A nadie le sirve una escalada de los precios del crudo, mucho menos un bloqueo del estrecho. A los granos, una guerra abierta en Medio Oriente tampoco es de interés para los que vendemos granos porque esa zona del mundo concentra a los principales compradores y la inestabilidad no es buena para los negocios.
Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Jean François Revel, un politólogo francés de prosa aguda y dueño de una narrativa divertida escribió un libro muy interesante que se llama El Conocimiento Inútil. Su tesis central es que tendemos a crear demonios políticos y los asociamos a las peores aberraciones del pasado para con ello ejemplificar a las futuras generaciones sobre los peligros (muchas veces inventados) para hacernos con el poder y controlar a las masas. El mundo ha entrado en una peligrosa escalada, con el bombardeo de EE.UU. a Irán, la excusa: terminar con un programa nuclear que hace inaceptable que la teocracia iraní logre un arma atómica. Es muy discutible si estos eran los medios, pero la realidad es que estamos en esto y no vale mucho la pena lamentarse. Si la amenaza es real o inventada se lo dejo al lector.
La realidad es que la guerra sigue, veamos las consecuencias: hasta ahora ninguno de los dos lados se le dio por ir contra infraestructura crítica (ni los israelíes están bombardeando las terminales de petróleo de los iraníes, ni estos salen de intentar asustar gente con sus misiles).
Irán amenaza (como hace 15 años y contando) con cerrar el estrecho de Ormuz, pero la jugada es peligrosa porque por ahí sale su petróleo (a su principal comprador que es China) y llega el grueso de sus alimentos, es decir equivale a pegarse un tiro en el pie. En cuanto a los granos, pasan por ahí 24 millones de toneladas, la mayoría para Kuwait, Catar Iran e Irak. Es decir, unos cuantos compradores importantes de granos que agrega incertidumbre al mercado.
A nadie le sirve una escalada de los precios del crudo, mucho menos un bloqueo del estrecho. A los granos, una guerra abierta en Medio Oriente tampoco es de interés para los que vendemos granos porque esa zona del mundo concentra a los principales compradores y la inestabilidad no es buena para los negocios.
Por fuera de las molestias que nos causa navegar entre estas aguas, los mercados enfrentan un inicio de la cosecha de trigo con algunos problemas climáticos que se hacen notar pero que no parecen causar el daño necesario para provocar una subida de precios sostenida y los fondos si bien están desarmando sus posiciones no las abandonan del todo. En maíz la película es otra, el único riesgo con el clima es Europa y nada más. La soja va recibiendo finalmente el calor y la lluvia que necesita en EE.UU. para avanzar con convicción. Por ende, nada que nos preocupe del lado de la oferta en el mediano plazo. En cuanto a los aceites, mientras el mercado del crudo siga con un diagnóstico de colon irritable los aceites lo van a acompañar, aunque empiezan a surgir algunas dudas sobre si la legislación en EE.UU. (que empujó el alza) es factible de pasar por el filtro parlamentario (todo indica que la van a atemperar un poco). Y recuerde que todo lo que sube de la nada baja igual de rápido cuando el mercado tiene más dudas que certezas.
Entonces, mientras navegamos los riesgos de irrupciones de corto plazo por la guerra en Medio Oriente y enfrentamos fundamentos de mercado que apuntan a pocos riesgos en la oferta, la duda es como se expresan de acuerdo a nuestros intereses. Yo tiendo a creerle más a los fundamentos que al corto plazo. En mi opinión, si bien empiezan a existir fuerzas mas estructurales (costos de cultivos, pérdida de rentabilidad), recién veremos efectos mayores en los precios en 2026. La semana en cuanto a precios va a seguir estando dominada por los titulares de prensa, y lamentablemente le quedan algunas semanas más a esto para que se resuelva.
Los fundamentos son de que a menos que ocurra algo catastrófico con la cosecha de trigo, no hay motivos para pensar en un quiebre de la cosecha ni de trigo (en curso) ni de maíz (que se acerca a su fecha crítica sin riesgos mayores con el clima). En cuanto a la soja, el panorama es más dependiente de los líos con los bio combustibles y el curdo que sus propios fundamentos (que no son malos). Veremos que nos depara la semana.
