Hay una esperanza para la paz. Mientras tanto siguen las bombas

Hay una esperanza para la paz. Mientras tanto siguen las bombas

Informe de mercado.

Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | El mundo espera con ansiedad la reunión el 15 de este mes entre los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y de Estados Unidos, Donald Trump. Todos quieren el fin de la guerra, pero el tema es a qué costo. El invasor se quiere quedar con lo que conquisto y el invadido pretende salvaguardar su integridad con un natural recelo a las garantías que se le ofrezcan (entre otras cosas porque nadie de los que los obligo a entregar su arsenal cumplió con su palabra).

Europa (que vivió los horrores de dos guerras y que conoce bien a los rusos) sabe que no puede ser paz a cualquier precio.

El mundo financiero sigue mirando de costado de la realidad de los aranceles. Los grandes bancos norteamericanos empiezan a sugerir ir saliendo de las acciones porque sus valuaciones no se corresponden con la realidad económica. Los índices bursátiles siguen como si no hubiera mañana a pesar de que las noticias económicas a nivel global no son ni las mejores así como tampoco tenemos muchos avances en las negociaciones comerciales entre EE.UU. y el resto del mundo.

Hablando de guerras comerciales, se acerca la fecha límite para negociar con China, pero se da por descontado el que se extiende. Fue llamativo el comentario de Trump en la noche del domingo sobre que sería de utilidad que China cuadruplicara sus compras de soja de EE.UU., lo que lógicamente hizo subir los precios (dándonos una oportunidad maravillosa para vender un poco de soja mirando hacia noviembre). No está muy claro el contexto de la información, pero es lo suficientemente seria como para que los grandes portales la consideren. Siendo prácticos, cuadruplicar la compra de soja por parte de China es simplemente inviable. Aparte de que ya están comprados hasta octubre, momento en que EE.UU. tendrá una mega cosecha por lo que los precios estacionalmente deben tender a bajar. El mercado se pregunta pues si volveremos a los pisos del contrato (como ha pasado con el maíz y el trigo). El pedido de Trump no es menor: lo hace previo al vencimiento de la “pausa” en la guerra arancelaria. Trump argumenta que a China le falta soja (lo cual no es cierto) pero se olvida que EE.UU. ya no es tan relevante para China en su oferta.

Agosto será un mes bisagra en materia macroeconómica, al menos para EE.UU. Si se confirman los vaticinios de un mal desempeño de la economía de EE.UU., una baja de tasas está más a la mano, pero no necesariamente quiere decir que esa sea la mejor receta para curar al paciente, sino que puede agravarle ciertos efectos en el corto plazo. El riesgo de una estanflación (poco o nulo crecimiento con inflación) es el fantasma que asola a EE.UU. en un momento en que los votantes de Trump empiezan a dar signos de fatiga con las formas (no los fundamentos) de sus decisiones económicas.

El martes tenemos USDA del que se esperan pocas buenas noticias. Nuestra única esperanza es que no ajusten tanto al alza el rinde promedio esperado de soja y maíz y que suban más de lo esperado las exportaciones para “compensar” lo que se viene. Nunca es fácil operar sobre el mercado, pero en todo caso hay que aprovechar para vender en los picos porque la verdad es que desde los fundamentos no hay muchas esperanzas, pero trataremos de mantenernos con la cabeza clara para ser lo más estratégicos posibles en las decisiones. En el largo plazo, todavía no vemos los efectos de la falta de rentabilidad de la agricultura en las intenciones de siembra de los agricultores. Y con un clima que parece colaborar, la pila de la oferta puede hacerse todavía más grande. A la lógica de que una campaña mala se paga con una buena, le queda tiempo para esperar por mejores condiciones de precios. 

En suma, no creo que haya mucho en el USDA que mueva los precios a nuestro favor. Veremos qué pasa el 12 de agosto con los chinos y el 15 con los rusos.

TRIGO.

Al trigo le cuesta enormemente sostenerse y en la semana pasada toco los vales más bajos de los últimos 2 años. Los fundamentos de la debilidad son los mismos desde hace semanas, aunque parece insinuarse un problema de calidad más serio del originalmente previsto, aunque sin mucho impacto en los mercados. Los fondos agregaron algo a su posición vendida, aunque están lejos de los récords que supieron tener. Es un campo minado.

MAÍZ.

 EL maíz también tuvo una mala semana, pero logró recomponerse en algo de la mano de muy sólidas exportaciones de EEUU y de un nuevo y persistente deterioro del maíz en Europa. Brasil casi con su cosecha terminada, va llegando a los puertos con más fluidez. Todas las miradas puestas en el USDA del cual nadie espera nada bueno. Los comentarios sobre el estado de los cultivos son estelares, aunque algún tema con el clima puede estar en los titulares. De todos modos nadie espera un quiebre de la cosecha a menos que se complique la cosecha.

