Almacenar agua aumenta la cantidad del producto disponible para uso humano, ambiental y económico, pero también reduce el impacto de las inundaciones y proporciona una variedad de servicios auxiliares como la energía hidroeléctrica y la navegación.
Montevideo | Todo El Campo| El Banco Mundial publicó el informe Qué nos depara el futuro: Un nuevo paradigma para el almacenamiento de agua, el cual es un llamado urgente a los profesionales de todos los niveles, tanto públicos como privados, y de todos los sectores para que aúnen esfuerzos y promuevan soluciones integradas de almacenamiento de agua -naturales, construidas e híbridas- con el objetivo de satisfacer las diversas necesidades humanas, económicas y ambientales del siglo XXI.
En la reseña del informe el Banco Mundial señal que el almacenamiento de agua es una parte crítica de la seguridad hídrica y la respuesta social a la política hidrológica variabilidad.
Almacenar agua aumenta la cantidad del producto disponible para uso humano, ambiental y económico, pero también reduce el impacto de las inundaciones y proporciona una variedad de servicios auxiliares como la energía hidroeléctrica y la navegación por regulación de los flujos de agua.
Hoy en día, las sociedades, las economías y el medio ambiente dependen de una red de agua natural y construcción de almacenamientos. Sin embargo, como la demanda mundial de agua dulce aumenta y el cambio climático está trayendo cambios profundos a el ciclo del agua, aumentando así nuestra necesidad de almacenamiento, la cantidad de almacenamiento neto disponible está disminuyendo.
Los sistemas naturales de almacenamiento de agua en los que las personas han confiado históricamente – glaciares, humedales, humedad del suelo – están en declive o se han interrumpido. Al mismo tiempo, las inversiones en el almacenamiento no han seguido el ritmo del crecimiento de la población, y aunque la sociedad está agregando nuevos embalses y otros tipos de estructuras de retención de agua, el almacenamiento de reservorio per cápita es en declive debido a la sedimentación y la falta de mantenimiento. Estas tendencias se suman a una creciente brecha de almacenamiento de agua que debe para permitir un mundo con seguridad hídrica para todos.
El informe revela la importancia del almacenamiento, las tendencias recientes en la disponibilidad de almacenamiento de información, y establece un nuevo marco de planificación para guiar a los gestores del agua a través de un proceso orientado a problemas y sistemas para comprender las opciones disponibles para cumplir con su objetivos de seguridad hídrica, y cómo pueden ser las diferentes formas de almacenamiento de agua parte de la solución.
Por último, el informe establece los cambios conceptuales necesarios para cumplir con este montaje desafiar y proporciona estudios de casos de diferentes países donde los enfoques integrados para la planificación y el funcionamiento del agua Las inversiones en almacenamiento se han intentado con éxito.
Los Diálogos Regionales del Agua llegan cuando una parte importante del Cono Sur sufre una escasez importante de agua, lo que amenaza la producción agropecuaria y compromete la producción de alimentos que se debería cosechar y exportar al mundo
Montevideo | Todo El Campo | Entre el 1° y 3 de febrero se realizó la tercera edición de los Diálogos Regionales del Agua en América Latina y el Caribe, evento que tuvo lugar en la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en la ciudad de Santiago, Chile.
El uruguayo Mario Lubetkin, representante regional de FAO, dijo que según estimaciones de ese organismo, en 2050 “la producción mundial de alimentos tendrá que incrementarse en un 50% en comparación con el año 2012, a fin de satisfacer la creciente demanda de alimentos. Si se mantienen las condiciones actuales, esto exigiría al menos un 35% más de agua dulce, es decir un tercio más”, lo que evidencia la importancia del correcto manejo del recurso hídrico.
Los Diálogos Regionales del Agua llegan cuando una parte importante del Cono Sur sufre una escasez importante de agua, lo que amenaza la producción agropecuaria y compromete la producción de alimentos que se debería cosechar y exportar al mundo.
“Informes recientes estiman que el 80% de todos los daños y pérdidas por sequía es absorbido por agricultura en países de ingresos bajos y medios, y el 35% de las pérdidas de alimentos por sequía a nivel mundial ocurre en América Latina y el Caribe. Esto representa pérdidas en producción estimadas en US$ 13 billones aproximadamente”, aseguró Lubetkin.
Agregó que sin una adecuada gestión del agua no se podrán implementar las cinco vías de acción establecidas en la Cumbre Sobre Sistemas Alimentarios de Naciones Unidas, que en 2022 estableció 5 objetivos: 1) garantizar el acceso a alimentos sanos y nutritivos para todos; 2) adoptar modalidades de consumo sostenibles; 3) impulsar la producción favorable a la naturaleza; 4) promover medios de vida equitativos; y 5) crear resiliencia ante las vulnerabilidades, las conmociones y las tensiones.
Por lo tanto, la Agenda Regional del Acción por el Agua suscrita permitirá a los países de América Latina y el Caribe llegar con insumos comunes y una postura única a la Conferencia del Agua de Naciones Unidas, que se realizará en marzo de 2023 en la sede central de la organización en Nueva York, Estados Unidos.