TRIGO.
El trigo no pudo sostener (al menos de momento) la suba fuerte que tuvo el la semana pasada y empieza a perder algo de pie. Tiene la cosecha enfrente y los compradores grandes está lidiando con otros problemas. Es raro ver una subida tan fuerte con la cosecha en la puerta y sin grandes riesgos con el clima pero los mercados están mas enfocados en otra cosa. No lo veo volviendo a 570 pero el salto es interesante porque implica un cambio de tendencia. El mejor escenario posible para los que tienen cebada es que el 600 sea el nuevo piso.
Lo interesante es que los vendedores no quieren convalidar estos precios, pero hay que ver cuánto tiempo aguantan. Veremos como termina la pelea, pero Europa Central y el mar Negro van a volver a ser los dominantes y a marcar la cancha. EE.UU. sigue vendiendo a buen ritmo su trigo nuevo a pesar de los ruidos con su cosecha.
MAÍZ.
La cosecha lenta del maíz en Brasil y la falta de problemas climáticos con el maíz en EE.UU. dejan al mercado vulnerable a nuevas correcciones a la baja. No ayuda que Irán, un mercado de 8 millones de toneladas de maíz tiene algunos problemas explosivos. El maíz tiene más para bajar que para subir. No lo salva nadie de ese destino, salvo que se complique mucho el clima en Europa pero nada crítico hay en el pronóstico.
SOJA.
La soja esta inusualmente alta gracias al aceite. Pero, el clima mejora en EE.UU. y hay un mundo de soja que va hacia China. El mercado sigue soportado por el tema EPA / Bio en EE.UU. pero hay algunas voces que llaman a la calma porque no está todo definido del punto de vista legal y la ley de presupuesto en EE.UU. entra en la etapa de ajustes parlamentarios, veremos donde termina. La soja tiene para bajar un buen tramo pero aun arriba de 1030 mantiene la tendencia alcista.…
En Uruguay precios en el entorno de 370, unos 5 dólares más que la semana pasada.
ACEITE DE SOJA.
El aceite se va quedando sin piernas y está estable a pesar de las noticias del bombardeo de EE.UU. a Iran. 56 es muy caro y veremos cómo se las arregla para mantenerse sostenido si le sacamos los soportes debería ir a algo en el entorno de los 50 a 52. Tiene a favor que si bien la cosecha de girasol en Europa parece muy buena, surgen algunos problemas con el clima que le pueden dar cierto soporte. Le tengo desconfianza a lo fuerte de la suba, y al gap de la gráfica.
Cuando baje hay que aprovecharlo.
HARINA DE SOJA.
Con estos precios de aceite hay que ir acostumbrándose a que las cosas no van a ser fácil si uno tiene una planta de crushing de soja en el barrio. Hasta que el aceite no corrija a la baja no hay chances de que la harina logre repuntar. No tiene nada a favor, más bien todo en contra.
Informe de mercado: Contra la ira, dilación (Séneca).
Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Finalmente, la amenaza de una guerra abierta entre Irán e Israel es realidad. Aprovechando la debilidad iraní, Israel decidió intentar cortar de raíz la amenaza que implica un Irán con armas nucleares. Es una apuesta de riesgo que tiene muchas implicancias tanto en el corto como en el pago plazo.
Irán nos interesa porque es el tercer productor mundial de urea (insumo que nos interesa) y tiene la posibilidad de cerrar el estrecho de Hormuz, arteria clave para el petróleo global. Esta gobernado por un conjunto de fanáticos desde la revolución que subyuga a su pueblo en base a una represión feroz y es un exportador neto y confeso de grupos terroristas que tienen como primer objetivo exterminar al estado de Israel. Difícil llevarse bien con vecinos como esos.
Los precios del crudo reaccionaron al alza y con ello empujaron al resto de las materias primas, en un mundo que vuelve al modo pánico al menos hasta que esto se aclare. Y no se va a resolver en un fin de semana. Las consecuencias de largo plazo (dependiendo de si Israel logra también un cambio político en Irán) pueden llevarnos a un conflicto de mayores proporciones y asegurarle a los iraníes que el único camino para asegurar su supervivencia es tener un arma nuclear (que es el gran problema que los trajo hasta aquí).