SOJA.

Sean delirios de Donald Trump o realidades, la soja tuvo un salto nada menor que le cambia la cara al menos en el corto plazo. Si logra consolidarse un poco más podemos soñar con un 1040, valor al cual vendería sin mucho temor porque tarde o temprano le llegará la estacionalidad y sigue teniendo un potencial de baja nada menor. No espero mucho cambio en el USDA que sea optimista, más bien puede ser un balde de agua fría.

ACEITE DE SOJA.

 El aceite sigue en pleno proceso de consolidación a la baja de modo de corregir el desbalance que implicaba un precio tan alto del aceite. Las tarifas a India le pegan al aceite y como se ve honestamente pinta de que le quedan más bajas, especialmente cerrar el gap entre 52 y 50.

Empieza a ser tentador comprarlo, pero mejor dejar pasar unos días a ver qué ocurre.

HARINA DE SOJA.

Lo más inexplicable es la suba de los precios de la harina en este contexto. Se compra por barata, pero igual la tiene complicada, aunque parece tener un piso más o menos estable en 275. China sigue comprando en Argentina, lo cual llama la atención y le quita negocios a EE.UU., cosa que sabíamos, pero es llamativo una subida tan firme con los fondos vendidos hasta las manos harina.

Veremos de darle un poco más de tiempo a ver que nos depara el futuro.

INFORME COMPLETO.

Vuelve Donald con todo. Caos y malos datos económicos

Vuelve Donald con todo. Caos y malos datos económicos

Informe de mercado.

Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Digamos que usted es el presidente de un país. El viernes, sale el dato de empleo que no es de su agrado y así sin más manda echar al funcionario a cargo de las estadísticas. Dicho así parece una parodia de Peter Sellers (en la imagen de portada) de algún dictadorzuelo centroamericano o del medio oriente (al mejor estilo El Dictador). Salvo que hablamos de Donald Trump. Yo le sugeriría que si va a ir por ese camino (no tengo nada en contra), que empiece por echar a los ineptos que buscan la paz en Ucrania o en Gaza por la falta de resultados.

Los datos de empleo de EE.UU. desnudan lo que todos sospechan: que la economía de EE.UU. empieza con los problemas causados por la conducta errática de Trump. El dato de PBI también es un poco mentiroso, muestra una lenta expansión de la economía pero que se basa principalmente en menos importaciones pero que es igual de preocupante que el dato de empleo.

Por otro lado, el dato de inflación y una reserva federal que por primera vez en mucho tiempo voto dividida en mantener los tipos de interés, empieza a tener más argumentos para bajar las tasas en setiembre, cosa que el mercado espera con necesidad. Recuérdese que la FED tiene un mandato de asegurar baja inflación, pleno empleo y crecimiento económico. El asunto es que tener baja la inflación implica subir tasas y pleno empleo y crecimiento implica bajarlas. Así que no la tienen nada fácil. Hay que balancear a un jefe iracundo con no bajar la tasa fuera de tiempo si ese fuera el caso. Lo que sí es claro es que las mentiras maquilladas en cuanto a datos macro serán las nuevas verdades.

Y llegamos a agosto. Donald, antes de irse a jugar al golf el fin de semana dejó el tendal al subir los aranceles a casi todo el mundo que no hubiera logrado un acuerdo de libre comercio (con muy pocas excepciones) Y con eso se terminó temporalmente la luna de miel con los mercados que tuvieron un cierre muy malo el viernes y mandaron al dólar en una trayectoria poco amigable con las ventas de materias primas agropecuarias. La semana estuvo realmente fea para los precios, lo que actúa como un recordatorio de que mientras Trump siga al mando nadie duerme tranquilo. Los aranceles llegaron para quedarse y son la nueva norma.

Por fuera de las noticias macroeconómicas, que no son muy amigables, los fundamentos tampoco nos ayudan a que los precios dejen de caer. En EE.UU. el clima del verano sigue siendo muy amigable a los cultivos y solo podemos aspirar a una afectación en la soja más que en el maíz. En Brasil la cosecha sigue al firme y en cuanto al trigo si bien hay algunos problemas muy menores en Europa, las lluvias de Australia hacen suponer una mejora en la producción de trigo agregando algunos millones de toneladas que el mercado claramente no necesita. La demanda de maíz sigue muy firme a nivel mundial pero pesa más el que EE.UU. va rumbo a los 400 millones de toneladas. Para complicar un poco más las cosas, los aranceles a Brasil (país con el que EE.UU. tiene un saldo superavitario de balanza comercial) lo forzarán a una depreciación mas acelerada del real y a un acercamiento todavía mayor hacia China. Si algo no necesitábamos es a Brasil impulsado a producir más para China y con un real más barato.