CUATRO PILARES DE ACCIÓN.
La Agenda subraya que la región requiere avanzar hacia una transición hídrica sostenible e inclusiva que se basa en cuatro pilares de acción:
1) Garantizar el derecho humano al agua potable y saneamiento gestionado de manera segura a través de un gran impulso a la inversión en el sector, sin dejar a nadie atrás.
2) Promover cambios regulatorios y normativos para fomentar el acceso equitativo y asequible, y así erradicar la pobreza hídrica, con instrumentos innovadores incluyendo tarifas sociales.
3) Revertir las crecientes externalidades negativas asociadas a contaminación, sobreexplotación y conflictos socioambientales promoviendo la fiscalización y regulación.
4) Pasar de un manejo lineal a uno circular para reducir la presión sobre el recurso hídrico, instaurando una tendencia al desacople entre la extracción y el producto interno bruto (PIB).
AGUA, RECURSO EN CRISIS.
Actualmente el cambio climático está sometiendo a un estrés sin precedentes a los recursos hídricos del mundo.
Según los datos de la FAO, actualmente 300 millones de personas habitan en países que sufren escasez de agua, y más de 733 millones -aproximadamente el 10% de la población mundial- viven en países afectados por un elevado y grave estrés hídrico.
En los últimos años la FAO ha observado las repercusiones del clima en el agua, con la generación de inundaciones y sequías nunca vistas en muchos países y regiones.
Por otra parte, la agricultura depende del agua y representa el 72% de las extracciones mundiales de agua dulce, junto con otros sectores económicos, por lo que es un elemento esencial para la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
La conciencia de la importancia del agua para la agricultura y el desarrollo sostenible ha aumentado, pero la FAO sostiene que, para alcanzar todos los ODS, siguen siendo necesarias medidas más eficaces, integradas y coordinadas, unidas a una firme voluntad política para reconocer, valorar y gestionar el agua de manera holística e integrada.
El documento “Compromiso por el país” que firmaron todos los líderes de los partidos que conforman la coalición de Gobierno menciona la palabra “agua” únicamente tres veces; y “riego”, ninguna.
Hébert Dell’Onte | Montevideo | Todo El Campo | Ante la fuerte sequía que sufre todo el país se vuelven a escuchar voces sobre la necesidad de tomar medidas de fondo y de largo aliento para que no tengamos, ante un evento de déficit hídrico agudo, tener que lamentar la pérdida de cultivos, el deterioro del ganado y todo lo que eso implica para las empresas agropecuarias y el país.
Parece lógico, de sentido común, y debería ser casi obligatorio: si la producción rural es el motor del país, no se entiende cómo no se han desarrollado políticas para evitar depender de los caprichos de la naturaleza, más en estos tiempos donde el clima ha cambiado, y seguramente seguirá cambiando, y no es raro pasar de inundaciones a sequías severas o viceversa.
“Solo discutimos de riego cuando hay sequía”, dijo el presidente de la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA), Alfredo Lago, en declaraciones a radio Uruguay, y tiene razón. Nadie puede decir lo contrario.
A su vez, el exsenador colorado Pedro Bordaberry, escribió en Twitter sobre el tema recordando que en 2015 presentó un proyecto de ley que no fue tratado en los últimos 5 años del gobierno del Frente Amplio. “De repente puede ser un disparador para encarar el tema de las sequías”, agregó.
El proyecto de ley referido creaba el Banco Nacional de Agua, una iniciativa que en realidad no le pertenece, sino que el primero en presentarla en el Parlamento fue el entonces diputado colorado Juan Ángel Vázquez. En la exposición de motivos, el propio Bordaberry aclara que el diputado Vázquez es el autor original del proyecto. Vázquez, que falleció en octubre de 2022, fue diputado entre 2010 y 2015, integrante del sector que lideraba el exsenador.
La importancia del agua en un país de producción agropecuaria como Uruguay no está en duda. Todos los partidos políticos y todas las gremiales entienden que no se puede esperar a la sequía para discutir sobre riego, como afirmó Lago.
Cuando el Frente Amplio gobernó y Tabaré Aguerre era el ministro del sector impulsó la Ley de Riego que agregaría un nuevo piso a la producción agropecuaria. Aguerre argumento diciendo que “el agua de la lluvia, más que un factor de producción es un insumo. Pero se debe saber almacenarla, conducirla, bombearla, distribuirla y aplicarla como se regula una sembradora o fertilizadora y eso genera esta ley”.
Ahora mismo desde la oposición se insiste en que se deben buscar soluciones para que la sequía deje de ser una preocupación permanente y el déficit hídrico deje de generar pérdidas al productor y al país.
En 2015 Bordaberry, promocionando el mencionado Banco Nacional de Agua, comentó en la exposición de motivos del proyecto de ley que lo creaba: “Entendemos que es un objetivo estratégico del Uruguay el fomento de la generación de reservorios de agua”.
COMPROMISO POR EL PAÍS.
