Asia empuja el crecimiento mundial, pero se enlentece, dice el FMI.

Asia empuja el crecimiento mundial, pero se enlentece, dice el FMI.

El consumo es lo que “ha respaldado el crecimiento en los tres países más grandes de Asia”, sin embargo ahora “hay señales de que la recuperación de la región puede que se esté quedando sin fuerzas”.

Montevideo | Todo El Campo | Asia está en la mira del mundo. Para bien y para mal, según la zona que se observe y la temática que se analice.

Según la enciclopedia Concepto, con una superficie de 44,6 millones de kilómetros cuadrados, Asia es el continente más grande y el que presenta la mayor diversidad de razas, culturas y lenguas del mundo. Geográficamente tiene los puntos más altos y más profundos de la superficie de la Tierra, la costa más larga de cualquier continente y, debido a su amplitud, presenta condiciones climáticas muy diversas y una amplia biodiversidad (Asia – concepto.de). Sin duda es un continente fantástico

Económicamente, es el continente que “sigue impulsando el crecimiento mundial”, afirma un reporte del Fondo Monetario Internacional (FMI) elaborado el viernes 13 por Yan Carrière-Swallow, subjefe de división del Departamento de Asia y el Pacífico del FMI; y Krishna Srinivasan, director del Departamento de Asia y el Pacífico (APD).

El problema es que “el impulso económico asiático se está desacelerando”, y “es probable que la región experimente una desinflación más rápida, pero las perspectivas de crecimiento en los próximos años se están oscureciendo”, escribieron.

El texto, de unas 3 páginas, advierten que este año ha sido el consumo es lo que “ha respaldado el crecimiento en los tres países más grandes de Asia”, sin embargo ahora “ya hay señales de que la recuperación de la región puede que se esté quedando sin fuerzas”.

“Esperamos que el crecimiento en Asia y el Pacífico se acelere desde el 3,9% en 2022 a 4,6% este año, sin cambios con respecto a la proyección del año pasado”, eso se daría “por la recuperación posterior a la reapertura en China y un crecimiento más fuerte de lo esperado en el primer semestre del año en Japón e India”. Lo que pasó fue que al levantar las restricciones sanitarias que la pandemia obligó a tomar, “la demanda en estas economías fue reforzada”, los ciudadanos salieron a consumir y ahora “están agotando los ahorros logrados durante” el encierro. Ese abundante gasto causó “una notable fortaleza en el sector servicios”.

Por ahora “Asia continuará contribuyendo con alrededor de dos tercios de todo el crecimiento mundial, pero con un crecimiento significativamente inferior al proyectado antes de la pandemia”.

PROYECCIÓN EN CAÍDA Y ESTADOS UNIDOS QUE NO AYUDA.

En abril la proyección de crecimiento del FMI era de 4,4%, ahora es de 4,2%. “Nuestra evaluación menos optimista se basa en señales de desaceleración del crecimiento y la inversión en el tercer trimestre, en parte una demanda externa más débil a medida que la economía mundial se desacelera, como en el sudeste asiático y Japón, y la vacilante inversión inmobiliaria en China”, escribieron los autores del informe.

China está perdiendo fuerza, con una desaceleración del 5% de ese año al 4,2% en 2024, “en medio de la profundización de la caída del sector inmobiliario, por debajo del 4,5% que habíamos pronosticado en abril”.

Por otra parte, Estados Unidos no ayuda. En otras circunstancias, “el lastre de China se habría visto compensado por las previsiones de crecimiento más rápido en Estados Unidos y Japón”, pero “la fortaleza de la economía estadounidense ha sido en el sector servicios, más que en los bienes, lo que no alimenta mayor demanda para Asia”, además de que las políticas de Estados Unidos (reducción de la inflación o las leyes de patentes, chips, etc.) “están reorientando la demanda hacia el mercado nacional, lo que proporciona un menor impulso a las importaciones de Asia”.

A la deuda inmobiliaria y la menor actividad económica, se suma que China presenta un problema de “envejecimiento de la población y la desaceleración de la productividad moderador el crecimiento a mediano plazo en China, en medio de riesgos crecientes de fragmentación geoeconómica, así como las perspectivas del resto de Asia y más allá. En un escenario a la baja en el que la «reducción de riesgos» y Las estrategias de «relocalización» se afianzan, la producción podría disminuir hasta en un 10% más de cinco años en las economías asiáticas más estrechamente vinculadas a la economía.