En Argentina los mercados siguen nerviosos con el posible resultado electoral adverso y le meten presión al dólar. Mientras tanto Javier Milei para juntar votos no tuvo mejor idea que bajar las retenciones lo cual aumenta la presión sobre los mercados. Argentina sigue exportando harina de soja a China (ya van dos barcos) y parece que el flujo sigue. Pronto nadaremos en harina de soja.

Como se ven las cosas los mercados tienen todo para un arranque pesimista, aunque ya estamos en niveles muy bajos de precios. El consuelo de los tontos es que nada baja hasta el infierno, pero no tenemos mucha información hasta el USDA de agosto, que tiene mucha pinta de colaborar en ser alcista.

TRIGO.

El trigo perforo los pisos del contrato y sigue cuesta abajo. Lo curioso de la situación es que los fondos no amplían su posición vendida, lo cual llama la atención. Los fundamentos son los mismos que hace una semana, en plena cosecha es poco lo que puede hacer para subir y menos si el maíz no ayuda. El dólar tampoco ayuda y la inestabilidad bursátil menos. Las compras de la campaña nueva fueron buenas, lo que me da para tener cierta esperanza. Así como se ve le queda dolor para bajar pero no queda mucho más.

MAÍZ.

El maíz sigue sin ningún riesgo evidente en EE.UU. y Brasil va en el tercio final de la cosecha, con lo que el mercado sabe que la oferta está (el asunto es cuanto). Con el maíz pesado en la oferta a pesar de una demanda muy firme los precios se arrastraron al piso del contrato y lograron aguantar ahí por poco. Yo no creo que se salve de una nueva corrección a la baja.

SOJA.

La soja es la que se comió la peor baja y la verdad es que no tiene mucho soporte hasta 970, por lo que es esperable que siga cuesta abajo. Los pronósticos de clima no son malos para agosto que es cuando se juega el partido. Y viene perdiendo pie, aparte del dólar por la baja del precio del aceite que es el soporte más fuerte que tenía. Me repugna un poco la idea de venderla en estos precios, pero no queda otra que o bien esperar a que repunte o captar los 20 cents que le quedan a la baja.

ACEITE DE SOJA.

El petróleo derrapó feo en la semana y el aceite que venía muy pensionado al alza perdió pie feo, lo cual es saludable. La pregunta es hasta dónde va la corrección si para en 52 o se va a 50. En ambos escenarios es una oportunidad de compra, por lo que no hay que dejarlo pasar así nomás, porque puede ser la única oportunidad de sacarle algo a un mercado con una demanda estructural firme.

HARINA DE SOJA.

Como era de esperarse con la baja del aceite, la harina tuvo una muy modesta recuperación de precios luego de una semana negra para los precios. Hay lugares del mundo donde están pensando en quemarla como fuente de energía, eso da una idea de lo bajos que eran los precios.

Yo tengo mis dudas sobre si comprarla creo que no vimos el final del túnel aún.

Imagen de portada: Donald Trump y Peter Sellers | IA.

INFORME COMPLETO.

¿Y si la jugada le sale bien a Trump?

¿Y si la jugada le sale bien a Trump?

Informe de mercado.

Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Donald Trump es un problema. Su estilo es realmente algo fuera de los códigos de lo que uno espera del presidente que representa a la primera economía del mundo y de lo que hasta hace no mucho era el líder del mundo libre. Desde que asumió su estilo disruptivo y muchas veces tosco hizo suponer que EE.UU. se dirigía en muchos aspectos hacia el abismo con total certeza. Hoy ya casi siete meses con Trump en el poder las jugadas que impuso no han dado los resultados cataclísmicos que el mercado suponía que traería. Lejos de eso, los principales índices accionarios de EE.UU. baten récord tras récord, la temporada de ganancias de las principales multinacionales sorprenden por los buenos resultados y la guerra comercial no es tan temible después de todo. Lo que a nosotros nos interesa, por sobre todo es lo que ocurre con las materias primas agrícolas, y la verdad es que las buenas noticias de los acuerdos que las pueden involucrar no se hacen notar al menos de momento.

