Poco se habla de la producción de membrillos, Griselda Mendieta explicó los problemas que debió enfrentar ese sector de la producción nacional.
Gustavo Clavijo | Canelones | Todo El Campo | Griselda Mendieta, referente de mujeres rurales de Juanicó (Canelones), se refirió a la vendimia y la situación del membrillo, dos actividades vinculadas a frutas que presentan problemas en su comercialización.
UNA VENDIMIA COMPLICADA.
Dijo que la vendimia estuvo “complicada” porque hubo “muchos kilos sin tener donde colocarlos debido a que la industria ya poseía el vino y no demandaba uva”, expresó. Con el paso de los días eso cambió y los productores pudieron vender su uva, pero no al precio deseado.
Finalmente, el Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi) hizo un operativa para absorber los kilos que la industria no podía comprar. Ese operativo consistió en derivar la uva a dos bodegas, una para las blancas y otra para las tintas.
Así se llegó al fin de la vendimia “con tranquilidad, lo que no quiere decir que el viticultor esté contento con los precios porque es un producto perecedero y al comenzar con dificultades se terminó vendiendo a precios bajos”.
Asimismo, Mendieta recordó que ha habido cambios en el consumo del vino, se consume menos, se vende menos, y por eso la uva tiene problemas de colocación.
“Dentro de todo se confía que se haga un buen vino, que se pueda exportar, y así el productor pueda tener una ganancia más por su producción”.
MEMBRILLO.
Respecto al membrillo dijo que es otra producción que también ha tenido problemas, porque “maduró unos 20 días antes” y la industria compró con tardanza, lo que hizo que la fruta cayera, y al caerse pierde calidad. Aproximadamente estamos “en la mitad de la cosecha, hay un poco picado y un poco en mal estado porque se cae y eso el productor lo pierde porque queda en el tronco de la planta”.
El año pasado, el kilo se comercializó a $ 9,70 y este año está a $ 10. Ese “no es el monto que esperaba el productor”, enfatizó.
Los productores que están en el plan regional de plagas que hace la Dirección General de la Granja (Digegra), cobran más: “Por ser un producto que se industrializa, paga 4,50 por kilo remitido a las plantas industriales, y eso hace subir el precio”.
“Está muy bien de parte del Estado, pero la industria debería aumentara un poquito más, sin embargo dicen que no se consume mucho el dulce de membrillo, que es una fruta que no ofrece oportunidad para hacer otras cosas, que las amas de casa no están muy acostumbradas a utilizarlo”.
Efectivamente, “es muy poco lo que mueve el membrillo fresco, entonces va todo para la industria, y el dulce que se elabora tampoco es muy demandado”.
“La zafra de durazno fue muy buena, tuvimos buen tamaño, buena sanidad y eso fue gracias al agua”.
Colonia | Todo El Campo | En Colonia Valdense, se encuentra el establecimiento fruticultor familiar de la familia Sibille, que trabaja con duraznos, membrillo y manzanas. Como todos los productores del país, este año enfrentó la falta de precipitaciones con el diferencial de contar con un sistema de riego por goteo. Marcelo Armand Ugón, corresponsal del programa Diario Rural (radio Rural) en Colonia realizó un informe en el cual el productor explica cómo enfrentó el desafío de la sequía.
Arnaldo Sibille comentó que en el establecimiento la producción principal es la fruticultura, pero con diversificación, sin embargo en “este año que fue muy particular” el mejor resultado se obtuvo de la fruta gracias al riego.
“Tenemos 15 hectáreas de durazneros, 5 de membrillo y 3 de manzana, lo que se mantuvo con riego por goteo que funcionó toda la temporada porque no tuvimos aporte de lluvias”, y aquellos rubros por fuera de la fruticultura y que no tienen riego, “como ganado, forraje, zapallo” no lograron resultados. “Achicamos el ganado hasta ajustarlo a lo que se pudo mantener y los cultivos se perdieron de forma total”, contó.
En duraznos “gracias al riego pasamos la zafra que va de noviembre a febrero, hace un mes terminamos la cosecha que fue buena porque regamos como nunca, incluso después de cosechar para mantener las plantas para la próxima producción”, señaló.
RIEGO.
El riego que aplica la familia Sibille se sustenta en tres pozos semisurgentes para las más de 20 hectáreas de fruticultura, durante 18 horas por día, con un estimado de 35.000 litros por hora entre los tres pozos.
Como no hubo lluvias “este año se debió regar desde mitad de setiembre hasta ahora”, pero precisó que los 30mm de las últimas precipitaciones más la entrada del otoño, “en los durazneros podremos disminuir el agua”.
No ocurre así con los membrillos, fruta en la “que estamos en zafra con un 20% de cosecha, y hay que darle agua para obtener tamaño”. Luego “queda la manzana a la cual hay que regar hasta mayo”, si continúa la sequía.
Consultado si es redituable regar, el productor dijo que en el riego es donde está la diferencia: “La zafra de durazno fue muy buena, tuvimos buen tamaño, buena sanidad y eso fue gracias al agua. Y frente a los que no pueden regar este año no se notó un gran aumento de precios pero sí una agilidad en la venta durante toda la zafra con un número bastante aceptable”. Además regar hace la diferencia también hacia el futuro: “Va a repercutir en los años que vienen porque quienes no pudieron regar tendrán las plantas muy sentidas para las próximas producciones”, concluyó.
Desde una productora, pasando por la industria, y con la distribución de la Intendencia, se hizo posible la obra benéfica en la que públicos y privados lograron los objetivos buscados.
Canelones | En el marco del programa Canelones te alimenta, una productora de membrillo, la empresa Rincón del Gigante y la Intendencia de Canelones, en un esfuerzo mancomunado, concretaron otra nueva entrega de 800 kilos del Membrillo Solidario.
Griselda Mendieta (en la foto con el micrófono), productora del departamento, donó la fruta; la empresa Rincón del Gigante la industrializó y la Intendencia, a través de la Dirección General de Desarrollo Humano de la Intendencia, se distribuyó en diferentes comedores, merenderos y ollas del departamento.
En la presentación del dulce estuvieron presentes la productora Griselda Mendieta, Sebastián Assandri como responsable de Rincón del Gigante, jerarcas de la Intendencia y la alcaldesa del Municipio 18 de Mayo, Adriana Sánchez.
Además, ese día se realizó un taller sobre nutrición con niños y se entregó un recetario saludable para realizar preparaciones con dulce de membrillo.
Mendieta dijo que es un gusto poder ayudar a la sociedad: “Nos enteramos de este programa y, como tenemos una sobreproducción en la quinta, decidimos donar la fruta que no tenía salida ni venta. Se llegó a este resultado y ya van muchas entregas”.
Assandri comentó que en la empresa Rincón del Gigante elaboran dulces, mermeladas y salsas. “Para esta causa solidaria aportamos la materia prima que no es fruta, esto lo hizo Griselda, sino otros ingredientes y el proceso industrial que conlleva la molienda, elaboración y envase”, puntualizó.
El Dr. Esc. Francisco Legnani, secretario general de la Intendencia, manifestó que la Intendencia de Canelones fue el nexo de articulación entre una productora y una empresa Con el trabajo de todos se logró”.