¿Es posible conjugar, en un mismo modelo de país y sin conflictos, conceptos y acciones como “cambio climático”, “productividad económica”, “seguridad alimentaria e hídrica”, y “salud”?
Montevideo | Todo El Campo | Los desafíos mundiales, como el cambio climático, la productividad económica, la seguridad alimentaria e hídrica, y la salud, podrían superarse si los países utilizan sus recursos naturales con mayor eficiencia y, según un nuevo informe, esto puede lograrse sin sacrificar el ambiente ni la prosperidad humana. Los países tienen la capacidad necesaria para casi duplicar su desempeño, ya sea en términos de rentabilidad económica o de resultados ambientales al mejorar en una dimensión sin sacrificar la otra.
Mediante una combinación de ciencia innovadora, fuentes de datos, y modelos biofísicos y económicos, en el informe Las fronteras de la naturaleza: Lograr sostenibilidad, eficiencia y prosperidad con el capital natural, se ofrece una forma novedosa de abordar el desafío fundamental de la sostenibilidad.
En dicho informe se señala cómo y dónde los países pueden utilizar los recursos naturales de manera más eficiente para prosperar sin dañar el planeta ni traspasar sus límites en el uso de los recursos naturales.
“Esta labor nos ayuda a entender lo que está sucediendo a nivel de los países y la manera en la que estos pueden alcanzar sus objetivos de desarrollo sin sacrificar las metas en materia de biodiversidad o cambio climático”, dijo Richard Damania, economista en jefe de Desarrollo Sostenible del Banco Mundial.
“Los países pueden tomar determinadas medidas ahora para brindar a sus habitantes una vida mejor y, al mismo tiempo, mantener un planeta habitable”, aseguró Damania.
En el informe, preparado por el Banco Mundial, el Natural Capital Project (Proyecto de Capital Natural) y el Instituto Internacional de Análisis de Sistemas Aplicados (IIASA), se concluye que casi todos los países presentan importantes brechas de eficiencia en el uso de sus recursos naturales. Superar estas diferencias puede servir de ayuda para enfrentar muchos de los problemas económicos y ambientales más apremiantes del mundo: el cambio climático, la productividad económica, la seguridad alimentaria e hídrica, y la salud. En general, los países tienen la capacidad necesaria para casi duplicar su desempeño, ya sea en términos de rentabilidad económica o de resultados ambientales al mejorar en una dimensión sin sacrificar la otra.
Dado que los países enfrentan necesidades contrapuestas y tienen presupuestos limitados, abordar las ineficiencias sigue siendo una de las formas más eficaces en función de los costos y más atractivas desde el punto de vista económico para alcanzar los objetivos mundiales de sostenibilidad. Asignar y gestionar la tierra, el agua y otros recursos naturales de una mejor manera podría aumentar el total de los ingresos anuales de alrededor de US$ 329.000 millones en todo el mundo, que se derivan de la agricultura, el pastoreo y la silvicultura, y producir una cantidad de alimentos suficiente para la población mundial hasta 2050, sin una pérdida neta de bosques y hábitats naturales.
“Este trabajo novedoso ayudará a integrar el valor que la naturaleza proporciona a la sociedad en las decisiones importantes”, señaló Steve Polasky, profesor de Economía Ecológica/Ambiental de la Universidad de Minnesota e integrante del Natural Capital Project.
“En las herramientas innovadoras que se desarrollaron para este informe, se aprovechan los datos ambientales y económicos a nivel mundial, con el fin de proporcionar información práctica para la toma de decisiones políticas, financieras y de gestión por parte de los responsables de esta tarea”, señaló.
Según el informe, evitar la deforestación podría ayudar a secuestrar 85.600 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono adicionales (o hasta 1,7 años de emisiones mundiales), sin afectar el crecimiento económico. Además, gastar los montos actuales en la prevención de la contaminación atmosférica de una manera más eficiente podría ayudar a salvar 366.000 vidas más cada año. Muchas de estas oportunidades se encuentran en países de ingreso bajo y mediano, es decir, los que más se beneficiarían con estas medidas.
No hay una solución única para todos, dadas las enormes diferencias que existen entre los países y los desafíos que enfrentan. En el informe, por tanto, se identifican los cambios necesarios y en qué parte de un país es preciso implementarlos. Asimismo, se proporcionan indicadores para evaluar las ventajas relativas y se identifica la combinación de políticas más adecuada para el país. El resultado es una hoja de ruta detallada que puede ayudar a los países a seleccionar el enfoque más viable y asequible para satisfacer sus necesidades ambientales y de desarrollo. (BM)
El informe Nature’s Frontiers se puede descargar aquí (en inglés): Aquí.