En base a lo anterior, la semana fue buena para las bolsas que parecen en una tónica de ‘aquí no pasa nada’ y siguen muy felices al alza, impulsadas en parte por una sólida campaña de ganancias. Las materias primas no se movieron mucho, al menos las de la energía siguen en el mismo rango y las agropecuarias no logran salir del sopor de mercado donde no pasa nada con el clima y los compradores siguen esperando tranquilos que la oferta haga su efecto. La verdad es que EE.UU. tiene de momento un clima soñado para sus cultivos de verano y si sigue así logrará un rinde récord tanto en maíz como en soja. El maíz ya casi está afuera y a la soja le queda un rato, pero viene bien y con agua en el pronóstico por lo que es difícil ver una amenaza. El trigo sigue avanzando con su cosecha en el hemisferio norte y fuera de algunos problemas con la calidad no hay mucho que haga suponer que hay un riesgo para que los precios suban desmedidamente.

Hay mucho debate entre los que intentamos pronosticar el mercado sobre cuándo los precios lograrán afirmarse. Los de la vieja escuela hablan mucho de la relación stock consumo, que si está tan baja está la receta para que los precios suban. Yo soy de los que cree que eso es la vieja biblioteca y que la distribución de la oferta ha cambiado en tal medida que hace que los mercados no reaccionen como antes. Y me da lo mismo que Chicago quede en EE.UU. porque todos sabemos que no hay otro lugar donde ir a arbitrar precios. Al final del día, es lo que hay. Por eso, que EE.UU. tenga una relación stock consumo baja no necesariamente implica que los precios tienen que subir porque el peso relativo de EE.UU. en la oferta (especialmente de soja) es cada vez menor. Entonces, mucho cuidado con comprar que en el 2025 empieza la recuperación de los precios por lo que pasa en EE.UU. y jugarse a plantar soja de palo a palo. Y recuerde el lector que lo que nos salvó en el 2025 fue el rinde de la soja y no el precio. Con los chinos con un margen de molienda negativo (y con la soja en 420 puesta en destino) es difícil ver por qué tiene que subir (China es 2/3 partes de la importación mundial de soja). Mi consejo es cuidado con la venta de espejos de colores de cara al futuro, yo sé que lo más fácil del mundo es mentirle al agricultor diciendo que el futuro es venturoso y los precios subirán.

En Uruguay no pasa nada, el clima es un asco con más lluvia, humedad y frío. Igual que el mercado local, no pasa nada de nada. En Argentina hay mucho ruido con lo anunciado por el presidente Javier Milei sobre retenciones el sábado en la Rural de Palermo. No les vendría mal un mimo al campo para ver si pueden asegurar los tantos de una cierta gobernabilidad para sacar el proyecto de país adelante. Octubre queda lejos en materia de resultados electorales.

No va a pasar nada hasta el 1° de agosto cuando nuestro amigo Trump haga realidad o cambie su fecha límite para aranceles recíprocos. Veremos si asegura los tantos con la Unión Europea, no sería nada malo que al menos de ese lado tengamos cierta tranquilidad.  Por lo demás no tendremos datos interesantes hasta el próximo USDA y para eso faltan dos semanas así que nos podemos tomar el descanso semanal tranquilos.

TRIGO.

No paso nada bueno con el trigo en la semana, que sigue arrastrándose por los pisos del contrato con la cosecha a todo vapor. Algunos problemas de calidad en Europa y el comentario que el exceso de lluvias puede complicar un poco. Los fondos desarmaron en algo su posición vendida pero no hay nada en el radar que haga suponer que van a cambiar la pisada. Lo que si puede ser más alentador es que el mercado FOB lentamente empieza a subir y sería deseable que los futuros de trigo copien esa tendencia.

MAÍZ.

No paso nada en la semana con el maíz. Las exportaciones tanto viejas como nuevas la sacan del estadio pero los futuros están concentrados más que nada en la cosecha de EE.UU. que pinta enorme y lo de Brasil. Algún ruido con la polinización del maíz pero nada que levante sospechas. Tiene todo para bajar.

Las referencias locales para maíz de segunda entre 215 y 220 a corregir por humedad puesto y importado en contenedor a 220.

SOJA.

Una mala semana, me arrepiento de no haberla vendido en 1040 cuando tuve la oportunidad. La soja no enamora a nadie y los fondos lentamente le van soltando la mano. Si me preguntan a mi creo que hay que venderla porque a menos que el clima se complique en serio en EE.UU. la presión estacional hará lo suyo y debería irse a 980.

En Uruguay precios en el entorno de 363.

ACEITE DE SOJA.

Se ve que me gusta equivocarme porque insisto en el error de pensar que tiene que tener una pausa y el mercado me va resultando desafiante. Los aceites siguen firmes, algo de susto en la cosecha de girasol que no es lo que se espera y un mercado que por el momento paga lo que piden los productores. Le está costando mucho pasar los 56, pero tiene un gap incómodo entre 51 y 52. Si es verdad que estoy equivocado, tal vez la forma de enmendar el error es comprarlo con un mejorador y esperar a ver qué ocurre.