La reacción de los mercados agrícolas fue alcista y tiene otro motivo para subir: el mandato de la EPA para definir la política de biocombustibles fue mejor a lo esperado y eso empujó los precios de las materias primas (especialmente el aceite) al alza. Finalmente, el presidente Donald Trump entendió que no era cosa buena pelearse con sus agricultores y les mandó un regalo que el mercado sin dudas va a saber aprovechar. Esta medida, junto con la eliminación de las ayudas a los vehículos eléctricos le da una mano al sector de los bio combustibles. Eso sí, hay una advertencia: no se arregla por si solo el desbarajuste regulatorio en EE.UU., la lucha sigue. Pero algo es claro de ahora en mas:
CME (nuestra referencia de coberturas) será más una representación del mercado interno norteamericano en soja que una referencia internacional (al menos en aceite). Y cambia el perfil de colocación de productos, con un EE.UU. mucho más agresivo en la venta de harina de soja. En lo inmediato esto nos asegura una recuperación de la demanda de EE.UU. de aceite de soja.
Por lo demás en el mundo no pasa mucha cosa que afecte ni para bien ni para mal a los cultivos.
En EE.UU. el maíz y la soja avanzan a buen ritmo sin riesgos con el clima. En Europa pasa más o menos lo mismo y el último informe del USDA fue bastante intrascendente (mantiene los errores de versiones anteriores). Por lo demás, los stocks no cambian mucho y no hay grandes novedades que valgan la pena comentar.
Podría decirse que de no mediar una escalada sin control de la guerra entre Irán e Israel, lo peor de los precios de las materias primas quedó atrás, especialmente para la soja. Sabiendo que CME pasa a ser una referencia de mercado interno y sin muchos problemas productivos a la vista nos queda poder separar cuanto de lo que vemos de precios se debe a la guerra y cuanto a los fundamentos.
Esto es especialmente importante para el caso del complejo soja por su ínter relación con el petróleo crudo. Como pintan las cosas, el mundo árabe se va a confirmar con quejas retóricas mientras Israel hace el trabajo sucio (contando con la distracción de EE.UU., la pasividad de China y la inacción de Rusia). El tiempo dirá si la apuesta de ir a la guerra fue la que nos deja en un mundo más seguro o por el contrario nos enfrentamos a un panorama complicado. El mundo sigue girando, la estacionalidad pesa en los mercados y el factor susto también.
TRIGO.
La conducta del trigo el viernes fue en línea con las alzas de todos los granos y sin una excusa que lo pueda definir como de riesgos en la oferta. Para mi la subida es porque los fondos se asustaron y al estar muy vendidos era hora de hacer caja y salir. Si dura o no, veremos el lunes pero por lo pronto la idea de comprarlo no fue mala. Sin riesgos en la oferta que esta cada día más cerca es poco lo que puede hacer solo, aunque hay señales nada despreciables de un interés en el trigo norteamericano más altas que en años anteriores y eso nos da cierto optimismo en cuanto a la recuperación de los precios.
MAÍZ.
Con Brasil ya cosechando un 7% del área de maíz y muy buenos rindes, el mercado tuvo una modesta recuperación el viernes. No pasa mucho en el mercado, el maíz de EE.UU. necesita una dosis de calor pero viene bien de humedad, cosa que siempre es favorable. Sin sobresaltos en lo regulatorio, es difícil que sin riesgos en la oferta tenga mucho mas para recuperar. Yo capaz que lo vendo sobre diciembre.
SOJA.
De la mano de lo ocurrido en el aceite la soja subió fuerte en la semana pero sigue dentro del mismo rango entre 1060 y 1015. El informe del USDA es la nada misma así que no hay mucho que comentar. Veremos el lunes, como siempre digo: subas de la nada muy importantes no suelen durar. Veremos qué pasa pero seguramente es una buena oportunidad para vender soja. Si los cambios de la EPA en EE.UU. son buenos o malos, tendremos que esperar un poco para ver como se decantan los mercados.
