Presidente de la Federación Rural: Para cambiar la matriz energética, “el único camino es el hidrógeno verde, y Uruguay está trabajando en él”.
La Unión Europea, Estados Unidos, la Agencia de Energía y China están en una dura competencia por un recambio energético que no da seguridad ambiental.
Hébert Dell’Onte Larrosa | Montevideo | Todo El Campo | Mientras la Unión Europea (UE) y China -también se han sumado Estados Unidos y la Agencia Internacional de Energía- desarrollan una guerra incruenta sobre la transformación energética, la imposición de vehículos eléctricos y los materiales para la fabricación de éstos, Uruguay trabaja en la producción de hidrógeno verde.
Ing. Agr. Jorge Andrés Rodríguez, presidente de la Federación Rural y vicepresidente de la Federación de Asociaciones Rurales del Mercosur (FARM), dijo que el desarrollo de vehículos eléctricos implica la utilización de minería a cielo abierto, sin mencionar la producción creciente de baterías que contaminan.
Sin embargo, “el único camino y que Uruguay está trabajando en él, es en producción de hidrógeno verde, eso sí es ambientalmente sustentable por donde se mire, todo lo otro y en particular sobre las baterías, (en el mundo) comenzaron a darse cuenta que no”, aseguró.
Veamos el contexto global de esa afirmación.
LA UE EN GUERRA COMERCIAL CON CHINA.
Los vehículos eléctricos son la explicación de un nuevo gran desencuentro entre la UE y China, ya que el viejo mundo estudia la aplicación de aranceles a los vehículos eléctricos que se importen desde el país asiático.
Lo que sucede es que la Comisión Europea está investigando qué tan cierto son los indicios de “subsidios ilegales a los fabricantes” por parte del Gobierno chino. En un plazo máximo de 13 meses deberá determinar si efectivamente hay subsidios, el alcance de los mismos, y tomar medidas sancionatorias (aranceles) que remedien los efectos de la competencia desleal, imponiendo aranceles a los vehículos eléctricos chinos.
Aunque el problema principal es China, Vladis Dombrovskis, vicepresidente económico de la Comisión Europea, dijo que las sanciones que se podrían aplican también a fabricantes europeos o estadounidenses, en caso de corresponder.
La UE ya tiene mala experiencia con China. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, lo recordó recientemente: “No hemos olvidado cómo las prácticas comerciales injustas chinas afectaron nuestra industria de energía solar”, dijo recordando que el país asiático saturó el mercado europeo con piezas a precios imbatibles.
OTRO PUNTO DE CONFLICTO: LOS MINERALES CRÍTICOS Y LAS TIERRAS RARAS.
Como consecuencia de la carrera por la transición energética verde se ha generado otro punto de conflicto serio entre China y Occidente, por los minerales críticos y las tierras raras.
Son minerales críticos aquellos en riesgo de escasez y por de mayor demanda que disponibilidad, lo que genera fuerte impacto sobre las tecnologías y economías de los países que los requieren Son claves en el avance de las nuevas tecnologías.
Tierras raras son un grupo de codiciados elementos químicos utilizados para fabricar productos tecnológicos y armamento. Por ejemplo, escandio, itrio y otros quince elementos más.
El diario español El Economista señaló que se ha dado un incremento en “la guerra comercial entre China y Estados Unidos”, lo que se agravó por la invasión rusa de Ucrania “y ahora se hace más insoportable con la batalla de subvenciones para atraer la producción de tecnología renovable”.
“Además, existe una sobreconcentración del mercado de los minerales críticos que, en palabras de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), no se ha visto en ninguna otra materia prima fundamental ‘en el mundo moderno’”.
La AIE hizo un llamado para diversificar la cadena de suministro que actualmente está controlada por China. Según la Agencia, la República Democrática del Congo aglutina el 70% de la producción mundial de cobalto, mientras que China posee el 60% de la producción global de tierras raras. Sin embargo, la clave en el mercado de los minerales críticos está en el dominio que Pekín ejerce sobre los procesamientos intermedios a nivel global en ramas como el refinado químico (65%), la fabricación de cátodos (80%), ánodos (93%) y celdas para baterías (79%). Además, China controla porcentajes altos a nivel global de refinado de níquel (35%), litio (50%), cobalto (70%) y tierras raras (90%), publicó El Economista (artículo del periodista Javier Fernández, 06/10/2023).
Claramente China es líder mundial en esos elementos fundamentales.
MINERÍA A CIELO ABIERTO Y LA CARRERA POR LAS BATERÍAS.
En su artículo, Fernández escribió que el recambio energético es imposible sin baterías que almacenen energía y den permanencia. En el Foro de Davos -señala- se destacó que el mundo camina a “un cambio tecnológico sísmico” a medida que se avanza “agresivamente” hacia los coches eléctricos, iniciando “la revolución del almacenamiento de energía” que, actualmente, está liderada por China.
En ese aspecto es clave la sostenibilidad y el reciclado de baterías.
Las baterías de iones de litio (que se usan para fabricar teléfonos móviles, coches eléctricos o auriculares inalámbricos) requerirán la construcción de nuevas minas en todo el mundo, en las que serán necesarias nuevas técnicas de extracción y de reciclaje. Cualquier transición que se aleje de los combustibles fósiles implica minería.
Ahí está el punto débil de la revolución energética, en la minería que se requiere para esa transición y en cómo y dónde desechar las baterías que ya no se usan.
Es aquí cuando volvemos al comienzo del artículo y el título. Recientemente, el Ing. Agr. Jorge Andrés Rodríguez dijo que los países de la región observan con atención lo que está pasando con la renovación energética y la batería. Ese es un tema ambientalmente muy importante, en especial cuando desde la Unión Europea se quiere imponer criterios ambientales por encima de las leyes y normativas de cada país, dijo en referencia al Pacto Verde europeo.
Lo que está sucediendo es que desde Europa no dicen que “en 2030 van a tener todos los autos eléctricos, pero los metales para las baterías los obtienen en minería a cielo abierto”, además de que deben deshacerse de las baterías que son un elemento contaminante.
Frente a eso, “el único camino y que Uruguay está trabajando en él, es en producción de hidrógeno verde”, enfatizó Rodríguez.
“Eso sí es ambientalmente sustentable por donde se mire, todo lo otro y en particular sobre las baterías, (en el mundo) comenzaron a darse cuenta que no”, comentó.
Foto de portada: camión, hidrógeno verde | Portal Movilidad.