HARINA DE SOJA.

China sigue comprando harina de soja en Argentina, lo que representa toda una novedad. Fuera de eso es un mercado pesado al que le cuesta agarrar velocidad. La semana fue triste porque se comió toda la suba de la semana anterior así que hasta que no surja demanda esto sigue planchado.

Imagen de portada generada con inteligencia artificial generativa de Copilot.

INFORME COMPLETO.

Vuelve el caos y la guerra comercial.

Vuelve el caos y la guerra comercial.

Informe de mercado. No fue una semana feliz para los granos.

Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | De los 200 acuerdos comerciales con los que Donald Trump quería llegar previo a sus vacaciones solo tiene 3. Pero por las dudas sigue imponiendo aranceles a amigos y enemigos por igual en un recrudecimiento de la guerra comercial que todos pensábamos estaba más o menos encaminada. Lo intrigante del asunto es que le toca tanto a los amigos como a los enemigos y eso complica nuestros cálculos sobre qué pasará con las materias primas agropecuarias en el futuro.

No fue una semana feliz para los granos. El lunes arrancamos la semana luego del fin de semana largo con bajas fuertes a lo largo de todas las materias primas agropecuarias ante las buenas perspectivas de clima tanto para la cosecha del hemisferio norte en los cereales de invierno como al desarrollo de los cultivos de verano. Y se nos va terminando el calendario para esperar que pase algo que nos ayude con los precios, caso contrario los agricultores uruguayos estarán muy jugados a que los rendimientos sean buenos para compensar lo que pinta como un año de malos precios.

A nivel macro, el dólar se tomó un respiro y las bolsas tuvieron un buen desempeño, aunque vuelve la preocupación por los aranceles impuestos por Trump. Llamó la atención la decisión de castigar a Brasil con aranceles muy altos, del 50% por razones más políticas que técnicas al indicar que cree que la persecución judicial de Bolsonaro es inadecuada. Lo novedoso de esto es desconocer la separación de poderes de una democracia y el uso de los aranceles como medida de coacción política.

En la semana tuvimos USDA que fue bastante intrascendente. Para soja no aporta mucha cosa, salvo la casi inevitable caída de precios más cerca del 900 que otra cosa (por las dudas ya la vendí antes del USDA) a menos que ocurra el milagro de exportaciones excepcionales de EE.UU. y un consumo de harina desorbitante.

En maíz la sorpresa fue en cuanto al dato de stock finales, que ni aun así logro mover al mercado. Todo termina en modestas revisiones de producción de Argentina y Brasil (que siguen cortas respecto de la realidad). Finalmente, en cuanto a trigo el informe mantiene la falta de realidad del USDA en cuanto al saldo exportable de trigo de Europa y no aporta ningún dato relevante para intentar vaticinar que ocurrirá en el mercado de trigo. En suma, no pasa nada y el lunes nos vamos a encontrar nuevamente con una oferta pesada y una demanda que no tiene ningún apuro en salir a comprar hoy lo que sabe que podrá comprar más barato en unas semanas más.

En Uruguay no pasa mucho en el mercado de granos que sigue bastante quieto, con poco interés en ventas nuevas y productores que tienen un saldo de soja esperando el milagro de la suba de precios. Los cultivos de invierno vienen lentos en su emergencia.

En algunas zonas se necesita algo más de agua como para asegurar un arranque adecuado. Por lo demás el mercado local esta muy tranquilo con una oferta creciente de maíz de segunda que tiene difícil su colocación con un maíz importado cada vez mas barato.

La semana próxima no debería tener muchas novedades ni cambios respecto de la pasada, los precios de los granos en cosecha pintan mal y los de verano no tienen riegos mayores. El camino de menor resistencia es a que los precios sigan bajando en el mediano plazo.

TRIGO.

Los futuros de trigo tuvieron una mala semana y cerraron casi en sus pisos aunque arriba de 560. No tiene buen color porque la cosecha avanza sin muchos problemas y la oferta prevista es más que abundante, a lo que se suba la presión del maíz como substituto forrajero. Siendo estrictos, el trigo diciembre esta entre 590 y 560 desde hace tres meses y viene sobreviviendo a estos vaivenes de precios. Está claro que no tiene argumentos para subir, pero no parece ir mucho más abajo de lo que está. Yo soy de la idea de armar una posición compradora sobre todo en trigos de alta proteína para defender mejor el valor.

MAÍZ.

