estudio que solo las emisiones de la actividad ganadera son las que deberían imputarse a las cadenas de la carne de vacuno. “Un productor ganadero -indica- no puede cargar sobre sus espaldas emisiones que no dependen estrictamente de sus actividades sino de otros sectores”.

Algunos países importadores de alimentos utilizan un sistema llamado de Huella de Carbono, a través del que estiman las emisiones de un producto, levantando frecuentemente barreras comerciales a productos que ingresan desde terceros países, que en el caso de la carne incluyen no solo las emisiones generadas por la producción ganadera sino las que ocurren en otros sectores, como los frigoríficos, el transporte y la distribución mayorista o minorista.

Esta metodología, que arroja un resultado muy elevado, difiere de la recomendada por el Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC), máxima autoridad científica mundial en la materia, que imputa las emisiones a los sectores que la generan.

Sectores como el frigorífico, el transporte y la distribución, posteriores a la actividad ganadera, generan gran cantidad de emisiones, ya que consumen combustibles fósiles, responsables principales del cambio climático.

Viglizzo es un referente internacional en temas de ganadería, suelos y cambio climático e Investigador Principal del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina y de la principal organización científica estatal de su país, el Conicet. Ingeniero agrónomo, doctorado en la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica), es también miembro de la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria de Argentina.

Entre los servicios que ha prestado figura el de la coordinación del programa nacional de Gestión Ambiental del INTA y del IICA-Procisur.

Además, integró equipos científicos de organizaciones internacionales que estudian el cambio climático y el ambiente global, como el IPCC, GEO 5, Millennium Ecosystem Assesment y Subglobal Assessment, entre otros.

Por su contribución científica al IPCC, fue distinguido con una réplica del Premio Nobel de la Paz 2007, que el IPCC compartió con Al Gore, vicepresidente de los Estados Unidos.

Por invitación, ha disertado acerca de la problemática climática y ambiental de las Américas en las Universidades de Harvard, Oxford, y en eventos realizados en París, Berlín, Ginebra, Lovaina, Stellenbosch (Sudáfrica) y universidades de Latinoamérica. Ha sido también invitado como editor y coeditor de números especiales de prestigiosas editoriales científicas internacionales como Springer-Nature y Elsevier.

En el pabellón del IICA participaron de la presentación del documento el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca de Uruguay, Fernando Mattos; y la secretaria de Innovación, Desarrollo Sustentable, Irrigación y Cooperativismo del Ministerio de Agricultura y Ganadería de Brasil, Renata Miranda; el director general del IICA, Manuel Otero; el subdirector general del Instituto, Lloyd Day -quien actuó como moderador- y Ruaraidh Petre, director ejecutivo del Global Roundtable for Sustainable Beef (GRSB).

MATTOS: LA GANADERÍA HA SIDO VÍCTIMA DE EMBATES MUY DAÑINOS.

Mattos elogió el documento elaborado por Viglizzo y aseguró que “hemos sido víctimas en las últimas décadas de embates muy dañinos para la imagen del sector agropecuario, intentando responsabilizarnos como uno de los mayores causantes de las emisiones de GEI”.

Sin embargo, “es el único sector productivo de la economía que es imprescindible para la seguridad alimentaria y debe interpretarse como lo que es: un sector que captura carbono”.

El ministro uruguayo agregó que “somos esenciales para la seguridad alimentaria del mundo y debemos continuar insistiendo en que deben estar disponibles los fondos para ayudar a la adaptación a los países que están sufriendo los mayores efectos de la variabilidad climática”.

Por su lado, la secretaria (viceministra) del Ministerio de Agricultura y Ganadería de Brasil, Renata Miranda, indicó que “cuando hablamos de ganadería y cambio climático debemos hablar de reducir emisiones y de adaptación, porque si no nos adaptamos no tendremos condiciones de producir alimentos en el futuro”.

La funcionaria brasileña, quien manifestó su satisfacción con el contenido del estudio y felicitó al IICA por impulsar este tipo de publicaciones, aseguró también que “necesitamos recordar quienes son los mayores emisores (de GEI) y el sector del que estas emisiones provienen”.

“NO JUGAR CON UN SECTOR QUE SALVA Y ALIMENTA VIDAS”.

Ruaraidh Petre, en tanto, agradeció al IICA por el documento, defendió una “industria que alimenta personas” y recordó que “sin comida no podemos tener esta discusión, tendríamos hambre”.

Pidió, en ese sentido, “no jugar con un sector que salva y alimenta vidas”, y destacó su capacidad de secuestrar carbono. “Podemos alimentar 9.000 millones de personas sin agregar emisiones de gases de efecto invernadero. Somos el sector que tiene capacidad de secuestrar carbono y alimentar al mundo”, puntualizó.

LA MITAD DEL PIB AGRÍCOLA EN LA REGIÓN.