El director de Desarrollo Rural, Carlos Rydström, y el presidente de Inale, Juan Daniel Vago, firmaron convenio para apoyar planes de desarrollo rural sustentables, tanto para lechería como para quesería artesanal.
Este jueves 6 de octubre sesionó el Grupo de Coordinación Central (GCC) del Sistema Nacional de Innovación y Desarrollo Rural (Snider). La actividad se realizó en el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) sede en el Parque Tecnológico del LATU. Además, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), a través de la Dirección General de Desarrollo Rural (DGSR), firmó un convenio con el Instituto Nacional de la Leche (Inale) para apoyar planes de desarrollo rural sustentables, tanto para lechería como para quesería artesanal. Participaron el director de Desarrollo Rural, Carlos Rydström y el presidente de Inale, Juan Daniel Vago.
El acuerdo, con enfoque territorial y considerando la perspectiva de género se llevará adelante durante el período 2021-2025, y supone una inversión de más de 18 millones de pesos. La inversión permitirá mejorar el acceso de más productores a la tecnología disponible, a través de planes de desarrollo predial. Además, contribuirá a la mejora de la gestión productiva, económica y ambiental de los productores remitentes y queseros.
Carlos Rydström, director de Desarrollo Rural, dijo que “la herramienta se consolida y va generando sus efectos deseados, en este caso, este ambicioso proyecto, que por un lado fortalece y financia aún más el acuerdo de la quesería artesanal que lleva más de diez años en ejecución, es sólo una parte del mismo, ya que lo más sustantivo está en la generación del proyecto Cuencas Lecheras, que se lanzara en Fray Bentos, pero aquí, en el marco del Snider tiene su gobernanza y su aplicación, en la lógica de mayor descentralización y mayor utilización de datos objetivos en la toma de decisiones para poder ejecutar políticas públicas destinadas a la producción familiar con mayor eficiencia”.
Entre otros asuntos más formales, en la reunión del GCC se compartieron los avances y funcionamiento de los Grupos Coordinadores Regionales (GCR). Durante la jornada también se realizó un análisis de situación país, en base a la propuesta de desarrollo ganadera; se continuó con el mapeo de proyectos en ganadería que se desarrollan en el país, a cargo de INIA y el Instituto Plan Agropecuaria (PA).
Además, se realizaron comentarios sobre la presentación del Snider y la propuesta ganadera a la Oficina de Planificación y Políticas Agropecuarias (Opypa) y al PA. Hubo también una presentación sobre los procesos de digitalización en el agro y se manejaron los temas para la próxima reunión.
“Uno de los temas centrales de la reunión de este jueves fue el intercambio de información y la promoción de las TICs en el agro, para lo cual es muy importante profundizar en el mapeo de actores que existe y en el involucramiento de las demás instituciones referentes en la temática”, señaló Rydström.
SNIDER.
El Sistema Nacional de Innovación y Desarrollo Rural tiene por fin direccionar, articular y coordinar el diseño e implementación de las distintas acciones orientadas al Desarrollo Rural Sustentable.
En la búsqueda de responder a los desafíos actuales del medio rural, el Snider propone la conformación de un sistema dinámico de articulación y coordinación donde confluyan los esfuerzos de instituciones y actores sociales en el diseño e implementación de acciones sociablemente pertinentes y técnicamente sustentadas, orientadas al desarrollo rural.
Para ello se proponen las siguientes líneas de acción: 1) Impulsar y fortalecer la interacción interinstitucional y la articulación público-privada para el diseño y ejecución de políticas públicas y otras acciones que promuevan el desarrollo rural. 2) Promover la difusión y el acceso a información técnica u operativa disponible a fin de sustentar los procesos de toma de decisiones de las diversas acciones orientadas al sector agropecuario y el medio rural. 3) Promover la generación de intervenciones territoriales específicas (ITE).
Uno de los ejes medulares del Snider refiere a la generación y promoción de procesos de carácter interinstitucional en articulación con actores de la sociedad civil, como estrategia para el desarrollo de intervenciones específicas, adaptadas a las particularidades de cada sector o territorio. Para ello, se apuesta a la consolidación de los espacios interinstitucionales existentes y la generación de nuevas instancias de coordinación/articulación, donde los distintos actores puedan aportar a la comprensión de la realidad y diseño de propuestas.
El Grupo de Coordinación Central del Snider tiene por objetivos promover el alcance de los objetivos específicos de este sistema de innovación. Está integrado por un representante y un alterno de las siguientes instituciones: Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, Dirección General de Desarrollo Rural y Unidad de Descentralización, Instituto Nacional de Colonización, Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias, Instituto Plan Agropecuario, Instituto Nacional de la Leche y Secretariado Uruguayo de la Lana. (MGAP).