La imagen técnica del maíz es más que deprimente. Los argumentos son los mismos que hablamos en semanas anteriores, no vale la pena ahondar en lo mismo. Pronto lo veremos en 400. El dato de maíz de Brasil está mal, el USDA se queda corto en al menos 5 millones de toneladas.… Venderlo en estos precios es un poco jugado, es mejor esperar a que se estabilice.

SOJA.

Los futuros de soja la pasaron mal en la semana y quedaron a las puertas de quebrar la barrera de los 1000, cosa que creo ocurrirá en breve. No hay motivos para que suba, al menos hasta que aparezca alguna señal con el clima de agosto que por ahora pinta normal. El USDA la nada misma en cuanto a información para dar indicaciones respecto del futuro. Yo la vendo sin pensar mucho. En Uruguay precios en el entorno de 350.

ACEITE DE SOJA.

Con las escaramuzas sobre aranceles y el foco de nuevo puesto en Canadá, el aceite no tuvo una mala perfomrance pero se va quedando sin piernas, por lo que puede ser una oportunidad para venderlo y hacer unos pesos hasta el 51. Por lo demás el aceite de soja en EE.UU. es un producto de uso doméstico y de poca utilidad para negociar nada. Soy vendedor a estos precios.

HARINA DE SOJA.

Igual que la soja, a la harina no la quiere nadie y eso solo va a empeorar en el futuro. Como oportunidad de compra puede no ser una mala idea, pero yo prefiero esperar.

INFORME COMPLETO.

Nosotros, el pueblo…

Nosotros, el pueblo…

Informe de mercado.

Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Los padres fundadores de EE.UU. estarían un poco preocupados por el destino de lo que crearon si vieran hoy en lo que se ha convertido. El aislacionismo y el cerrarse al comercio fueron dos grandes males que costaron muchas vidas, pero la historia está hecha para repetirse para quienes no aprende de sus lecciones.

Mientras EE.UU. se va de fin de semana largo, Donald Trump se anota una victoria con su partido respaldando una ley de presupuesto que amenaza con expandir el déficit fiscal y hacer de la economía un campo de minas. Junto a las heridas autoimpuestas de la guerra comercial, el panorama es de preocupación, por decir lo menos. Los agricultores norteamericanos (nuestro interés por el momento) están felices porque la ley de presupuesto les mejora la red de contención interna vía subsidios encubiertos a los seguros que los aíslan de lo que pase con los mercados internacionales. En estas cosas el mercado es el soberano, así que habrá que esperar a las consecuencias de estas acciones. Mientras tanto, los traders de Chicago no se quisieron calentar mucho la cabeza y decidieron salir un poco de sus posiciones en una suba un poco rara de explicar. Hay unos cuantos rumores sobre el tema acuerdos arancelarios, pero nada confirmado, aunque el mercado descuenta que los productos agrícolas serán moneda de cambio.

Los mercados financieros tuvieron una muy buena performance luego que el reporte de empleo se mostrara en línea con lo esperado sin mostrar un deterioro importante. Eso es parte del problema: parece que a Trump las cosas le salen bien a pesar de todo lo que hace, mientras que el mercado desconfía de los resultados que se darán en el futuro. Como sea, mientras el mercado de granos nos da pequeñas oportunidades que hay que saber captar.

En el hemisferio norte están con la cosecha de trigo a todo vapor, lo mismo que con la colza y la cebada. Los datos iniciales son de buenos rindes en trigo pero baja proteína, rindes decepcionantes en el inicio de la cosecha en Rusia y Ucrania, mejores resultados en Francia y Alemania. En cuanto a la colza, el rinde menor al esperado y problemas con la logística por falta de agua en los ríos. En cuanto a los cultivos de verano, EE.UU. rumbo a una cosecha soñada, sin riesgos con el clima por 15 días y un Brasil con una cosecha monstruosa que le va a pesar al mercado. El único que la pasa mal es el maíz en Europa central, pero el mercado sabe que hay maíz en el resto del mundo y no le preocupa demasiado.

En la semana tuvimos el reporte de intención de siembra y stocks en EE.UU. que no trajo ninguna novedad relevante y pasó como el reporte más intrascendente en años. Ahora a esperar el de oferta y demanda de julio que debería empezar a ajustar los números de la producción de maíz de Brasil.

URUGUAY.

En Uruguay la siembra de invierno va por sus tramos finales. Hay que ser realmente optimista para plantar trigo, y más con la suba de los fertilizantes que no hacen más que agregarle incertidumbre al resultado. Invierno siempre es desafiante en todo sentido, pero se puede poner espeso si los precios no repuntan como para darnos cierta comodidad. Por eso es tan importante aprovechar los momentos de mercado.