LA INFLACIÓN EN ASIA.

Respecto a la inflación que tuvo un aumento luego de la pandemia, “algunos países como Indonesia” han señalado que está “volviendo a la meta después de aumentos sustanciales el año pasado. Por el contrario, en China está por debajo de la meta y, con una demanda lenta en medio de la profundización de las tensiones que emanan del sector inmobiliario, se espera que aumente sólo gradualmente debido a los estímulos políticos”. Y en Japón “ha aumentado”.

“El entorno mundial sigue siendo muy incierto”, y en ese escenario “las autoridades deben mantener el rumbo para garantizar el crecimiento y la estabilidad continuos”.

“Los países con una inflación aún por encima de los objetivos, como Australia, Nueva Zelanda y Filipinas deben seguir señalando su compromiso de reducir la inflación. Esto implicará mantener una política monetaria restrictiva hasta que la inflación caiga de forma duradera hasta el objetivo y las expectativas se mantengan firmes”.

En el cierre del artículo expresan: “A medida que las perspectivas a largo plazo se desvanecen, los países deben redoblar sus esfuerzos para promover reformas que fomenten el crecimiento”. “El fortalecimiento de la cooperación multilateral y regional y la mitigación de los efectos de la fragmentación geoeconómica son cada vez más vitales para las perspectivas económicas en los próximos años. Con ese fin, se han llevado a cabo reformas que reduzcan las barreras comerciales, impulsen la conectividad y mejoren los entornos empresariales esencial para atraer más inversión extranjera y nacional en todo el mundo y la región”.

Altas y extremas temperaturas en Estados Unidos, Europa, China y Japón.

Altas y extremas temperaturas en Estados Unidos, Europa, China y Japón.

Mientras Uruguay parece iniciar el lento pero necesario camino de la recuperación de la sequía, en el mundo las olas de calor provocan alertas en varios países.

Montevideo | Todo El Campo | El mundo está que arde. Este fin de semana, diversos medios internacionales advirtieron sobre la ola de calor en el sur y este de Estados Unidos, en varios países de Europa, En China y en Japón.

ESTADOS UNIDOS.

El domingo 16, el sur de los Estados Unidos amaneció con advertencias oficiales y pronósticos de olas de calor excesivo, que ya azotan al país desde hace días, y que continuarán durante la semana.

El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) señaló que en California, Nevada y Arizona, las temperaturas superarían los 46°C: “Se esperan temperaturas altas récord generalizadas, así como mínimos diarios cálidos récord en partes del suroeste, a lo largo de la costa occidental del Golfo y en el sur de Florida”.

En California (oeste de Estados Unidos), los termómetros alcanzar máximos de 41°C a 43°C el sábado y se enfrentaron el domingo a un segundo día de temperaturas sofocantes.

El sábado 15 de tarde, el famoso Valle de la Muerte de California -uno de los lugares más calurosos de la Tierra-, alcanzó una temperatura potencialmente mortal de unos 51°C y se pronosticó que el domingo alcanzaría un pico de 54°C.

El NWS subrayó que el calor es la principal causa de muerte relacionada con el clima en Estados Unidos e instó a la población a tomar ese riesgo como algo serio.

Las autoridades han extendido sus advertencias durante días, aconsejando a las personas que eviten las actividades al aire libre durante el día y que permanezcan constantemente hidratadas para evitar fatalidades con tales temperaturas.

“Esta ola de calor no es el calor típico del desierto”, resaltó la oficina de Las Vegas del NWS en su cuenta de Twitter, especificando que “su larga duración, temperaturas diurnas extremas y noches cálidas” son inusuales.

CALOR EN EUROPA.

Mientas tanto, Europa espera otra ola de calor, y mientras espera, el calor no deja de golpear en varios países a la vez, algunos de características muy frías como Polonia, Alemania o República Checa.

En Italia, recorrer Roma “es una pesadilla”, dijo una guía turística a la BBC, y agregó: “Siempre hace calor en Roma, pero ha hecho demasiado calor durante mucho más tiempo de lo normal”.

En Grecia, las temperaturas estuvieron en los 40°C y más, afectando en el turismo. Por ejemplo, la Acrópolis de Atenas, una atracción turística muy popular, cerró sus puertas durante las horas más calurosas del viernes y sábado para proteger a sus visitantes.

