Las zonas afectadas por la escasez son Carlos Reyles y Cuchilla de Ramírez.
Durazno | Todo El Campo | El 17 de julio, en la sesión de la Junta Departamental, se volvió a tratar las dificultades para acceder a la vivienda en el interior del departamento, particularmente las zonas de Carlos Reyles y Cuchilla de Ramírez.
La edil Yeny Niche (Frente Amplio) comunicó al plenario de la Junta las preocupaciones que recibió de los vecinos de Carlos Reyles y Cuchilla de Ramírez.
La legisladora departamental se refirió a diferentes instancias y encuentros que ha tenido con vecinos de zonas rurales, lo que les ha permitido recoger de primera mano las necesidades más urgentes. “Seguimos visitando y conversando con vecinos del departamento”, dijo, según consigna Durazno Digital.
Explicó que de esas charlas surgieron solicitudes específicas vinculadas al acceso a viviendas dignas en los mencionados pueblos.
Sobre el final de su intervención pidió que sus planteos sean elevados al presidente del Movimiento de Erradicación de la Vivienda Insalubre Rural (Mevir), para que se entere de la situación y pueda actuar en consecuencia.
«Por razones de buena administración, se entiende necesario y conveniente, proceder a la extensión del plazo”.
Montevideo | Todo El Campo | La Comisión de Promoción y Defensa de la Competencia (Coprodec) prorrogó por 60 días el plazo en que deberá decir respecto a la solicitud de autorización a la operación de concentración económica en la industria frigorífica proyectada entre Minerva, Marfrig y Allana Magellan.
La operación consiste en la solicitud de Minerva para adquirir el 100% de las acciones a Marfrig de Establecimientos Colonia S.A. (Colonia), Inaler S.A. (San José) y Prestcott International S.A. (Salto); simultáneamente se compromete a vender la planta de Colonia al grupo indio Allana Magellan; y Minerva se compromete a vender también la planta de San José a un tercero, en un plazo máximo de 24 meses desde el cierre de la operación.
PROFUNDIZAR EL ANALISIS.
Coprodec argumenta que “corresponde profundizar el análisis de impacto de la operación que se proyecta”, antes de decidir.
Para eso se solicitó información adicional al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, el Instituto Nacional de Carnes, la Dirección Nacional de Aduanas, la Asociación Rural del Uruguay, la Federación Rural del Uruguay, la Asociación de Consignatarios de Ganado, la Liga Uruguaya de Defensa del Consumidor, la Unión de Vendedores de Carne, entre otros.
En la resolución se lee: “Por razones de buena administración, se entiende necesario y conveniente, proceder a la extensión del plazo efectos de que los terceros interesados formulen alegaciones sobre posibles cambios o impactos de la operación proyectada en las condiciones de competencia en los mercados”.
Son cinco proyectos con el objetivo de potenciar la investigación y la innovación agropecuaria y agroindustrial.
Montevideo | Todo El Campo | A través del Fondo Innovagro, la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIA) presentaron Conexionar Innovagro: Soluciones que Crecen y Generan Impacto.
Con el fondo se impulsa la investigación y la innovación para contribuir a un sector agropecuario y agroindustrial más fuerte, eficiente y sostenible.
El presidente de la ANII, Álvaro Brunini, remarcó la necesidad de promover la investigación para fomentar proyectos y el vínculo entre el sector académico y el productivo.
Explicó que el programa Uruguay Innova, que trabajará desde la Presidencia de la República, permitirá crear mayor sinergia entre los ministerios y las agencias públicas y privadas.
El titular del INIA, Miguel Sierra, por su parte, mencionó que esta es la tercera edición del Fondo Sectorial Innovagro y que el desafío abarca más eficiencia, diversificación, sostenibilidad ambiental, uso de nuevas tecnologías, del riego e inteligencia artificial en el contexto de cambio climático y adecuación a normas internacionales.
LOS CINCO PROYECTOS.
Riego inteligente para pasturas: optimización del rendimiento hídrico y productivo
Mayor productividad: Incrementa significativamente el rendimiento de materia seca.
Eficiencia de recursos: Reduce el consumo de agua y energía asociados al riego.
Sostenibilidad ambiental: Contribuye a la conservación del suelo y el agua.
Herramientas validadas: Ofrece recomendaciones técnicas y modelo de simulación para gestión del riego.
Vacuna contra la garrapata bovina: una solución biológica de alto valor sanitario y económico
Reducción de pérdidas: Disminuye el impacto económico de la garrapata en la ganadería.