En Uruguay precios en el entorno de 365, unos US$ 5 más que la semana pasada.
ACEITE DE SOJA.
Llego Papa Noel !!!. La EPA asegura la demanda de aceite de soja interno para bio combustibles en proporciones mejores a las esperadas, lo cual le da una mano al aceite doméstico. Es de equilibrio ese precio? La respuesta es no, pero hay que esperar a ver qué hace el mercado con los aceites. De momento saboreamos la victoria de haberlo comprado.
HARINA DE SOJA.
Sube el aceite, baja la harina. Qué harán los gringos con los millones de toneladas de harina, nadie lo sabe, pero seguro que se colocarán. Volvimos al piso de los 300 sin pena ni gloria.
Informe de mercado del Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez.
Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Ser hincha de la selección uruguaya de fútbol está en el ADN de todos los uruguayos. Y, como bien dijo Francisco Casal, es lo que nos identifica como país y es lo que nos hizo famosos en el mundo. Un buen resumen de la historia es este: vivimos de las glorias del pasado (la gesta de 1950), luego decaímos a un bajo nivel y tuvimos un atisbo de esperanza con la generación dorada de Suarez, Cavani y Forlán. Ante la falta de resultados más allá de Sudáfrica, optamos por un cambio radical. Traer a un gran gurú del fútbol a ver si con la magnífica materia prima futbolística lograba mejores resultados. Y terminó siendo como exponer a Superman a una dosis baja de kriptonita: lentamente pierde sus poderes y se transforma en un super héroe sin gracia.
Uruguay es eso, crece a un modesto 2 a 3% anual con suerte, se conforma con poco y no tiene aspiraciones. Vivimos muy cómodos ignorando la realidad de que tarde o temprano quien nos financia nos impondrá las condiciones, pero no nos importa porque estamos muy felices hipotecando el futuro. La lenta degradación de nuestros valores, con una clase política que no da la talla (lo importante es discutir pelotudeces) solo agrava los problemas. No solo no tenemos liderazgos que valgan la pena, sino que nadie parece muy preocupado en llevarnos por un camino diferente. Y el resultado será una agonía lenta, y con un dolor crónico que molesta pero no mata.
La degradación no solo es local. Basta con escuchar a un Donald Trump y tenemos muestra suficiente del grado de imbecilidad y de falta de consecuencias que tiene no solo mentir sino decir tonterías. Si no tuviera consecuencias vaya y pase, pero muere gente todos los días por falta decisiones de los poderosos del mundo.
La semana tuvo datos interesantes. El desempleo no es terrible en EE.UU. pero da cuenta de un empeoramiento de la situación, aún insuficiente para provocar una baja de intereses. Donald habló por teléfono con Xi para re encausar las conversaciones sobre comercio (a pedido del primero). Ah y no menos divertido es la pelea entre Donald y Elon (compren pop señores que se va a poner lindo). El resultado: las bolsas subieron, hay optimismo en que las charlas sobre comercio pueden dar resultado y el mercado se siente feliz, porque ve cierto optimismo.
Los granos tuvieron una buena semana: el trigo empezó a subir lentamente, el maíz tuvo un flash de esperanza y la soja dejó de bajar. No nos podemos quejar, pero una aclaración: los fondos están muy vendidos (si se toman cereales y oleaginosos en conjunto). Esto nos quiere decir algo: hay que aprovechar las vulnerabilidades que esto representa a nuestro favor. Los precios altos no necesariamente son un síntoma de que los fundamentos mejoran, pueden ser un reflejo de una urgencia por salir, y no suele durar mucho.
El clima parece ser benévolo con los cultivos en el mundo salvo algunos pocos problemas muy focalizados, nada de lo cual provoca movimientos de mercado. Vamos hacia una cosecha récord de maíz en Brasil (los brasileros dicen que es más que lo que el USDA estima). En cuanto a soja, veremos el USDA la semana que viene si ajusta algo EE.UU. y Argentina. El aceite de soja empezó a subir también. Mientras esperamos que el mercado se defina hacia donde quiere ir, Uruguay sigue sembrando invierno con la esperanza que los precios o los rindes nos den una esperanza.
