Abr 29, 2022 | Noticias, Política
El presidente Luis Lacalle está ante una oportunidad única de dar un mensaje correcto y contundente de diálogo y acercamiento a la oposición.
Hébert Dell’Onte | Esta semana el Frente Amplio entregó en la Torre Ejecutiva una serie de propuestas para atender la situación económica del país, las familias y los trabajadores en general. El Gobierno las estudiará y responderá oportunamente.
El primer y gran error que tiene el documento del Frente Amplio es que carece de financiación, pero no es descabellado pensar que algunas de las medidas sean aceptadas y puestas en práctica ya que también es muy probable que muchas de ellas estén siendo evaluadas y estudiades por el equipo económico del Gobierno de forma previa a la presentación de la oposición.
La oportunidad que tienen el presidente Lacalle respecto a la oposición no es contestarle afirmativamente a uno, dos o cinco de las medidas propuestas, sino convocar al presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, a su despacho para tener una instancia de diálogo e informarle allí lo que se resuelva.
En la historia democrática de Uruguay el diálogo y las conversaciones entre los diferentes sectores y partidos ha sido una herramienta primordial y básica. Hoy el mundo nos reconoce ese valor, y si supimos llegar hasta aquí debemos saber conservarlo y tratar de seguir mejorándolo.
Muy cerca tenemos ejemplos de lo que se ha llamado la “grieta”, un concepto que refleja lo que los uruguayos no queremos, pero sobre todo no somos, aunque hay algunos que en su afán de crecer políticamente o de beneficiar a su corriente prefieren la división y la voladura de puentes.
Pero los uruguayos en su mayoría no somos así. Nos gustan los puentes, valoramos cuando los presidentes de Nacional y Peñarol trabajan juntos para erradicar la violencia en el deporte, y valoramos cuando Gobierno y oposición buscan y abren esas ventanas de diálogo que no significa estar de acuerdo, sino plantear puntos de acuerdo para trabajar en ellos.
No recuerdo cuando fue la última vez que el presidente del Frente Amplio y el presidente de la República se reunieron e intercambiaron opiniones. Se sí que el debate sobre la Ley de Urgente Consideración dividió las agua, las encrespó y alguna vez las encolerizó, pero ese debate quedó atrás y estamos en el tiempo de recomponer.
Ya vendrán instancias en las que exponer diferencias y discursos encendidos. Pero no nos adelantemos, sepamos que es tiempo de dialogar. Por el bien del país.
Abr 27, 2022 | Economía, Noticias, Política
El Frente Amplio presentó una serie de propuestas con el fin de reactivar la economía, pero no explica ni sugiere cómo financiarlas.
Hébert Dell’Onte | El FA presentó una batería de medidas que tienden a ayudar en la difícil situación del país, con una inflación que se dispara y que según se ve en todo el mundo continuará siendo así en tanto la economía, el comercio y las finanzas globales no se encausen en los senderos perdidos primero con la pandemia y luego con la invasión de Rusia a Ucrania.
Para el senador Jorge Gandini (Partido Nacional) las propuestas que presentó el Frente Amplio son bienvenidas, pero no pasan de ser “un listado de buenas intenciones.
“Lo primero que hay que destacar es el diálogo. Anoche las presentaron públicamente y hoy las recibe el presidente de la República, y se instala un espacio de diálogo directo entre el presidente del partido de la oposición y el presidente de la República, eso es muy destacable.”
No obstante ese diálogo necesario en todo sistema democrático, al profundizar en el contenido de las propuestas, el legislador dijo que es un “listado de buenas intenciones”.
“Es un listado de buenas intenciones, pero no dice como se costean. Algunas tienen un alto costo económico en materia de renuncias fiscales y de dedicación de recursos, que hay que saber de dónde salen, porque, obviamente, si hay que financiar eso a través de renuncias fiscales o dedicaciones presupuestales nuevas, eso aumenta el déficit fiscal que empuja la inflación, y la inflación le pega a los bolsillos de los trabajadores y de los jubilados, es un círculo vicioso que también hay que romper”.
