Ante el actual contexto geopolítico y, en particular, tras la victoria de Donald Trump en las elecciones en Estados Unidos, el Gobierno español cree oportuno el acuerdo entre ambos bloques.
Madrid, España | Todo El Campo | Al arribo del consejo de ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE), el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas (foto), defendió este lunes la “importancia” de firmar el acuerdo UE con Mercosur.
En declaraciones a los medios de comunicación, el jerarca adelantó que en su intervención iba a “subrayar la importancia” que tiene para la UE el acuerdo con el Mercosur.
“Es un elemento muy importante y más en las circunstancias geopolíticas que estamos viviendo. Creo que lo es globalmente y también lo puede ser para el sector agroalimentario”, expresó.
España vende al Mercosur productos agroalimentarios por valor de 400 millones de euros, mientras que importa este tipo de bienes en unos 4.000 millones, por lo que «hay una balanza muy desequilibrada” que la UE debería “ser capaces de equilibrar”.
La UE y Mercosur cerraron su acuerdo comercial en 2019 tras dos décadas de negociaciones, pero su firma está bloqueada por el rechazo de algunos países europeos, con Francia a la cabeza, que ha llevado a la UE a introducir exigencias adicionales de sostenibilidad que las partes aún están negociando.
Planas se preguntó: “¿Le interesa en estos momentos a la Unión Europea encerrarse sobre sí misma?, ¿o le interesa en este contexto geopolítico que estamos viviendo, y después particularmente de las elecciones norteamericanas, ampliar la red de nuestros acuerdos comerciales con países terceros para mantener nuestra influencia también económica y comercial? Yo creo que la respuesta es muy clara”.
ESPAÑA – ESTADOS UNIDOS.
El ministro dijo que España seguirá de cerca las cuestiones comerciales con Estados Unidos, porque ese país “exporta 3.000 millones de euros más o menos anualmente a Estados Unidos, es uno de nuestros mercados más importantes desde el punto de vista de la exportación fuera de la Unión Europea”.
En 2019 Trump aplicó aranceles a más de cien productos españoles, por unos 7.000 millones de euros. En 2021 los aranceles fueron suspendidos por cinco años, la disposición está pendiente de eliminación definitiva y siguen vigentes los aplicados a la aceituna negra de mesa.
En Reino Unido, el 23% de los adultos dicen que compran carne de origen vegetal una vez al mes”.
Montevideo | Todo El Campo | Las tendencias en el consumo de alimentos siguen siendo indefinidas, aunque es evidente que los productos vegetales como carnes alternativas forman parte de la dieta, con más o menos preferencia, de cada vez más personas.
La semana pasada la fundación y laboratorio de ideas Good Food Institute Europe (GFI Europe) difundió un estudio titulado “Información sobre el mercado minorista de alimentos de origen vegetal en España” en el que destaca que en 2023 el 40,4% de los hogares españoles compraron leches vegetales, y un 20% carnes alternativas. Además, el año pasado las ventas del sector minorista de productos vegetales creció un 7,5% y sumó en total 451 millones de euros.
El análisis se realizó en comercios de ventas minoristas en hipermercados y supermercados, no en restaurantes.
La leche y el queso vegetal fueron los mayores responsables del aumento de las ventas; se estima que cuando se analice el mercado de 2024 se mantendrá la demanda con una firmeza similar a 2023.
TAMBIÉN LOS BRITÁNICOS.
Otro estudio de GFI Europe, pero este centrado en Gran Bretaña, considera que “los alimentos de origen vegetal son parte de un cambio pequeño pero razonablemente generalizado en los hábitos de compra del Reino Unido: el 23% de los adultos ahora dicen que compran carne de origen vegetal una vez al mes”.
Las implicaciones económicas serán especialmente notables para más de 120.000 explotaciones ganaderas y cerca de 300 empresas, en su mayoría pymes situadas en zonas rurales.
Madrid, España | Todo El Campo | El aplazamiento del reglamento de deforestación de la Unión Europea es una buena noticia para los países del Mercosur que había solicitado esa postergación en la fecha en que comenzaría a regir. Desde Uruguay se había pedido una postergación. Pero la medida es tan compleja que genera costos también para los países miembros de la Unión Europea, en el caso de España, son 158 millones de euros por año sólo en el sector cárnico.