El documento “Compromiso por el país” que firmaron todos los líderes de los partidos que conforman la coalición de Gobierno menciona la palabra “agua” únicamente tres veces; y “riego”, ninguna.
La primera en el capítulo 9, “Una política de defensa adecuada al siglo XXI” cuando dice: “Nos proponemos impulsar medidas como (…) protección integral de la soberanía sobre los recursos naturales, incluyendo el subsuelo, las reservas de agua potable, el mar territorial y el espacio aéreo”.
La segunda en el capítulo 9 “Proteger a los más débiles”, cuando se compromete a “desarrollar una política activa de regularización de asentamientos y de creación de Unidades Barriales Sostenibles, incorporadas al tejido urbano y dotadas de los servicios de infraestructura vial, saneamiento, agua potable por cañería y conexión regular a la red de energía eléctrica”.
Y la tercera en el capítulo 13, “Medio ambiente y bienestar animal” al asumir la “protección integral de la soberanía sobre los recursos naturales, incluyendo el subsuelo, las reservas de agua potable, el mar territorial y el espacio aéreo”. En ninguna de las tres veces se refiera al agua como insumo para el agro. Además, como fue dicho, la palabra “riego” no aparece ni una sola vez, lo cual es difícil de entender ya que siendo Uruguay un país agropecuario el manejo del agua debería tener una atención tan importante como la reforma educativa o jubilatoria.
Montevideo/TodoElCampo-En rueda de prensa, Mattos, informó que el lunes 16 de enero se reunirá con el Comité Asesor de Emergencia para analizar la extensión de la medida presente desde octubre del 2022.
Explicó que, seguramente, se reiterará la aplicación de la emergencia agropecuaria en base a los actuales informes de déficit hídrico.
Incendios
El secretario de Estado expresó que la respuesta estatal es favorable frente a la situación crítica generada por las condiciones climáticas que imperan en el país y que predisponen el aumento del nivel de riesgo de incendios.
En ese sentido, aseguró que existe un despliegue importante tanto del Sinae como de la Dirección Nacional de Bomberos, gobiernos departamentales, fuerzas armadas y empresas forestales, entre otras organizaciones, con la incorporación de tecnología y elementos necesarios para prevenir y combatir los incendios; entre ellas, el uso de cámaras inteligentes y drones para detectar focos ígneos, pero también para evitar su generación.
Además, realizó un llamado a la responsabilidad ciudadana para prevenir estas situaciones que están asociadas en un importante porcentaje al factor humano. “La actitud y el compromiso de las personas es fundamental para evitar la ocurrencia de episodios que todos podemos llegar a lamentar”, dijo.
Agregó que pequeños actos que en otros momentos no generarían consecuencias, en estas condiciones de sequía y falta de humedad en los suelos podrían ocasionar accidentes penosos.
La región tiene agua suficiente, pero debemos dar certezas jurídicas de que todos tengamos acceso a ella”.
Santiago, Chile | Según entienden y así lo manifestaron algunas instituciones rurales chilenas, ese país debería crear una mesa del agua para tratar las urgencias de la agricultura y la ganadería respecto a ese vital elemento.
La idea surgió de las sesiones de trabajo que convoca al sector agropecuario en el contexto del “Pacto por una región sostenible e inclusiva”, y podría ayudar a perfilar el desarrollo de dos sectores productivos relevantes para la región de Los Lagos, ubicada en el centro sur de Chile y cuya capital es Puerto Montt.
Rodrigo Mardones, gerente de Agrollanquihue, una gremial rural de la provincia Llanquihue, en Los Lagos, ha destacado la necesidad de trabajar de forma específica en el tema del agua.
Cabe destacar la importante presencia de establecimientos ganaderos y agrícolas en esa región, particularmente el desarrollo de la lechería.
“Siempre hemos tenido una discusión a nivel nacional sobre el agua”, dijo Mardones. Y por ser “un tema tan importante”, creo oportuno que en el marco del Pacto generar unos spin off como una mesa del agua, que nos posibilite ponernos de acuerdo en cómo queremos utilizar el agua dulce”.
“Nosotros como agricultores que vamos a seguir teniendo muchos requerimientos de agua para riego, necesitamos saber a qué atenernos”, argumentó, y agregó: “¿Si hago un pozo profundo voy a tener la autorización o no para usar esa agua; voy a estar afectando el potencial derecho de un tercero? Esas son las cosas que tenemos que trabajar en esa mesa”.
“La región tiene agua suficiente, pero debemos dar certezas jurídicas de que todos tengamos acceso a ella”, enfatizó.
APOYO.
La directora regional de la Dirección General de Aguas (DGA), Fabiola Pizarro, apoyó el planteamiento de Mardones. Dijo que generar una mesa del agua es una buena idea además de necesaria.
“Hay muchos temas que son del agua y que se cruzan con diversos ámbitos, como los humedales o la gobernanza. Es necesario sentarse con diversos actores, de manera transversal, para llegar a algunos acuerdos”, sentenció.
En base a información de la Federación Nacional de Productores de Leche (Fedeleche) y datos propios.