TRIGO.
Por un lado, las lluvias persistentes en EE.UU., por otro la ola de calor en China. Rusia y Ucrania con un clima que no es el ideal, y sumemos los fondos con posición neta vendida (pero achicándose) son un buen mix para empujar los precios del trigo al alza casi 20 cents en la semana. Yo creo que sigue al alza a pesar de que estamos cerca del primer techo y apenas empezando la cosecha. Mi apuesta es a que puede llegar a 605. Creo que el piso que vimos es firme y no volveremos fácilmente a el. Yo compraría trigo diciembre con algún mejorador y me tomo tiempo para vender.
MAÍZ.
Los futuros de maíz toman nota del inicio no tan ideal de los cultivos en EEUU que necesitan sol y calor para ponerse lindos. Veremos si el informe del USDA aporta algo sobre el área final de maíz. Mientras tanto la cosecha en Brasil arranca y eso tiene nerviosos a los operadores que si bien tienen una demanda firme no tiene muchas cosas claras del lado de la administración Trump. La subida del maíz no es nada menor, pero da una oportunidad para pararse vendedor de cara a diciembre. Los fondos siguen apilando posiciones vendedoras en maíz, señal que no ven problemas en el corto plazo. Yo lo vendo pensando en que la cosecha llegará y ahí estaremos más cómodos con un maíz más cerca de 430 que de 500.
SOJA.
La soja se las arregló para recuperar un poco de precio por encima de los 1020. La suba tiene que ver con el optimismo sobre las negociaciones comerciales entre China y EE.UU. pero no hay nada más que eso. Al igual que el maíz, no le viene mal un poco de calor y sol para acomodarse. La cosecha argentina en el eje del 80% sin ninguna sorpresa. No la tiene fácil para seguir subiendo, yo que usted si tiene soja física no dejo pasar la oportunidad.
En Uruguay precios en el entorno de 360.
ACEITE DE SOJA.
El aceite empezó a retomar sus fundamentos y tuvo un piso interesante en 47 que aprovechamos para comprar de cara a un segundo semestre con fundamentos de la demanda mejores. India baja los aranceles para el aceite importado y eso le va a dar una mano a la demanda.
HARINA DE SOJA.
Sin muchas novedades, la harina aguanta cómoda la competencia arriba del 300 (308 para diciembre). La tiene difícil para subir, pero no tendremos sorpresas en lo inmediato. Yo la compro si vuelve a 303.
A nivel de los mercados agropecuarios la semana fue mala, especialmente para la soja, el aceite y el maíz. Todo cerró la semana un escalón más abajo. Y para colmo, Trump salió a despotricar contra China el viernes, justo cuando pensábamos que un acuerdo comercial estaba más cerca que antes.
Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez (Ph.D) | Montevideo | Todo El Campo | Mientras las bolsas internacionales parecen no darse por enteradas de las posibles consecuencias de la guerra comercial, los que vivimos de las materias primas agropecuarias no tuvimos una buena semana. Pongámosle un poco de humor, un periodista tuvo la genial idea de referirse a la estrategia de Trump como TACO (Trump Always Chinckens Out, en yorugua Trump siempre arruga).
Por supuesto que cuando el mandamás se enteró, no le causó ninguna gracia y las redes explotaron de nemes, cada cual mas genial. Consultado, Trump dice que no es que arrugue, sino que es una estrategia de negociación. Estamos por ver si da los resultados que promete, sobre todo porque nada de lo que dijo está pasando, la guerra en Ucrania no llega a su fin, ni la de Gaza, ni el acuerdo con los iraníes, ni tampoco la furia de tratados de comercio que prometió. ¿Por qué las bolsas reaccionan con subas récord? Porque intuyen que al final del día Trump no va a poder sostener su agenda y no le va a quedar otra que echar atrás. Y como todo autócrata, salvará la cara echándole la culpa a todos menos a sí mismo. Mientras tanto el foco se mantiene en la agenda interna, que es lo que controla y los de afuera que se arreglen.
