Los gobiernos de Brasil y Uruguay reafirmaron su compromiso con la gestión de recursos hídricos en la cuenca de la Laguna Merín
Rio Grande/TodoElCampo- El lanzamiento de un proyecto binacional tuvo lugar durante la celebración de los 60 años de la cooperación entre Brasil y Uruguay en la Cuenca de la Laguna Merín.
El proyecto «Gestión binacional e integrada de los recursos hídricos en la cuenca de la laguna de Merín y lagunas costeras», más conocido como proyecto Laguna Merín, fue lanzado en un evento realizado en Pelotas (Río Grande del Sur, Brasil), en el marco del 60 aniversario de la Comisión Mixta Uruguayo-Brasileña para el Desarrollo de la Cuenca Laguna Merín.
En su intervención, el Subdirector General de la FAO y Representante Regional para América Latina y el Caribe, Mario Lubetkin, destacó que “trabajar por los recursos hídricos es una cuestión de derechos” y que la FAO prioriza el nexo entre el agua, los alimentos y el medio ambiente en su programa de cooperación técnica.
Además, destacó que el proyecto Laguna Merín es altamente estratégico para la gestión sostenible del agua. “La Laguna Merín, junto con la Laguna de los Patos y Mangueira, representa el mayor complejo de lagunas costeras del mundo, lo que hace que este proyecto sea aún más importante, no solo por las oportunidades que brindará para el desarrollo binacional de Brasil y Uruguay, sino porque es un proyecto que tiene todo para ser un referente en otras cuencas y recursos compartidos en toda la región”.
El Subsecretario de Ambiente de Uruguay, Gerardo Amarilla, recordó el fuerte compromiso “de los dos gobiernos” e incluso de las “dos sociedades” con el desarrollo sostenible de la Laguna Merín y su entorno, esenciales “para nuestra sociedad y para toda la vida”. Consideró que esta iniciativa “es un paso fundamental para entender, comprender, amar, cuidar y aprovechar este recurso preservándolo para las futuras generaciones” y felicitó a la FAO y al GEF por su apoyo al proyecto.
El Ministro de Integración y Desarrollo Regional de Brasil, Waldez Góes, destacó que su gobierno tiene un fuerte compromiso con la cooperación internacional, y que este proyecto es un gran ejemplo de asociación exitosa. “La protección y defensa de la seguridad hídrica, y el desarrollo regional y fronterizo están directamente relacionados en el proyecto Laguna Merín y es necesario invertir en una mejor gestión de nuestros recursos hídricos, ya que esto es fundamental para la humanidad”.
La cuenca hidrográfica de la Laguna Merín es compartida entre Brasil y Uruguay, siendo el segundo lago más grande de América del Sur, con 3.750 km de superficie. La abundancia de agua es el origen de la riqueza ambiental y económica de la cuenca, base de la agricultura, silvicultura, ganadería, pesca, acuicultura, turismo, abastecimiento de agua y diversos otros servicios en ambos países.
Financiado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés) con 4,85 millones de dólares, el proyecto Laguna Merín tiene como objetivo fortalecer las capacidades de los sectores público y privado en Brasil y Uruguay para la gestión conjunta e integrada de los recursos hídricos, con énfasis en el uso sostenible y eficiente del agua, la preservación de los ecosistemas y la adaptación al cambio climático.
También estuvieron presentes en el lanzamiento, el embajador de Uruguay en Brasil, Guillermo Valles Galmes, la Directora Nacional de Aguas (Dinagua) del Ministerio de Ambiente de Uruguay, Viviana Pesce, el embajador del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Luis Alberto Figueiredo Machado y el Presidente de la Delegación Uruguaya en la Comisión de la Laguna Merín, Gerardo Óscar Acosta, entre otras autoridades, así como miembros de la academia y la sociedad civil de ambos países.
Larga data
Hace 60 años, la Comisión Mixta para el Desarrollo de Laguna Merín surgió de un proyecto de cooperación entre Brasil y Uruguay, también apoyado por la FAO. Esto constituyó un paso importante en la consolidación de la integración fronteriza y las relaciones bilaterales entre Uruguay y Brasil, con base en el Tratado de la Laguna Merín de 1977.
Desde entonces, el trabajo entre ambos países muestra avances importantes en el desarrollo de acciones conjuntas, con resultados esenciales para el buen manejo de la laguna. Dicha Comisión impulsó un primer proyecto binacional con la asistencia de la FAO, entre 1963 y 1970, en el marco del cual se realizó una serie de estudios y se establecieron recomendaciones para la gestión de la Laguna, como la creación de un instituto de investigación. Esto dio origen a la Estación Experimental de INIA “Treinta y Tres”, hace más de 50 años.
La gestión transfronteriza de los recursos naturales de esta cuenca contribuye a un modelo de desarrollo e integración regional para un uso más participativo, inclusivo y sostenible del agua.