Control sostenible: Ofrece una alternativa biológica y segura al uso intensivo de acaricidas.
Mejora sanitaria: Fortalece la salud del rodeo y la prevención de enfermedades transmitidas por garrapatas.
Acceso a mercados: Facilita el cumplimiento de normativas de residuos químicos para el ingreso a mercados más exigentes.
Monitoreo DAIS: Inteligencia hídrica para una agricultura irrigada competitiva
Toma de decisiones informada: Provee datos clave para una eficiente y estratégica gestión del riego.
Optimización de recursos: Permite un uso más racional del agua.
Gestión de riesgos: Ayuda a mitigar riesgos asociados a la variabilidad hídrica y la calidad del agua.
Desarrollo sostenible: Promueve una agricultura irrigada que equilibra productividad y cuidado ambiental.
Viticultura 4.0: Innovación en gestión hídrica sostenible y eficiente del viñedo
Consistencia en la calidad del producto: Asegura excelencia en las características del vino.
Eficiencia hídrica y energética: Optimiza el consumo de agua y los costos asociados al riego.
Adaptación al cambio ambiental: Sostenibilidad ante la variabilidad climática por gestionar mejor el recurso agua del viñedo.
Diferenciación en el mercado: Refuerza el posicionamiento de los vinos en segmentos de alta calidad.
Alperujo: De residuo a recurso para alimentación bovina
Solución ambiental: Reduce residuos de la industria olivícola.
Oportunidad económica: Crea una nueva fuente de alimento para el sector ganadero.
Innovación replicable: El proceso puede ser adoptado por plantas procesadoras de aceite, para impulsar sostenibilidad y economía circular.
Miguel Sierra (@INIA_UY) destacó la importancia de unir la capacidad científica del país y vincularla al sector. Por su parte, Álvaro Brunini (ANII) resaltó la necesidad de diversificar la producción agropecuaria e impulsar más I+D+i en el ámbito privado. pic.twitter.com/movqkwAObc
Esgrimiendo sospecha de fraude, China rechazó soja argentina. El país asiático dice que el origen de la oleaginosa es Estados Unidos; no han surgido pruebas que indiquen la participación del Gobierno.
Montevideo | Todo El Campo | La guerra comercial tiene muchas más aristas que la de los aranceles que un país impone a otro, intervienen otros aspectos comerciales más complejos como el que llevó a China a suspender la compra de 300.000 toneladas de soja argentina, que no sería de ese país, sino estadounidense, según los resultados de laboratorio.
Para China, el caso representa un verdadero intento de fraude corroborado luego realizar los análisis de laboratorio sobre pesticidas, isótopos y ADN del suelo, todo lo que llevó a concluir que la soja no provenía del sur sino del norte.
Analistas dicen que de ser como diche China, la maniobra se encuadra dentro de la guerra comercial que afecta al mundo entero.
Portales de todo el mundo han informado que no hay pruebas de que haya participado el Gobierno argentino en la maniobra, lo que baja un poco el nivel del conflicto, pero no deja de coloca a Argentina en una posición difícil, le resta valoración y pierde prestigio como país proveedor de alimentos, un duro golpe para un país productor y exportador de alimentos al mundo.
LOS TRES ENEMIGOS DE LA SOJA ARGENTINA.
El 17 de julio, Bichos de Campo, medio especializado en agro, publicó que la soja argentina está siendo “atacada de manera simultánea por tres enemigos”, pero no menciona las maniobras fraudulentas que observo China.
En primer lugar, como “primer enemigo”, coloca a la Unión Europea por categorizar a Argentina, junto a Brasil y Paraguay, como país de riesgo estándar o medio en el listado de naciones proveedoras de productos comprendidos en el reglamento 1115. No es el caso de EE.UU., Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Uruguay, entre otras naciones, que fueron clasificadas como de riesgo bajo. Esa clasificación expone a Argentina a mayores controles y a un menor valor del producto.
El segundo, la competencia comercial en el sudeste asiático que se intensifica como nunca antes, como consecuencia de la guerra comercial estadounidense que está causando perjuicios la posición exportadora argentina. La política exterior del presidente Donald Trump afecta directamente al 59% de los destinos actuales de harina de soja argentina, cifra que podría escalar hasta el 84% si se concretan nuevos tratados de EE.UU. con países compradores de harina de soja.