Otero, por su parte, recordó en tanto que la ganadería explica la mitad del PIB agrícola de América Latina y el Caribe y que genera divisas por 23.000 millones de dólares con la carne de vacuno, además de otros 3.000 millones con productos lácteos.

“La ganadería en la región ha realizado importantes avances hacia la transformación de sistemas ganaderos sostenibles, con estrategias para reducir los impactos en agua, suelo y emisiones, incluyendo desarrollo tecnológico y adopción de buenas prácticas. Tenemos que demostrarlo ante los diferentes foros internacionales y eso estamos haciendo”, señaló.

INFLUENCIA QUE NO SUPERA EL 5%

“Si se le imputasen al ganado bovino únicamente sus emisiones biogénicas (las producidas por las vacas) se comprobaría fácilmente que su impacto en el clima global es mucho menor que el estimado. En la actualidad ese valor no supera el 5% de las emisiones globales y tiende a disminuir porcentualmente cuando se lo compara con las emisiones globales de carbono de todos los sectores de la economía y la sociedad”, señala el trabajo de Viglizzo.

El documento afirma que el impacto global es menor cuando se estiman las emisiones del ganado en las Américas, debido a que predominan los sistemas pastoriles, que tienen la posibilidad de compensar, total o parcialmente, las emisiones del carbono del ganado mediante la fotosíntesis.

Resultados de investigaciones de campo reflejadas en el estudio demuestran que es posible diferenciar, mediante métodos relativamente sencillos, a los productores que generan créditos de carbono de aquellos que no lo hacen. Así, se abre la puerta para valorizar a los primeros, que son parte de la solución del cambio climático.

El científico plantea que las Américas ha iniciado un proceso de transición hacia modelos de desarrollo ganaderos bajos en carbono. En ese contexto, el carbono capturado debería ser acreditado como un commodity comerciable, como son la carne, la leche, los granos. Y respecto a la reducción de emisiones, la región debería ser incluida en proyectos que certifiquen créditos por esos resultados.

También debe tenerse en cuenta que la emisión de metano, el gas de efecto invernadero predominante en la ganadería vacuna, tiene un tiempo promedio de residencia en la atmósfera de unos 11,8 años, mucho menos que el tiempo de residencia del dióxido de carbono, que se estima en unos 1.000 años.

El trabajo agrega: “Otro aspecto importante, generalmente ignorado en las líneas argumentales dominantes, es que la incidencia del ganado bovino de carne en las emisiones globales de carbono ha tendido a disminuir persistentemente en los últimos 60 años. Simplemente, esto significa que las emisiones debidas a la quema de combustibles fósiles han crecido a una tasa significativamente mayor que la tasa de aumento de las emisiones biogénicas del ganado bovino”.

En el estudio también se hace un recorrido por los paquetes de tecnología climáticamente inteligentes que ya están aplicándose en la ganadería y, con los que es posible capturar decenas de billones anuales de carbono y generar balances positivos que beneficiarían a todas las cadenas agroalimentarias.

Algunas de esas prácticas son: diseño de distintas configuraciones silvopastoriles, uso de enmiendas orgánicas, meteorización de rocas (rock weathering) a través de la trituración de silicatos que producen captura inorgánica de carbono atmosférico, elaboración de fertilizantes a través de energías renovables, uso de aditivos reductores de metano en rumiantes, reducción de pérdidas y desechos de alimentos, aplicación de carbono vegetal por combustión de biomasa (biochar), y producción de biofertilizantes y biogás a partir de heces y orina.

VISIONES DISTORSIONADAS.

El documento advierte que durante los últimos 20 años numerosos medios académicos y científicos del mundo han focalizado en el impacto supuestamente negativo de la ganadería bovina sobre el ambiente, el clima y la salud humana.

El trabajo presentado en el pabellón del IICA hace hincapié en que esa visión omite considerar los roles y funciones esenciales que juegan los sistemas de producción bovina en ambientes y ecosistemas.

También -dice el texto- ese punto de vista soslaya el rol esencial que la ganadería vacuna cumple desde el punto de vista de la seguridad alimentaria y el papel que cumple en la realidad social y en las economías de los países en desarrollo.

En el caso de las carnes y los lácteos, además, son sectores claves para mejorar el ingreso de los ganaderos en regiones poco desarrolladas, y son una fuente de divisas que estabiliza las economías de los países productores y exportadores.

“Estos son aspectos de alta relevancia social que a menudo los centros académicos y científicos de países industrializados omiten selectivamente”, concluye el estudio.

El pabellón Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas fue instalado por el IICA junto a sus 34 Estados Miembros y organizaciones aliadas de los ámbitos público y privado en la COP28, la edición 28 de Conferencia de las Partes, órgano político supremo de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), que cuenta con 197 Estados Partes.

Hasta el 12 de diciembre, el pabellón albergará las discusiones del más alto nivel sobre el rol de la agricultura de las Américas en los esfuerzos de mitigación y adaptación al calentamiento global.

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