La semana arranca el lunes con lo que el mercado quiera proponernos. Los fundamentos no son buenos hasta que despejemos incertidumbres sobre los aranceles y acuerdos entre países. Veremos quien resiste la ira de Trump y como se lo toman los mercados. Como me enseñó un gran pro hombre de los agronegocios, con el margen no se juega.

TRIGO.

La suba es mayormente atribuida a cobertura de fondos de sus posiciones cortas por el fin de semana largo. Es comprensible que como están las cosas nadie se quiera quedar con mas que lo imprescindible a menos que tengas el respaldo físico. En plena cosecha, es sospechosa la suba y no hay muchas noticias alentadoras que permitan hacer pensar en una suba, más bien los elementos fundamentales no son los mejores. Veremos el lunes, pero las noticias son conflictivas. Me sonó sospechoso el cierre del viernes, daba para subir más, pero si se quedó sin piernas capaz es que hay que esperar a que aparezca la demanda. Si soy productor un mejorador de venta no es una mala alternativa. Insisto, no es solo lo que pasa en el trigo, la marea de maíz le pone un techo también.

MAÍZ.

Más sospechoso aún fue la subida estelar del maíz que tiene una oferta enorme y cero amenazas del clima, con excepción de Europa. Es cierto que la demanda es firme, pero Brasil cada semana que pasa suma más maíz a sus posibles existencias y alguien se lo tiene que llevar. Aun con esta suba sigue en una tendencia bajista, por lo que no es mal plan para venderlo pensando en la posición diciembre.

SOJA.

El aceite lideró las subas con las buenas perspectivas que pasan a tener los bio combustibles y la soja tuvo un pequeño repunte. Yo miro con cariño cada oportunidad de suba en soja pero pensado en 2026, con un mejorador puedo llegar a un 420 soja julio 26 y asumiendo una base de- 25 US$ estoy en un nada despreciable 400. El archivo queda escrito. Por lo demás, la soja de EE.UU. está en muy buen estado y creo que la tiene difícil para repuntar más que eso.

En Uruguay precios en el entorno de 365.

ACEITE DE SOJA.

Sigue al alza, a pesar de algunos ajustes menores a la ley de presupuesto en cuanto a los créditos para bio combustibles. Queda el gap abierto, que lo tendrá que cerrar más temprano que tarde. No creo que le den mucho más las piernas en la suba, menos en plena cosecha de canola y con el mercado bien abastecido. El girasol es cada vez más un tema de preocupación, pero veremos si los precios ajustan a algo más razonable.

HARINA DE SOJA.

Hasta la harina de soja logró repuntar, pero en el mediano plazo la sigue teniendo difícil. Sobra harina en todos lados y los fondos siguen muy vendidos y sin ganas de soltar el hueso por el momento. ¿Será que este es el piso? A 280 la compro como apuesta a sumarle algún mango a la soja del 2025.

(Foto de portada: Monte Rushmore en Dakota del Sur, Estados Unidos. La escultura es autoría de Gutzon Borglum (1867-1941), que ayudado por su hijo Lincoln Borglum (1912-1986) dedicó 14 años para completarla. En ella aparecen cuatro de sus presidentes más importantes de Estados Unidos: George Washington, Thomas Jefferson, Abraham Lincoln y Theodore Roosevelt | Foto de RJA1988 en Pixabay).

DOCUMENTO COMPLETO.

Informe de mercado: Compre hoy pague mañana. Las bolsas descuentan un arreglo comercial.

Informe de mercado: Compre hoy pague mañana. Las bolsas descuentan un arreglo comercial.

En cuanto a los granos, la semana pasada transcurrió con pocas novedades y precios a la baja que se explican mayormente por la falta de problemas con el clima tanto en el desarrollo de los cultivos de verano (maíz y soja) como de la cosecha de cultivos de invierno.

Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | El indice SP 500 tuvo el mejor cierre de la historia a pesar de que las cosas en el mundo están como están. Ya no vuelan misiles para un lado y otro en Medio Oriente por lo que solo debemos ocuparnos de la eterna guerra entre Rusia y Ucrania. Donald Trump sigue con su retórica comercial implacable a fuerza de amenazas en su red social y todo indica que los acuerdos que promete si bien están más cerca, no hay nada asegurado con la excepción de China.

Trump va aprendiendo a que las fechas límites que impone complican más que lo que ayudan. La fecha límite del 4 de julio para tener la ley de presupuesto y cerrados algunos acuerdos relevantes pierden un poco de vigor al menos en lo comercial. En cuanto al presupuesto parece que las negociaciones en congreso avanzan lentamente hacia los intereses del mandatario, pero no con pocas dificultades.