El monto millonario implica un desafío y a pesar del reciente aplazamiento en la fecha de implementación, los requisitos adicionales para garantizar que los productos no provengan de tierras deforestadas después del 31 de diciembre de 2020 se traducirán en un aumento de 23 céntimos por kilo de carne producida, según datos de Provacuno, informó Cárnica.
Con muy buena intención, la del cuidado del medio ambiente, la Unión Europea aprobó un reglamento que afecta directamente a la carne de vacuno y otros productos agrícolas como la soja, el cacao y el café. Sin embargo, las implicaciones económicas serán especialmente notables para más de 120.000 explotaciones ganaderas y cerca de 300 empresas, en su mayoría pymes situadas en zonas rurales, dice el sitio especializado en brindar información sobre el sector carnes.
La normativa exige sistemas de trazabilidad reforzados para garantizar que los productos no provienen de áreas deforestadas, lo que representa un reto importante para la industria, agrega y agrega que parte de la carne de vacuno que se consume en España proviene de la importación. Con esta nueva norma, los exportadores de carne deberán demostrar que sus productos no están vinculados a la deforestación, lo que implica cumplir con estrictos requisitos de trazabilidad. Esto incluye proporcionar evidencia de la cadena de suministro, desde la granja hasta el consumidor final, para asegurar que la producción no haya contribuido a la deforestación desde 2020 en adelante.
Además, los países exportadores de carne que no puedan cumplir con los estándares europeos podrían perder acceso al mercado de la UE, lo que llevaría a una reorientación de sus exportaciones hacia mercados con regulaciones menos estrictas.
APLAZAMIENTO DE LA APLICACIÓN HASTA 2025.
El objetivo del aplazamiento es ofrecer más tiempo a los operadores para adaptar sus cadenas de suministro y asegurar el cumplimiento de la normativa. De todas maneras, el reglamento ya está en vigor desde junio de 2023, pero su aplicación se ha pospuesto en un año. Si el Parlamento Europeo confirma la decisión, las obligaciones comenzarán el 30 de diciembre de 2025 para grandes operadores, y el 30 de junio de 2026 para micro y pequeñas empresas.
El desafío es que “tenemos el cambio climático” y con él “la necesidad de impulsar la productividad y la sostenibilidad, esa es la estrategia transversal”, dijo Jens Hartmann, director de Bayer Crop Science.
Montevideo | Todo El Campo | En los últimos días Bayer volvió a estar en el centro de atención por razones ajenas a función y objetivos específicos, sino debido a la caída de las acciones en un -6,7% como consecuencia de la decisión de un tribunal estadounidense de revisar un caso sobre los daños causados a tres profesores por la exposición a productos de Monsanto, hoy propiedad de la empresa alemana.
Sobre la decisión del tribunal, Jens Hartmann, director de Bayer Crop Science para Europa, dijo que el Tribunal Supremo de Washington ya había cerrado el caso y ahora “creemos que no hay base para un resultado diferente al de la instancia anterior”; además de que el producto en cuestión es PCB, el que Monsanto “dejó de producir hace casi 50 años”.
IMPULSAR LA AGRICULTURA SOSTENIBLES ATENDIENDO LAOS DESAFÍOS ACTUALES.
En entrevista concedida a El Economista, Hartmann dijo que la estrategia de Bayer Crop Science en Europa consiste en “impulsar la agricultura sostenible”.
Subrayó “la importancia de Europa” como continente productor de alimentos, que como tal contribuye “a la seguridad alimentaria mundial”. Pero “también conocemos los retos que tenemos”, por ejemplo con “el cambio climático” que es un factor “importante”, sobre cual “la sensación” es que “cada año es probablemente peor que el anterior”.
Para Europa “este año es muy húmedo en ciertas partes, lo que no es ideal para para los agricultores. Así que nuestra estrategia es, por un lado, ver cómo podemos apoyar la seguridad alimentaria y la productividad”, y evaluar “cómo podemos impulsar la agricultura sostenible” partiendo de la base de que “no se trata solo de producir más, o de mantener la productividad, sino de cómo podemos restaurar más la naturaleza”.
Cualquiera sea la región, mediterránea o no, cualquiera sea el país europeo, España, Inglaterra, Francia o Alemania, “los fundamentos son los mismos”, con la consideración de que “en España, o en el Mediterráneo (en general), sea un poco diferente debido a la cadena alimentaria, debido a la horticultura (…). Pero la estrategia es la misma”.
