Ministro de Agricultura español defiende cultivos transgénicos en cumbre con sus pares de la Unión Europea.

Ministro de Agricultura español defiende cultivos transgénicos en cumbre con sus pares de la Unión Europea.

El dato importa porque en la Unión Europea se rechazan los cultivos en los que se aplican tecnologías genéticas.

Montevideo | Todo El Campo | Un reciente artículo publicado en Todo El Campo indicó que en 2022 la superficie de cultivos transgénicos en el mundo aumentó 3,3%, hasta los 202,2 millones de hectáreas, con respecto a 2021. Un nuevo récord con la mayor superficie sembrada con esta tecnología. (Enlace del artículo completo al pie de la nota*)

En Europa, España parece ser el único país que tiene claro la importancia de las nuevas tecnologías que mejoran genéticamente diferentes cultivos, y que además se anima hacer alguna diferencia respecto al resto de los países del Viejo Continente, más ocupados en escuchar y atender discursos ambientalistas de muy buena prensa pero muy alejados de los posicionamientos científicos.

“Luis Planas apuesta por las nuevas tecnologías de mejora genética para luchar contra el cambio climático”, así se titula la nota de prensa del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España a la que accedió Todo El Campo. (Documento al pie de la nota).

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas, participó del Consejo Informal de Ministerio de Agricultura de la Unión Europea, cumbre realizada en Estocolmo, Suecia, donde dijo que las nuevas tecnologías de mejora genética son aliadas estratégicas que pueden mejorar la productividad y la rentabilidad en la agricultura, y aseguró que son una herramienta eficaz para luchar contra el cambio climático.

También reclamó que se unan esfuerzos para incorporar la investigación y la innovación en los procesos productivos y lograr sistemas alimentarios que sean más justos, sostenibles, saludables y resilientes.

Las afirmaciones del ministro español fueron en el marco del debate sobre el papel de la agricultura y la silvicultura comunitarias en la transición ecológica, ya que ambas contribuyen al abastecimiento de energía, alimentos y materiales producidos de forma sostenible.

Planas entiende que la Unión Europea debe tener un marco jurídico que fomente la innovación al sector agrario, no solo para dotarle de certidumbre y seguridad jurídica, sino para atraer y fijar talento y las inversiones necesarias.

Las tecnologías de mejora genética en la agricultura permiten incrementar los rendimientos y la calidad de las producciones, así como lograr variedades más resistentes a la falta de agua, subrayó.

Es oportuno recordar que el 1° de julio España recibió de Suecia la presidencia del Consejo de la Unión Europea.

A ese respecto, un tuit de Luis Planas destacó como “claves del semestre”, los siguientes temas: “La autonomía estratégica agroalimentaria” y “la incorporación de los nuevos avances tecnológicos en el sector”.

(*) Artículo referido: Los cultivos transgenicos logran nuevo record en superficie global 2022/

Los cultivos transgénicos logran nuevo récord en superficie global 2022.

Los cultivos transgénicos logran nuevo récord en superficie global 2022.

Australia, Brasil, Vietnam, Honduras y Uruguay tuvieron mayor aumento en área y adopción. Se destacan nuevos transgénicos comerciales como el trigo tolerante a sequía en Argentina, el arroz dorado en Filipinas y caña de azúcar tolerante a plagas en Brasil.

Montevideo | Todo El Campo | La superficie global dedicada a los cultivos transgénicos aumentó un 3,3% en 2022 con respecto al año anterior alcanzando los 202,2 millones de hectáreas, un nuevo récord con la mayor superficie sembrada con esta tecnología. Estos y otros datos fueron publicados en el último informe anual de AgrobioInvestor GM Monitor (*).

Un total de 27 países cultivaron una gama de 11 cultivos transgénicos diferentes, siendo la soja la más sembrada con 98,9 millones de hectáreas, seguida por el maíz con 66,2 millones de hectáreas, el algodón con 25,4 millones de hectáreas y la canola con casi 10 millones de hectáreas.