El tercer enemigo está en el frente interno y es el Estado argentino que asfixia a la cadena sojera con el impuesto a la exportación del 33,0% al poroto, algo que no sucede en ninguno de los países competidores de la Argentina.
El presidente del Instituto destacó su importancia como herramienta para el acceso a la tierra por parte de los pequeños productores.
Canelones | Todo El Campo | El 11 de julio se realizó el acto de inauguración de nuevas fracciones en la colonia José Segade, en el departamento de Canelones.
La actividad tuvo lugar en la Sociedad de Fomento Rural Rincón del Colorado y contó con la participación del presidente del Instituto Nacional de Colonización, Alejandro Henry, el subsecretario de Ganadería, Agricultura y Pesca, Matías Carámbula, y los directores del organismo.
Durante la jornada, Henry destacó la importancia del Instituto Nacional de Colonización como herramienta para el acceso a la tierra por parte de los pequeños productores.
Además, anunció tres líneas de acción para su gestión: incorporación de tecnología en las colonias, reactivación de líneas de crédito con el BROU y readecuación de las áreas productivas frente a las necesidades actuales de escala.
COMPROMISO CON LA LECHERÍA FAMILIAR EN FLORIDA.
Por otra parte, el martes pasado, Henry y el vicepresidente del INC, Milton Perdomo, visitaron la Sociedad de Productores de Leche de Florida, donde intercambiaron con sus directivos e integrantes.
Se recorrieron campos de recría ubicados en predios públicos del INC, actualmente asignados a la gremial lechera.
Desde Colonización se informó que esos predios forman parte de la estrategia del Instituto para apoyar a los productores familiares mediante el acceso a tierras adecuadas para la producción y el desarrollo de la actividad lechera. La oportunidad fue propicia para que el INC reafirme su compromiso con la inversión pública en tierras, con el objetivo de fortalecer al sector lechero familiar, consolidar la cadena láctea en su conjunto y avanzar en la mejora de la gestión de los predios en explotación, dice en la web de la institución.
La idea que dio origen al proyecto surgió de una inquietud en torno al destino de los residuos generados por la industria forestal, particularmente los subproductos madereros. La observación directa del entorno industrial fue clave, sobre todo por la cantidad de aserrín que se descarta como residuo.
Montevideo | Todo El Campo | La industria forestal y la economía circular se unen en un proyecto de estudiantes que recientemente obtuvieron su título de Tecnólogos en Mecatrónica en UTEC Fray Bentos.
El proyecto fue denominado “EcoPrint 3D: impresión con pasta de madera” y consiste en el desarrollo de un nuevo material que permite reutilizar aserrín para la creación de piezas mediante un sistema de impresión 3D, adecuado y desarrollado especialmente para esta tarea.
Desarrollado por los estudiantes de Ingeniería en Mecatrónica de UTEC Fray Bentos, Emilia Rondán y Enzo Castillo, el proyecto se basa en la mezcla de aserrín -obtenido de la industria maderera- y cola vinílica principalmente. Esto permite crear un nuevo material, que, procesado a través de componentes adaptados especialmente para su impresión 3D, se convierte en piezas utilizables en el día a día, como vasos, platos o armazones para lentes. Este proceso permite que el aserrín tenga una nueva vida, en lugar de quemarse o degradarse.
Emilia y Enzo actualmente cursan el séptimo semestre de la carrera de Ingeniería. Emilia tiene 25 años, es oriunda de Cardona, Soriano, y vive desde hace seis años en Fray Bentos. Enzo tiene 29 años y también reside en esa ciudad.
La idea que dio origen al proyecto surgió de una inquietud compartida en torno al destino de los residuos generados por la industria forestal, particularmente los subproductos madereros. La observación directa del entorno industrial fue clave, sobre todo por la cantidad de aserrín que se descarta como residuo.
Esa problemática y posible aplicación a la impresión 3D, entre otras, fue relevada y proyectada por las áreas de Tecnologías para Mantenimiento (Yamilé Lara) y de Sistemas Inteligentes y Ciberfísicos (José Sasías) de la carrera, considerando los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas, e incluso presentando datos detallados ante los Grupos de Investigación Estratégica (GIE) de la Universidad, el MIEM y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
La propuesta de proyecto fue abordada por Emilia y Enzo, quienes agregaron más investigación al tema. A su vez, se movilizaron distintos sectores e investigadores de UTEC para ayudar a los estudiantes en las distintas fases del desarrollo: Lab-A para calibraciones y generación de primeros modelos (Mateo Olivera y Manuel García), Diseño Mecánico (Francisco Zambrano), Laboratorio de Mecánica (Darío García) para producción de piezas y Laboratorio de Mecatrónica (Roberto Dos Santos y Leonardo Eguia) para instrumentar componentes del control electrónico.