El mercado financiero está perdiendo la paciencia con Trump en todos los sentidos. El mas preocupante es la subida del costo de financiamiento. En el caso de EE.UU. y Japón son heridas autoinfligidas. En EE.UU., la aprobación de una ley de presupuesto que no solo no achica sino que aumenta el déficit a niveles insostenibles es lo que más preocupa y EE.UU. va camino a dejar de ser un refugio de valor. El mundo cambia a pasos agigantados de la mano de la capacidad de autodestrucción de Trump y su MAGA. (MAGA por Make America Great Again expresado por Trump, que traducido significa: “Haz a los Estados Unidos grande otra vez” o “Que Estados Unidos vuelva a ser grande”).
MERCADOS.
A nivel de los mercados agropecuarios la semana fue mala, especialmente para la soja, el aceite y el maíz.
El trigo no termina de despegar a pesar que empieza a tener una historia interesante por detrás, con ranking de cultivos en mal estado, una demanda muy firme por el trigo nuevo en EE.UU., algunas luces amarillas del lado productivo en el hemisferio norte y posición neta vendida fuerte de los fondos.
El maíz por otro lado no logra sostenerse en EE.UU., Brasil empieza una mega cosecha de segunda y, al igual que en el caso del aceite de soja, la falta de claridad en las políticas de biocombustibles de EE.UU. terminan lastrando al mercado.
Cuento corto, todo cerró la semana un escalón más abajo. Y para colmo, Trump salió a despotricar contra China el viernes, justo cuando pensábamos que un acuerdo comercial estaba más cerca que antes.
No vamos a tener muchos cambios en la situación presente hasta el USDA de junio, por lo que en ausencia de problemas con el clima en el hemisferio norte es poco lo que podemos esperar al alza.
En Uruguay la soja está en 353, perdiendo un poco de pie respecto a la semana anterior y muchos productores con soja en su poder esperando que llegue a valores dignos de Disneylandia. Yo entiendo el optimismo, pero jugarse por que si me parece cuando menos poco responsable.
Salvo que los fondos se asusten en el caso del trigo, mi predicción para la semana es más debilidad en soja y en maíz y algo de fortaleza en trigo. Me está empezando a preocupar la soja, yo pensé que los precios habían ya tocado fondo pero tal vez tenga que recalibrar mis comentarios. Estoy empezando a mirar con cariño comprar aceite y harina como forma de compensar los precios bajos de la soja.
TRIGO.
Es notable el interés por trigo nuevo norteamericano que tiene exportaciones mejores a las previstas. Por lo demás el exceso de lluvias es noticia en EE.UU., y seguimos sin saber mucho sobre los impactos de las heladas en Rusia. El mercado FOB sigue muy tranquilo y con poca demanda a las puertas de la cosecha del hemisferio norte que no va a ser mala. Dicho esto, la posición muy vendida de los fondos nos deja en una posición de vulnerabilidad porque si se asustan podemos tener una chance de lograr mejores resultados. Con la cosecha en puerta salvo que el clima la impida los mercados no tienen mucho de donde agarrarse.
MAÍZ.
Brasil empezó su cosecha y la falta de claridad en la política de biocombustibles en EE.UU. pesa tanto que opaca la demanda por maíz de EE.UU. que empieza a ver cómo se le van los negocios a Sudamérica. Mientras los futuros patinan y los fondos se apuran a vender, de lo que no deberíamos esperar muchas buenas noticias para los precios. Yo pensé que con menos área en EE.UU. y con un estado de los cultivos algo peor de lo que el mercado quiere ver los precios iban a subir un poco pero mejor voy aceptando la derrota. Tiene toda la pinta de seguir para abajo.
SOJA.
Los futuros de soja tuvieron una mala semana con una caída importante de la mano de un ajuste fuerte a la baja del aceite (que era el que daba sostén). No hay mucho que comentar sobre la soja, la demanda no es excepcional por lo que en un mercado bien abastecido hay poco de donde agarrarse para una suba, menos con la guerra comercial nuevamente en camino. No quiero ser pesimista, pero tiene mal color.
En Uruguay precios en el entorno de 355.
