Mattos: Frente al panorama mundial “tenemos que transmitir optimismo y cautela”.
En medio de ese panorama desafiante, Mattos quiso dar “un mensaje de aliento, porque la guerra seguramente pasará; tenemos que transmitir optimismo y al mismo tiempo cautela porque la volatilidad de los precios de las materias primas es muy alto y no sabemos cómo se recompondrá la situación».
El jueves 31 de marzo se inauguró la 11ª edición de la Expo Melilla, “La producción en movimiento”, luego de dos años de no poder realizar la actividad debido a la pandemia. En el predio que se encuentra en los accesos de Montevideo, en ruta 5 Km. 11.500 y Cno. Pérez (Melilla, Montevideo), la exposición se realizará hasta el 3 de abril.
Del acto de inauguración participó la vicepresidenta Beatriz Argimón, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Matos, la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse y el presidente de la Asociación Rural del Uruguay Gonzalo Valdés.
El ministro de Ganadería dijo que estamos pasando “un momento complejo de la historia” que es “difícil de comprender e interpretar” porque luego de 77 años del fin de la Segunda Guerra Mundial “tenemos el conflicto armado de mayor envergadura en el corazón de Europa”, con costos en vidas humanas y “consecuencias para la seguridad alimentaria”, por los “costos de producción y de los alimentos, y enfrentados a una amenaza para toda la humanidad respecto al riesgo de un aumento dela pobreza y de las hambrunas en el mundo”.
Eso se suma “a una realidad mundial que sigue estando”, dijo en referencia a la pandemia que tiene sus efectos “tanto en la salud como en la vida” de las personas.
“Todos sabemos la presión inflacionaria que generó la pandemia porque todas las economías del mundo inyectaron tal monto de liquidez en el mercado, y nos encontramos que la presión de la demanda superó la capacidad de oferta. Eso sumado a aspectos climáticos que afectaron la producción en varias regiones del mundo, a los problemas logísticos con la crisis de la industria marítima, se generó un combo de condiciones que tiene un exponencial crecimiento adicional por el tema de la guerra, en el aspecto de la energía, de los alimentos y algunos insumos fundamentales para nuestra producción”, señaló.
Todo eso afecta en los precios de los productos que Uruguay produce, y “el país agropecuario se va a beneficiar” con esa alza, pero tenemos “la contracara que es el aspecto de la presión inflacionaria que impacta en todo el mundo y nosotros no podemos estar ajenos”.
Es en este segundo punto donde tenemos “aumento de combustibles, de los alimentos básicos, la presión sobre la harina, los aceites vegetales”, todo en “un panorama incierto”.
“Lógicamente el Gobierno está tomando las medidas en forma gradual, paulatina”, para no trasladar esos aumentos a la población de menores ingresos.
Hay un “encarecimiento mundial de los productos básicos de consumo de la canasta familiar” y ante eso Uruguay está tomando medidas “como el acuerdo de precios, la renuncia fiscal en el caso del asado, y se remitirá una nueva propuesta por los panificables, fideos, porque el precio del trigo impacta mucho en las familias de los uruguayos”, expresó.
LOS COMBUSTIBLES.
Respecto al alza de los combustibles, Mattos dijo que “también tomamos medidas para ir generando gradualidad” en los aumentos ya que los combustibles “tienen alto impacto en toda la formación de precios”, medida asumida “más allá de las recomendaciones de la Ursea” (Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua).
En medio de ese panorama desafiante, Mattos quiso dar “un mensaje de aliento, porque la guerra seguramente pasará; tenemos que transmitir optimismo y al mismo tiempo cautela porque la volatilidad de los precios de las materias primas es muy alto y no sabemos cómo se recompondrá la situación, pero mas allá de la guerra somos optimistas”, subrayó.
CAROLINA COSSE: “EL CONSUMIDOR EXIGE CALIDAD”.
La intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, dijo “desde hace un tiempo” se vive “la revolución más grande y profunda de la historia de la humanidad sobre el mundo del trabajo”, para la cual no hay fronteras ni rubros, y “una muestra de eso es esta exposición donde hay mecanización de la producción más primaria y eso aporta a la productividad, la baja de costo y la mejora de la producción”.
También “impone desafíos con la pérdida de puestos de trabajo y de tipos de trabajo” por lo debe haber “reconversión”. En ese sentido señaló la necesidad de analizar la cadena de valor y mencionó la UAM (Unidad Agroalimentaria Metropolitana) que se emplaza a pocos metros del predio donde se realza la Expo Melilla.
El consumidor, y también el consumidor de Uruguay, “está pidiendo más calidad, está pidiendo saber qué consume”, y “con tecnología, con el saber hacer podemos potenciar todo el sector con la colocación de productos de mayor valor agregado”, comentó.
“Acá veo esperanza y puedo comprometer toda nuestra energía para trabajar en la UAM en el sentido de ayudar a los productores y comercializadores a agregar valor parados desde la demanda”, finalizó.