El año 2022 vio las primeras cosechas comerciales de arroz transgénico en Filipinas (el famoso arroz dorado). El número de países que siembran cultivos GM ha variado desde la primera introducción de variedades transgénicas en 1996, debido en parte a que varios países europeos dejaron de cultivar maíz GM, así como al final de la siembra de algodón GM en Burkina Faso. Si bien 27 países sembraron cultivos transgénicos a nivel comercial en 2022, esto también se logró en 2015.

Los mayores cambios en superficie, excluyendo países que cultivan menos de 100.000 hectáreas, se observaron en Australia (74,6%), Vietnam (+60,7%), Honduras (+36,8%) y Uruguay (+15,3%), impulsados por una combinación de mayor áreas plantadas en general y mayores tasas de adopción.

Los mayores descensos en la superficie de transgénicos se observaron en España (-30,0%), Pakistán (-10,0%), Filipinas (-5,2%), China (-3,2%) y Canadá (-3,0%).

La tabla y los gráficos de barras a continuación muestran la tasa de adopción global de cada cultivo. El algodón contiene la tasa más alta de porcentaje de utilización de transgénicos con un 80,4% de la superficie algodonera total del mundo, seguido de la soja con un 73,7%, el maíz con un 32,9% y la canola con un 23,8%. Después de esto, la tasa de adopción global cae rápidamente.

Respecto a la tasa de adopción global de cada cultivo: el algodón contiene la tasa más alta de porcentaje de utilización de transgénicos con un 80,4% de la superficie algodonera total del mundo. Le sigue la soja con un 73,7%, el maíz con un 32,9%, la canola con un 23,8% y la remolacha azucarera con un 11,4% . Después de esto, las tasas de adopción global para la berenjena, caña de azúcar, arroz y trigo, las tasas de adopción son muy bajas, al ser estos cultivos muy recientes y con aprobaciones comerciales particulares en solo uno (trigo, arroz, berenjena) o dos países (caña de azúcar).

A nivel regional o continental, Europa tiene la superficie de transgénicos más pequeña del mundo con solo 71.112 hectáreas en 2022. La mayor parte de esta superficie se encuentra en España, donde se cultiva el maíz transgénico en el 95,1 % de las regiones. Históricamente, varios países europeos cultivaron maíz transgénico a nivel comercial, sin embargo, solo quedan España y Portugal, debido a la restrictiva y compleja situación regulatoria en la Unión Europea, a pesar del llamado de las academias científicas, la Comisión Europea y gremios productivos locales que abogan desde hace más de 10 años por el retraso tecnológico respecto a sus pares en los otros continentes.

Fuente ChileBio con adaptaciones para Todo El Campo.

(*) AgrobioInvestor GM Monitor, web: agbioinvestor.com

Los 5 principales productores de transgénicos de Latinoamérica festejan el Carnaval.

Los 5 principales productores de transgénicos de Latinoamérica festejan el Carnaval.

Si hay disfraces, papel picado y carrozas ¡hay biotecnología agrícola en Carnaval!

Montevideo | Todo El Campo |  Brasil, Argentina, Paraguay, Bolivia y Uruguay son los 5 mayores productores de transgénicos de Latinoamérica y en febrero festejan Carnaval, una celebración con orígenes religiosos que se transformó en una gran fiesta popular. Te contamos algo de cada país.

Brasil es el segundo productor de cultivos transgénicos del mundo, el primero de Latinoamérica y donde se celebra uno de los carnavales más famosos del planeta: el de Río de Janeiro.

Entre carrozas, danzas y comparsas seguramente los asistentes a este hermoso espectáculo coman feijão (poroto o frijol) transgénico resistente al virus del mosaico dorado. Este cultivo fue desarrollado por investigadores de Embrapa y se denomina RMD, por “resistencia al mosaico dorado”.