Sin embargo, hay que considerar que ahora tenemos un cambio climático que “tiende más a la sequía en el Mediterráneo. El cambio climático que hemos visto más hacia el norte de Europa es más una especie de patrón de lluvia. Si nos fijamos en Europa del Este, como Rumanía, Polonia y Ucrania, también van más hacia el calor y la sequía. Y eso determina tu estrategia”, explicó.
El desafío es que “tenemos el cambio climático” y con él “la necesidad de impulsar la productividad y la sostenibilidad, esa es la estrategia transversal”.
¿Cómo opera la tecnología en ese escenario?, bueno “en España se trata sobre todo de semillas, por ejemplo, de maíz. Pero también se aplica mucha protección de cultivos y cultivos biológicos. Los productos biológicos son una parte muy importante de la solución global al problema de los alimentos. Forman parte de la lucha contra plagas y enfermedades, y también de la gestión de todo ello al final de la temporada”.
En otro pasaje de la entrevista, Hartmann dijo que Bayer puede “contribuir” con sus “tecnologías, a la protección de cultivos, a los cultivos biológicos, a la semilla, y en la parte digital. Podemos ayudar con la excelencia agronómica” y poder “ver una granja como un ecosistema único durante un período de 12 meses, y no sólo para los tres meses de maíz”. Entrevista completa Aquí.
“Una cosa es un retraso por mal tiempo, y otra cosa es no permitir que salga un barco hasta que no le salga de las narices al inspector (ruso) de turno”, se quejó el presidente de Almacenistas Portuarios de Granos.
Madrid, España | Todo El Campo | Por diferentes motivos España se convirtió en el principal comprador de cereales ucranianos: a) una producción insuficiente, b) la sequía que redujo aún más lo capacidad productiva del país, y c) la reducción de los aranceles a los cereales ucranianos. Esa combinación de factores desplazó a Brasil y Francia y colocó Ucrania en el primer lugar como proveedor de granos.
Otro dato importante es que en 2023, los depósitos de granos en puertos españoles tuvieron un incremento del 23,6% debido a las importaciones de cereales, con fuerte preponderancia de maíz y trigo.
Por otra parte, la guerra en Ucrania iniciada por la invasión rusa generó en España, como país comprador, problemas nuevos. No por la logística española, sino por las disposiciones de control que ejerce Rusia, dijo Alberto Gómez, presidente de la Asociación Española de Almacenistas Portuarios de Granos, Cereales y derivados (Unistock).
Gómez señaló que el salto en las importaciones demostró la capacidad y buen funcionamiento de la infraestructura portuaria y vial, y eso es orgullo para los españoles: “Una de las cosas de las que podemos estar muy orgullosos en España es de la red de infraestructura que tenemos, tanto portuaria como de carreteras”, lo que permitió movilizar mucho “tonelaje de importación y exportación, evidentemente con tensiones, incremento de costos, momentos puntuales complicados, pero se ha respondido y se ha resuelto”.
Entre esas tensiones, se encuentran las que tienen su origen en la guerra de Ucrania, pues Rusia lleva adelante “controles para asegurarse de que el maíz no contenga minas subterráneas incorporadas”; y además “analizan hasta el agua de los tanques de lastre” y eso “ha generado unos retrasos muy difíciles de prever”.
“Una cosa es un retraso por mal tiempo, que vas siguiendo día a día y puedes ir haciendo tus planificaciones, y otra cosa es un retraso que no permite que salga un barco hasta que no le salga de las narices al inspector de turno. Esto genera tensiones en el sentido de que tienes una planificación que no se cumple bajo ningún concepto y donde pensabas tener unos barcos escalados para poder descargarlos con agilidad, se juntan todos a la vez generando atascos” portuarios.
Desde el punto de vista comercial, dijo que la guerra hizo subir costos que son afrontados por el productor ucraniano. “No es lo mismo colocar maíz o girasol en tiempo de paz y con la infraestructura tan buena que tenían las terminales portuarias, que cuando tienes que pasar por seis trenes distintos para llegar a Constanza”, ciudad de Rumania con un importante puerto sobre el mar Negro.
El presidente de Unistock ve positivo que la Unión Europea haya bajado los aranceles a Ucrania. “Si los costos de comercialización pasan de veinte a ochenta y te quitan un arancel de seis, es lo menos que podemos hacer por aliviar la situación de un país injustamente castigado por la guerra”.