“Da para analizar, hay algunas medidas que compartimos, hay otras que hay que estudiarlas mejor. El Fondo de Estabilización de los Combustibles es una medida compartible, pero hay que saber de dónde sale. Cuando lo hicimos para la energía eléctrica, cuando había exceso de producción y exceso de ingreso, se guardaba para cuando había sequía, y en lugar de prender las centrales termoeléctricas para generar combustible y aumentar la tarifa, se sacaba el dinero de allí”, expresó.
FORMACIÓN DE PRECIOS.
“Hay otras cosas que nos invitan a discutir y no están” en el documento. A mí me preocupa la formación de precios. Hoy miraba el observatorio de precios de la UAM y es claro que el precio de frutas y verduras al productor está bajando. El productor vende al mercado más barato que la semana anterior, sin embargo en el cajón del mercado, de la feria y del supermercado, no baja”, comentó.
Desde la producción al precio final “hay diferencias importantes. ¿Qué pasa en el camino?”, se preguntó.
Por otra parte, “la importación de una cantidad de alimentos de Argentina con un dólar más barato, seguramente se está comprando también más barato”, por lo que la pregunta vuelve a ser la misma: “¿Por qué aumenta en la góndola?”
“Hay que trabajar sobre la formación de precios”, insistió.
LA NUEVA PANDEMIA.
Para el senador hay “una invitación a discutir sobre estos temas que nos desvelan a todos, que es la nueva pandemia. Ahora otra vez empezamos a mover perillas”.
“El Frente Amplio en ese comunicado descalifica por insuficientes y tardías las medidas del gobierno. Lo mismo nos dijo cuando tomamos medidas en plena pandemia, y lo mismo nos dijo con las vacunas, y al final los hechos nos dieron la razón”.
Finalizó diciendo que ante las diversas propuestas que lleguen a la Torre Ejecutiva, “el Gobierno tiene que gobernar, tiene que medir cada una de las consecuencias de sus decisiones y mover todas esas perillas al mismo tiempo”.
LAS PROPUESTAS DEL FRENTE AMPLIO.
Las propuestas del Frente Amplio fueron presentadas a la opinión pública en conferencia de prensa y luego al presidente Luis Lacalle.
Sobre los precios de la canasta básica, el FA propone “la eliminación del IVA” y apoya “la minuta que se presentó en el Senado, aprobada por la unanimidad de los partidos políticos en Comisión de Hacienda del Senado, que establece la eliminación de dicho impuesto sobre 19 productos, y agregamos que debe extenderse al supergas”.
Esas medidas “deben implementarse por un período no menor a seis meses y de forma inmediata, dado el amplio consenso político que genera esta urgencia”.
Además “proponemos un aumento al doble de las transferencias monetarias y luego ajustar mensualmente por IPC durante un año el monto de las transferencias realizadas por Tarjeta Uruguay Social (TUS) y Asignación Familiar Plan de Equidad (AFAM PE)”.
Para los salarios y jubilaciones, el FA propone “un aumento inmediato de los salarios públicos” a partir del 1º de mayo; “aumento adicional del salario mínimo nacional”; “aumento permanente en las jubilaciones que no sea deducible del aumento por Índice Medio de Salarios en enero de 2023”; “aumento adicional al anterior para las jubilaciones mínimas”.
Para los grupos que no tengan el correctivo de julio próximo, se propone su convocatoria y que “el Gobierno asegure aumento salarial en el mismo sentido de lo propuesto para el sector público”.
También “otorgar aumentos diferenciales para los trabajadores rurales de aquellos sectores que tuvieron un desempeño extraordinario en el último año, con ganancias extraordinarias”.
Para los combustibles, el FA insta al Gobierno a “crear un fondo de estabilización de precio de los combustible, con cargo a Rentas Generales para amortiguar el impacto de la suba de los combustibles”; y que se “profundice la política de protección de riesgos de los precios” con Ancap contratando “una cobertura de precio de petróleo y el tipo de cambio”.