Gracias a él se logró aumentar el rendimiento de los cultivos y reducir el uso de pesticidas para combatir al vector del virus del mosaico dorado. ¡Ya se comercializa y está en los supermercados y mesas de los brasileños!

ARGENTINA.

Argentina es el tercer productor de cultivos transgénicos del mundo y segundo de Latinoamérica y tiene varios carnavales populares atractivos como el de Gualeguaychú en la provincia de Entre Ríos y los carnavales norteños en Tilcara y Humauaca en la provincia de Jujuy.

Asimismo, muchos pueblos y ciudades rurales organizan carnavales, los cuales son un punto de encuentro y motor de economías regionales, al ser una oportunidad para ofrecer productos agropecuarios de cada zona.

En los feriados de carnaval (y durante todo el año) los argentinos usan o consumen productos derivados de los tres principales cultivos transgénicos que siembra Argentina: soja, maíz y algodón. Pero ¿hay algo de biotecnología agrícola en carnaval? ¡Claro que sí!

Te lo contamos: algunos de los coloridos trajes pueden ser confeccionados con telas de algodón. Además, es posible que alguna carroza sea impulsada por biodiesel, un biocombustible que en Argentina se obtiene a partir del aceite de soja. Además, durante el proceso de producción del biodiesel se obtiene la glicerina, presente en productos industriales como pinturas, tintas, barnices que se utilizan para pintar pancartas y las carrozas.

PARAGUAY.

Paraguay es el tercer productor de cultivos transgénicos de Latinoamérica y, como Argentina, siembra soja, maíz y algodón genéticamente modificado.

Además de los corsos y celebraciones urbanas, en Paraguay hay celebraciones autóctonas como por ejemplo el Arete Guazú, una celebración de los guaraníes en el Chaco paraguayo.

BOLIVIA.

Bolivia tiene una producción agrícola importante, principalmente en la región del oriente, donde se produce soja (que llaman soya) transgénica que se exporta como grano y derivados a varios países de Latinoamérica.

Si bien Bolivia no está entre los principales productores de transgénicos, sí ocupa un lugar de privilegio en el ranking de los mejores carnavales del mundo, ya que su Carnaval de Oruro fue declarado por la Unesco como “Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad”.

URUGUAY.

Uruguay, el quinto productor de cultivos transgénicos de Latinoamérica, tiene un carnaval muy distintivo al ritmo del candombe y se dice que es el carnaval más largo del mundo. Uruguay cultiva soja y maíz transgénicos.

Ya nombramos a la soja y cómo está presente en las fiestas de carnaval, pero ¿hay algo de maíz en las celebraciones? El grano de maíz tiene cuatro componentes principales: almidón, fibra, proteína y aceite. Del procesamiento de ellos se obtienen más de 4.200 productos que van desde alimentos para personas y animales hasta papeles, telas, pegamentos y combustibles.

Argenbio | Para más información sobre biotecnología agrícola en Latinoamérica, visitar www.biotec-latam.com

Ante exigencia de EE.UU., México queda sin fundamentos científicos para prohibir el maíz transgénico.

Ante exigencia de EE.UU., México queda sin fundamentos científicos para prohibir el maíz transgénico.

En las últimas horas el gobierno mexicano, encabezado por Manuel López Obrador, debió reconocer lo infundado de prohibir los alimentos transgénicos.

Hébert Dell’Onte | Montevideo | Todo El Campo | Los cultivos transgénicos suelen ser cuestionados sin fundamento científico. Por el contrario, la ciencia los avala. Es la publicidad intensa y repetitiva de grupos que se dicen “naturalistas”, “ambientalistas” y otros “istas” similares -y que cuentan con buena prensa- la que se ha impuesto en diferentes países del mundo.

Los grupos antitransgénicos han hecho un buen trabajo difundiendo su parecer, el problema es que con esa posición causan un daño enorme privando a parte de la población mundial, que generalmente pertenecen a países empobrecidos, con problemas climáticos o de tierra, de la tan mentada seguridad alimentaria.