“Fue increíble” visitar ese lugar, “pero en el camino vimos personas desmayadas recibiendo atención médica, sentadas en la parte trasera de las ambulancias e incluso vomitando por un golpe de calor”, dijo un turista.

Un temor adicional es por la ocurrencia de incendios forestales, especialmente en áreas ventosas.

Alemania y Polonia no escapan al calor y la oficina meteorológica de la República Checa emitió advertencias de temperaturas excepcionalmente altas para ese país. Además, en España, las temperaturas del sur poder ser de 47°C en algunas partes del sur.

La temperatura más alta en Europa se registró en agosto de 2021, en Sicilia (Italia), cuando la marca fue de 48,8°C.

CHINA Y JAPÓN.

En Asia ocurre lo mismo que en Europa y estados Unidos. Algunas regiones de China, incluyendo la capital, sufren desde hace semanas también rachas de calor intenso combinadas con fuertes lluvias.

En Japón, la agencia meteorológica instó a la población a tomar precauciones frente a los golpes de calor con temperaturas de 38 y 39°C ayer domingo y hoy lunes, y no se descartan nuevos récords.

Con datos de RFI, BBC, Página 12 e información propia.

Se oscurecen las perspectivas económicas mundiales y se desacelera el crecimiento en Asia y el Pacífico, según director del FMI.

Se oscurecen las perspectivas económicas mundiales y se desacelera el crecimiento en Asia y el Pacífico, según director del FMI.

Se necesita una respuesta multifacética, incluido el aumento de las tasas de interés, para evitar una espiral ascendente de expectativas de precios y el aumento de las salidas de capital.

“Las perspectivas económicas mundiales se han oscurecido y el crecimiento en Asia y el Pacífico está a punto de desacelerarse aún más” con “continuo impacto de la invasión rusa a ucrania y otros shocks”, así comienza el análisis de Krishna Srinivasan, director del Departamento de Asia y el Pacífico del Fondo Monetario Internacional (FMI), titulado “Las economías de Asia se enfrentan a un crecimiento debilitado y al aumento de las presiones inflacionarias”.

Srinivasa analiza las proyecciones sobre el crecimiento económico en Asia y el Pacífico que se desaceleran, con China, Japón y Corea. Además, se espera mayor incertidumbre de la política comercial, desgaste de las cadenas de suministro y mayor inflación.

El siguiente es el artículo de Krishna Srinivasan completo.

“LAS ECONOMÍAS DE ASIA SE ENFRENTAN A UN CRECIMIENTO DEBILITADO Y AL AUMENTO DE LAS PRESIONES INFLACIONARIAS”.

Krishna Srinivasan | Las perspectivas económicas mundiales se han oscurecido, y el crecimiento en Asia y el Pacífico está a punto de desacelerarse aún más en medio del impacto continuo de la invasión rusa de Ucrania y otros shocks.

Se proyecta que el crecimiento económico en Asia y el Pacífico se desacelerará a 4,2% este año, 0,7% menos de lo que pronosticamos en abril y más lento que el crecimiento de 6,5% en 2021. Redujimos nuestro pronóstico para 2023 a 4,6%, una disminución de 0,5%.

Los riesgos que destacamos en nuestro pronóstico de abril, incluido el endurecimiento de las condiciones financieras asociadas con el aumento de las tasas de interés del banco central en los Estados Unidos y el aumento de los precios de las materias primas debido a la guerra en Ucrania, se están materializando. Eso, a su vez, está agravando los efectos de contagio del crecimiento regional de la desaceleración de China.

LA DESACELERACIÓN DE CHINA SE PROFUNDIZA.

China, la economía más grande de Asia, experimentó una desaceleración significativa en el segundo trimestre, ya que la política de cero Covid provocó bloqueos para las principales ciudades y centros de la cadena de suministro. En consecuencia, nuestro pronóstico de crecimiento para todo el año se reduce a 3,3% desde 4,4% en abril, y esperamos un crecimiento de 4,5% el próximo año, una reducción de 0,6%.

Es probable que esa disminución de la actividad, que también refleja una caída prolongada e intensificada en el sector inmobiliario, tenga efectos de contagio considerables en los interlocutores comerciales regionales. Japón y Corea, las dos economías regionales más grandes integradas estrechamente con las cadenas de suministro mundiales y China, también verán un crecimiento lento debido a una demanda externa más débil y a las interrupciones en las cadenas de suministro.