Como últimos puntos la oposición reclama “medidas para atender a los sectores afectados por la pandemia que generaron endeudamiento”, y mayor “alivio fiscal en los comercios de frontera, con el objetivo de amortiguar las dificultades de competitividad que está sufriendo y que sufrirá con la apertura plena de las fronteras”. Cabe puntualizar que en sus propuestas, el Frente Amplio no explica cómo podrían ser financiadas.
Dic 10, 2021 | Información, Opinión, Política
El objetivo de la movida combinada entre el Frente Amplio y el PIT-CNT parece ser debilitar al Gobierno en cuantos frentes les sea posible y para eso todo viene bien, incluso los pequeños debates que nada tienen para aportar.
Hébert Dell’Onte| La coordinación de la arremetida sindical de los últimos días es evidente. Pero no solo los sindicatos han desarrollado una estrategia de alto impacto, también el Frente Amplio, lo cual es lógico considerando la afinidad entre ambos. El objetivo de la movida combinada parece ser debilitar al Gobierno en todos los frentes posibles y para eso todo viene bien.
Este miércoles se dieron don hechos que evidencia el “vale todo” para el juego opositor. El primero tiene que ver con la confirmación de las firmas que cuestionan la Ley de Urgente Consideración (LUC), y concretamente refiere al color de las papeletas del SI y del NO.
La Corte Electoral decidió que quienes van por SI, o sea sí derogar los 135 artículos en debate, usarán la papeleta color rosado, en tanto que los van por el NO, o sea no derogar los 135 artículos, tendrán papeleta celeste.
Conocidos esos colores, desde el PIT-CNT y el FA salieron voces a cuestionar la resolución de la Corte porque consideran que el rosado los perjudica porque “en Uruguay todos somos celestes”, dijo Pablo Abdala. “Vamos a impugnar”, anunció, sumando otro elemento de confrontación y lo que es peor pone un manto de dudas sobre el accionar de la Corte Electoral. Esto último es tan serio y preocupante como ridículo.
Es serio y preocupante porque nuestra Corte Electoral es un organismo de garantías y no se lo puede poner en duda por el color de las papeletas. Pero también es ridículo porque ya en otras oportunidades, como el referéndum sobre la Ley de Ancap (2003) durante el gobierno del Dr. Jorge Batlle, se utilizaron esos mismos colores lo que no implicó ninguna maniobra y no recuerdo que haya habido planteamientos de intenciones ocultas o manipulación a pesar de que muchos de los dirigentes sindicales de entonces eran los mismos que ahora (los cargos casi vitalicios de los sindicalistas es otro tema de debate).
Además, si el color de una papeleta incidiera significativamente en el voto, eso sucedería por dos motivos: la poca inteligencia de nuestra sociedad, lo cual es falso, o por la flojera de los argumentos de alguna de las partes.
De todas formas, en el año 2003 ganó el SI cuya papeleta era color rosado, y perdió el NO de color celeste.
OTRA DISCUSIÓN ABSURDA: EL CRUCIFIJO DE CIPRIANI.
Otra discusión de ribetes absurdos es lo plateado por el diputado Enzo Malán (Frente Amplio) por el crucifijo que el director de ASSE, Dr. Leonardo Cipriani, colocó en su despacho.
Ante eso, apenas un par de consideraciones: Las oficinas personales no son lugares públicos, no lo es la de Cipriani como tampoco la de Malán.
Además, el diputado socialista cae en una contradicción fragrante: es práctica más que habitual en los legisladores colocar banderas político partidarias y simbología político sectorial, pero no en el encierro de las cuatro paredes de sus oficinas, sino hacia el exterior donde circulan personas de todas las posiciones y posturas políticas, delegaciones o comitivas de diferentes instituciones.
A su vez hasta hemos visto ingresar al plenario de la Cámara de Representantes a algún legislador con insignias o elementos alusivos a partidos políticos o ideologías identificadas con el Frente Amplio, y hasta con referencia a otros países y dictaduras, sin que el referido legislador se mostrara afectado.
Como vemos, a Uruguay le están faltando los grandes debates que el país necesita, y la oposición sindical y política no ayudan para que eso suceda.
Foto: Búsqueda.