 A nivel general lo destacado de la semana es la debilidad del dólar por la renovada andanada contra el presidente de la FED por parte de Donald Trump. Por otro lado, los principales índices accionarios siguen muy firmes como si la guerra comercial y los aranceles no fueran un problema. Mi hipótesis es que el mercado descuenta que tendremos alguna forma de acuerdos comerciales más temprano que tarde. En cuanto a la energía, se espera un nuevo aumento de la producción de crudo con lo que no hay muchas presiones alcistas en el precio si no tenemos incidentes militares que afecten la oferta.

En cuanto a los granos, la semana pasada transcurrió con pocas novedades y precios a la baja que se explican mayormente por la falta de problemas con el clima tanto en el desarrollo de los cultivos de verano (maíz y soja) como de la cosecha de cultivos de invierno. Hoy tenemos el informe de existencias y el ajuste del dato de intención de siembra para EEUU. Es un reporte impredecible y que suele mover mucho al mercado. Las apuestas son a que hay más soja y maíz del previsto y a una recomposición del stock de trigo, así como una baja del stock de maíz. Suele ser el día de más volatilidad hasta que los mercados se acomodan. La realidad es que duele un poco ver los precios tan bajos, especialmente el trigo y la demanda sigue sin aparecer.

Sin riesgos evidentes en el clima al menos para la primera mitad de julio (clave para el maíz) y con una cosecha brasileña cada vez más presente en el mercado es poco lo que los precios pueden hacer para avanzar. China sigue ausente del mercado y no hay novedades sobre el que los productos agrícolas sean sujeto de acuerdo por lo que no tenemos muchas esperanzas de que la demanda nos dé una mano. Con la soja las cosas parecen ser diferentes por la demanda agregada en el tema bio pero primero hay que colocar la harina, tarea que no es sencilla.

En Uruguay la cosecha de maíz de segunda sigue afirmándose, pero con cierta lentitud, y los precios aflojan un poco. La soja cayo nuevamente de precios y los productores prefieren esperar un poco para ver si son capaces de agarrar algún repunte más. Las siembras avanzan y se rumorea de aumentos en el área de trigo, cosa difícil de entender para el panorama de mercados que tenemos por delante.

Si no logramos un repunte de la demanda, con un año de producción normal es difícil imaginar repuntes importantes de precios. Con la urea (y los fertilizantes) en general más cara, el rinde de equilibrio no deja mucho margen de error, mucho menos con Argentina con sobrante de trigo y más área. A menos que un problema productivo afecte al hemisferio sur (que es el 20% de la oferta de trigo exportable) las opciones de más demanda son nuestra única salvación. Eso y que China decida que las materias primas agropecuarias son algo adecuado para balancear el comercio…

TRIGO.

No solo no aguantó el piso previo sino que siguió casi hasta los precios más bajos del contrato. No hay mucho interés en el trigo aunque hay una noticia de especial relevancia, con Egipto con el potencial de comprar más trigo en el mercado por una menor cosecha a la prevista. Por lo demás, la cosecha en el hemisferio norte avanza sin muchas dificultades, con menores resultados a los esperados en Rusia en el inicio de la cosecha. Veremos lo que dice el reporte de existencias y área pero pinta que no lo va a ayudar mucho.

Ya estuvimos en estos precios antes y la demanda empieza a aparecer. Yo lo compro por barato.

MAÍZ.

Los fundamentos son más o menos los mismos que la semana pasada y los resultados los esperables: sin riesgo climático y con un maremoto de maíz de Brasil es poco lo que los precios pueden hacer. A menos que hoy haya sorpresas, toca ponerse a rezar para que no baje más que esto.

SOJA.

Los futuros de soja luego de la corrección de la semana pasada se las arreglaron para sostenerse por sobre los 1010, su piso anterior. Veremos con el informe de hoy si se confirma la mayor área sembrada si logra traspasarlo. El aceite sigue ayudando pero no sabemos por cuanto tiempo más.

China sigue ausente de las compras en EE.UU.

En Uruguay precios en el entorno de 355.

ACEITE DE SOJA.

Sigue sin cerrar la brecha en el salto anterior. A ver si hoy le da para calzar esa diferencia y definir una tendencia. El aceite de soja quedó caro en comparación con el resto, pero empiezan a surgir algunas voces de preocupación en el caso del aceite de girasol por los efectos de la sequía en Europa. De momento el mercado físico parece acompañar la subida de precios, veremos hasta dónde llega.

HARINA DE SOJA.

La inexorable baja de la harina (y la suba del aceite) son la puja a definir de momento. Al igual que el aceite parece haberse estabilizado un poco en niveles muy bajos donde la demanda empieza a hacer mella. Al igual que el trigo la compro por barata no porque me gusten o vea claros los fundamentos.

ANÁLISIS COMPLETO.

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