“Tomamos como ejemplo cercano la planta de UPM de Fray Bentos, comprendiendo la necesidad de aprovechar los residuos forestales y planteamos soluciones en ese sentido”, explicó Emilia. “Varios de sus procesos generan fragmentos muy pequeños de madera, que conforman el aserrín que se clasifica en distintos niveles de granularidad o refinamiento y posibilidades de uso”, agregó Enzo, quien además trabaja en UPM.
Consultados sobre el destino actual de ese material, señalaron: “Es común en las industrias agroforestales, usar los residuos leñosos para procesos de conversión de energía térmica a veces incluso generación eléctrica. En muchos casos, cuando las necesidades, distancias, volúmenes y costos lo justifican, esos residuos se compactan y trasladan.”, detalló Enzo. A pesar de ese uso, “nos motivaba la idea de reutilizarlo y aprovecharlo de otra forma más innovadora”, apuntó Emilia.
UN PROCESO DE PRUEBAS SUCESIVAS HASTA LOGRAR UNA PASTA ESTABLE
El aserrín fue el componente central del trabajo, al que luego se le sumaron distintos aditivos. La finalidad fue lograr un compuesto estable. Esto implica que los objetos no colapsen al ser impresos, que puedan soportar peso o presión sin romperse, y que además resistan condiciones de humedad.
“Probamos con otros componentes que se mezclaban con resinas y otros tipos de biopolímeros. Y la mejor opción fue realizarlo con cola vinílica” indicó Emilia. La cola vinílica resulta ser un producto de muy baja toxicidad, buena capacidad de unión y de un nivel de degradación que acompaña al de la madera. “Se genera una pasta viscosa y moldeable al inicio para poder extruirlo (dar forma al material) e imprimirlo”, agregó la estudiante.
Según explicaron, no existe actualmente en el mercado una tecnología igual a la que desarrollaron. Si bien hay materiales comerciales para impresión 3D que incluyen madera, lo hacen en porcentajes bajos. “La idea es que tenga un mayor porcentaje de aserrín y menos de los otros componentes como la cola vinílica. En la mayoría de los compuestos que encontramos en el mercado, como el MDF, tienen un 30% de aserrín y lo combinan con resinas que son más plásticas que la cola vinílica”, señaló Emilia.
Este aspecto es clave ya que, a menor porcentaje de aditivos plásticos, más alineado pasa estar el proyecto con el concepto de economía circular. Además, las piezas impresas pueden volver a convertirse en pasta, para pasar nuevamente por el proceso y convertirse en otro objeto.
PRÓXIMO OBJETIVO: IMPRIMIR PIEZAS DE MAYOR TAMAÑO
El proyecto EcoPrint 3D cumplió con los objetivos de formación ya que permitió a Emilia y Enzo obtener la titulación intermedia de la carrera de Ingeniería en Mecatrónica. No obstante, la iniciativa continúa como parte de un proyecto más amplio impulsado por la Unidad Tecnológica de Industrialización y Mantenimiento con Tecnologías Emergentes (IMTE), apoyado por el GIE, ambos de UTEC, y con colaboración del BID.
Este último otorgó financiación para cubrir la adquisición de recursos e insumos básicos. El proyecto macro a cargo de los docentes e investigadores Yamilé Lara y José Sasías se orienta al “Desarrollo de materiales para piezas de robótica a partir de residuos de la industria forestal”. Este aborda tres líneas de trabajo de fabricación inteligente, mediante panelizado, moldeado e impresión en 3D.
Según explicaron, la parte de Impresión 3D, se encuentra en la primera de las cinco fases del plan general, centrada en el desarrollo inicial y la validación de la tecnología.
Actualmente se trabaja en nuevas propuestas y cronogramas de actividades para avanzar hacia siguientes etapas. En paralelo, desde la carrera de Ingeniería, Emilia y Enzo proyectan dedicar el segundo semestre al desarrollo de su tesis, enfocada en escalar el proyecto a mayor tamaño y alcance.
“Está pensado crear muebles, como una mesa de comedor, una puerta, un estuche de guitarra, etc. La idea es que sean esas las dimensiones de las piezas a producir”, concluyó la tecnóloga.