Pero a pesar de la reciente desaceleración de China, están surgiendo signos de un repunte en la actividad económica a medida que algunas restricciones pandémicas a la movilidad ahora se están aliviando gradualmente. La resiliencia de la manufactura y el repunte del turismo están apoyando un repunte gradual en Malasia, Tailandia y los países insulares del Pacífico.

LAS CONDICIONES FINANCIERAS SE ENDURECEN.

La mayoría de las economías de mercados emergentes en Asia, excluyendo a China, han experimentado salidas de capital comparables a las de 2013, cuando la Reserva Federal insinuó que podría disminuir la compra de bonos antes de lo esperado anteriormente, lo que provocó que los rendimientos de los bonos globales aumentaran bruscamente. Las salidas han sido especialmente grandes para la India: $ 23.000 millones desde la invasión rusa de Ucrania. También se han producido salidas de algunas economías asiáticas avanzadas, como Corea y la provincia china de Taiwán, ya que la FED señala que continúan las alzas de tasas y las tensiones geopolíticas reverberan.

La participación de Asia en la deuda global total ha aumentado del 25% antes de la crisis financiera mundial al 38% después de Covid, lo que aumenta la susceptibilidad de la región a los cambios en las condiciones financieras mundiales. Sri Lanka es un caso extremo en el que el aumento de la deuda se volvió insostenible y la economía perdió el acceso a los mercados mundiales de capital, lo que llevó a un incumplimiento de sus obligaciones externas.

RAMIFICACIONES DE LA GUERRA.

Además, se espera que el aumento de la incertidumbre de la política comercial y el desgaste de las cadenas de suministro, que contribuyen a la tendencia hacia la fragmentación geoeconómica, retrasen la recuperación económica y exacerben las cicatrices de la pandemia en Asia, uno de los mayores beneficiarios de décadas de profundización del comercio mundial y la integración financiera.

Si bien el crecimiento se está debilitando, las presiones inflacionarias asiáticas están aumentando, impulsadas por un aumento global en los costos de alimentos y combustibles como resultado de la guerra y las sanciones relacionadas. Eso golpea más duramente a los pobres y vulnerables, que son los menos capaces de hacer frente, perjudicando el consumo y aumentando las posibilidades de disturbios sociales, como se ve en Sri Lanka y en otros países.

AUMENTO DE LOS PRECIOS.

Las crecientes presiones inflacionarias de Asia siguen siendo más moderadas en comparación con otras regiones, pero los aumentos de precios en muchos países se han estado moviendo por encima de los objetivos de los bancos centrales.

APOYO FISCAL ESPECÍFICO.

La política fiscal tendrá que endurecerse en los países que enfrentan niveles elevados de deuda, proporcionando un complemento a los esfuerzos monetarios para controlar la inflación. Al mismo tiempo, son necesarias transferencias fiscales específicas y temporales para apoyar a las personas vulnerables que se enfrentan a nuevas perturbaciones, especialmente por los altos precios de la energía o los alimentos.

Dicho apoyo fiscal debe ser neutral desde el punto de vista presupuestario en la mayoría de los casos, financiado mediante la recaudación de nuevos ingresos o la reorientación de los presupuestos para evitar agregar deuda o trabajar en contra de la política monetaria. Las excepciones a esto son China y Japón, siempre que las políticas fiscales a mediano plazo permanezcan ancladas.

Más allá de esto, se necesitan urgentemente soluciones de colaboración global y regional que reduzcan la incertidumbre de la política comercial, reviertan las dañinas restricciones comerciales y eviten los escenarios de fragmentación más severos para impulsar la productividad y mejorar los niveles de vida de las personas. Las reformas económicas en los próximos dos o tres años deben tener como objetivo aumentar la oferta agregada para hacer frente al aumento de la inflación, abordar los desafíos a largo plazo, como la adaptación al cambio climático, invertir en capital humano, mejorar la transición ecológica y promover la digitalización.

RESPUESTA INTEGRADA, MULTIFACÉTICA Y PERSONALIZADA.

En resumen, varias economías tendrán que aumentar las tasas rápidamente a medida que la inflación se amplíe a los precios subyacentes, que excluyen las categorías más volátiles de alimentos y energía, para evitar una espiral ascendente de expectativas de inflación y salarios que luego requeriría mayores aumentos para abordar si no se controlan.