En las últimas horas el gobierno mexicano, encabezado por Manuel López Obrador, debió reconocer lo infundado de prohibir los alimentos transgénicos.

El caso es que cada año, Estados Unidos envía a México 16 millones de toneladas de maíz transgénico por unos US$ 5.000 millones, sin embargo el país caribeño decidió cambiar su política y dejar de importarlo. La decisión parte de un decreto del presidente López Obrador firmado en el año 2020.

En respuesta a la medida asumida por López Obrador, la Representación Comercial de Estados Unidos cursó una nota con fecha 30 de enero a la secretaria de Economía mexicana, Raquel Buenrostro, pidiendo que ese país diera pruebas científicas de las prohibiciones, amparándose en un requisito de un acuerdo comercial entre ambos países.

“Queremos asegurarnos de que hagan ciencia, que muestren su trabajo y tomen decisiones basadas en evaluaciones de riesgo”, dijo a la prensa Doug McKalip, el negociador jefe de comercio agrícola de la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR).

La Ec. Buentrostro tenía tiempo hasta el martes 14 para responder, pero en lugar de dar los fundamentos científicos para explicar las razones por las que su país no quiere comprar maíz transgénico, el lunes 13 aplazó la decisión de no comprar ese producto a su vecino del norte hasta 2024.

Los hechos se imponen una vez más: México -como ningún gobierno del mundo- tiene sustento científico y por tanto no pueden explicar por qué quieren evitar el uso de transgénicos.

Lo más triste es que con argumentos sensacionalistas y de apariencia naturalista muchos se oponen a los avances de la ciencia, por ejemplo respecto a los cultivos transgénicos que son de mucha utilidad productiva en tierras áridas o salinas, como en zonas donde falta el agua o hay dificultades sanitarias y un largo etcétera. No hay que oponerse a lo que redunda en beneficio de la humanidad.

Desarrollan una resistencia duradera para la roya asiática de la soja.

Desarrollan una resistencia duradera para la roya asiática de la soja.

El rasgo transgénico desarrollado proporcionará una herramienta adicional de manejo de enfermedades para los agricultores.

Debido a las condiciones invernales suaves, la soja en América Latina es particularmente vulnerable a la roya asiática (ASR), una enfermedad fúngica que puede causar una pérdida de rendimiento del 10 al 80 por ciento en los países donde está establecida, lo que conlleva un riesgo significativo para los agricultores y los sistemas agrícolas. La colaboración entre 2Blades Foundation y Corteva Agriscience (*) ha permitido producir un rasgo transgénico para la resistencia a la ASR, con ensayos de campo exitosos de variedades de soja latinoamericanas que contienen el nuevo transgén.

El rasgo transgénico desarrollado proporcionará una herramienta adicional de manejo de enfermedades para los agricultores de la región, aumentando la durabilidad de la resistencia a las enfermedades y las opciones para estrategias integradas de manejo de enfermedades. Aunque los avances científicos anteriores habían llevado a algunas mejoras en el control de la ASR de la soja en países como Brasil, la resistencia genética duradera no se había conseguido, y es una herramienta importante para que los agricultores mitiguen el riesgo de la enfermedad.

“La roya de la soja es un desafío clave para los productores y debe combatirse con una estrategia integrada”, explicó Peter van Esse, vicepresidente y líder de grupo de 2Blades. Además, añadió que la resistencia genética contra ASR ayudará a brindar a los productores una herramienta poderosa para controlar la enfermedad de una manera más efectiva y sostenible.

El conocimiento de 2Blades sobre la resistencia a enfermedades, combinado con la competencia en pruebas de laboratorio y de campo de Corteva, así como la experiencia en desarrollo de productos, impulsaron la decisión inicial de colaborar en 2013. De 2013 a 2018, llevaron a cabo una investigación conjunta para identificar nuevos genes de resistencia a ASR. (Fundación Antama).

(*) 2Blades Foundation 2Blades y Corteva Agriscience

Pin It on Pinterest