Al mismo tiempo, nuevos aumentos de tasas exprimirán los presupuestos para los consumidores, las empresas y los gobiernos que asumieron una deuda sustancial durante la pandemia.

Si bien el asesoramiento preciso en materia de políticas diferirá para cada país, los tipos de cambio flexibles por sí solos pueden no ser suficientes y factibles en todos los países, y otras medidas como las intervenciones cambiarias, las políticas macroprudenciales y la gestión de los flujos de capital pueden ser herramientas útiles para ayudar a anclar las expectativas y gestionar los riesgos sistémicos.

El FMI ha desarrollado recientemente el Marco Integrado de Política para guiar la formulación de políticas económicas exactamente en circunstancias como esta. El Fondo también sigue siendo un socio comprometido con los países para ayudar a capear la tormenta en el horizonte a través de su función de financiamiento.

Los países no deben esperar hasta que sea demasiado tarde, ya sea para ajustar su combinación de políticas cuando sea necesario o para reconstruir sus colchones de financiamiento externo cuando sea apropiado.

Foto y gráficas FMI.

Canadá y Estados Unidos miran los mercados alternativos de Asia.

Canadá y Estados Unidos miran los mercados alternativos de Asia.

Los países del sudeste asiático representan un mercado mayor que la Unión Europea y tienen un importante potencial de crecimiento que Uruguay no debería soslayar.

El mundo es cada vez más pequeño y los países productores de alimentos miran todos hacia el mismo lado, por lo cual es importante moverse con rapidez para que otros no nos ganen y nos dejen fuera de oportunidades que no sabemos si se van a volver a repetir.

En un mundo inestable y cambiante hay que estar preparados para lo que pueda suceder, por eso Daniel Whitley, administrador del Servicio de Agricultura Extranjera, dijo que si el vinculo comercial de Estados Unidos con China se enfría, los productos estadounidenses como el maíz, la soja y la carne de cerdo entre otros, necesitan mercados alternativos. El sudeste asiático surge como la mejor opción.

“El número uno, en mi opinión, es el sudeste asiático”, opinó Whitley al participar del Foro de Perspectivas Agrícolas del USDA realizado en febrero.

“Vietnam, Tailandia, Malasia, Indonesia y Filipinas” están en una región del mundo que “si nos fijamos en el perfil macroeconómico estamos hablando del crecimiento más rápido de los consumidores de bajos ingresos a la clase media”, argumentó.

UN DESTINO MÁS GRANDE QUE EUROPA.

La población de esos cinco países no coincide con los 1.400 millones de personas en China, pero colectivamente el total es de más de 600 millones, que es más grande que Europa: Indonesia, 273 millones; Filipinas, 109 millones; Vietnam, 97 millones; Tailandia, 70 millones; Malasia, 33 millones.

Es una zona del mundo donde Estados Unidos ya tiene experiencia, ya que en 2021 las exportaciones de productos agrícolas a Vietnam sumaron US$ 3.600 millones; a Filipinas otros US$ 3.600 millones; y a Indonesia US$ 3.100 millones, un total muy inferior a

Los US$ 33.400 millones vendidos a China ese mismo año pasado, pero hay una oportunidad para aumentar esas cifras, dijo Whitley.

Las dietas en el sudeste asiático están evolucionando porque las personas se están enriqueciendo. Millones de personas ahora pueden permitirse cenar en restaurantes y comer carne varias veces por semana. “Estamos hablando de gustos y patrones de consumo que se están occidentalizando cada día más”, resumió.

CANADÁ VA POR UN TLC.

No sólo Estados Unidos pone la mira en el sudeste asiático, también Canadá que en 2021 exportó a Filipinas más de US$ 300 millones de carne de cerdo. En 2020 Canadá vendió US$ 40 millones de carne de vacuno a Vietnam, en 2021 ese total subió a US$ 85 millones.

Vietnam es ahora un mercado mucho más importante para la carne de vacuno canadiense que Europa. En 2021 Canadá exporto carne vacuna a la Unión Europea por nada más que US$ 17.

En noviembre de este año Canadá y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático que representa a 10 países, acordaron iniciar negociaciones para un acuerdo de libre comercio.

Fuente: reporte de Robert Arnason en The Western Producer, publicación agrícola canadiense.

Foto: Yakarta, capital de Indonesia | Foto de Trip.

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