ACEITE DE SOJA.
Si compramos que los fundamentos del aceite vegetal son buenos hacia el futuro (diciembre) 47 no es un mal nivel de ingreso pensando en la posición diciembre. Con la canola con algunos problemas productivos y menos área de girasol, la variable que nos queda por saber cuánta soja hay en EE.UU. y su estado. Yo lo compro y apuesto a que la definición de la política de biocombustibles en EE.UU. no va a ser peor de lo que ya es.
HARINA DE SOJA.
No pasa nada con la harina, creo que para el próximo reporte dejo de informar… no baja de 300 por lo que es una oportunidad para comprarla.
INFORME COMPLETO DEL ING. AGR. GONZALO GUTIÉRREZ.
Informe completo con cuadro y gráficos, además de cuadro de precios, posición de los fondos y clima.
Luego de una semana de calma relativa donde los mercados parecen haber logrado cierto equilibrio, Donald Trump vuelve a hacer de las suyas y los mercados vuelven a mandar mensajes crípticos.
Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Empecemos por Donald: luego de un inicio de negociación con los chinos, desata su furia sobre Europa diciendo que impondrá nuevamente aranceles si para el 1/6 no hay avances. La avalancha de acuerdos comerciales que vaticino está lejos de ocurrir a la fecha y mientras tanto, de la mano de su mayoría en el parlamento hizo aprobar un paquete de ajuste fiscal que tiene incluso preocupados a sus propios legisladores. Y es que el déficit fiscal de EEUU va rumbo a transformarse en algo inmanejable (a pesar de las promesas de Trump).
El mercado mientras tanto tiene una métrica muy simple para explicarle a Donald sus falencias en economía: la tasa de interés de los bonos a 10 años. ¿Qué está ocurriendo? El mercado no cree que la trayectoria sea manejable por lo que los que tienen bonos los venden y no quieren recomprarlos o para hacerlo piden más tasa. Ya estamos en el 5% lo cual es muy caro para financiar la deuda (no solo de EE.UU. sino de casi todo el mundo). En paralelo, el dólar se deprecia frente a otras monedas, lo cual también es un problema. El mercado le avisa a Trump que no le cree en cuanto a sus medidas y el margen de acción es cada vez más chico, porque la FED no puede hacer magia.
Si suben los bonos, más tarde o más temprano las acciones van a ajustar. Mientras tanto el curdo y las materias primas agrícolas no la pasan tan mal.
En lo político parece que solo Trump cree que Rusia y Ucrania negociarán algo parecido a un acuerdo, el resto del mundo se resigna a hacerse cargo del aislacionismo norteamericano. La guerra en Gaza sigue con despiadado rigor e Irán y EE.UU. parece que negocian lo que los propios iraníes dicen que son condiciones inaceptables. Es el arte de la nueva negociación, pero nada nuevo parece salir del caos.
Lo único razonable de la legislación aprobada en EE.UU. es que parece que trae algo de claridad sobre los créditos fiscales para los biocombustibles. Veremos si pasa el Senado, pero al menos eso nos puede dar cierto horizonte de previsibilidad hacia el futuro. Fuera de eso, los mercados parecen más preocupados por los fundamentos. Como nota interesante, la venta de trigo de EE.UU. para la campaña nueva arrancó muy bien, mejor de lo previsto lo cual da la pauta que mas abajo de esto no vamos a ir. La pregunta es cuanto más arriba vamos a ir.
Las siembras de maíz y soja en EE.UU. avanzan sin mucho ruido, aunque hay algunas dudas sobre si se llega al tan mentado aumento del área de maíz (le falta sol y temperatura) y eso puede terminar en más soja. Brasil viene muy bien con su maíz y va rumbo a una cosecha muy grande en el maíz de segunda que seguramente le ponga un límite a las subas de precio. En cuanto a la soja, el mercado sigue hablando de lo mismo y los precios no han cambiado mucho en este último tiempo.
El lunes es feriado en EE.UU. y el mercado empieza a mostrar algunos signos interesantes. El trigo CME parece haber tocado piso y los fondos se va a ver forzados a salir más temprano que tarde. El maíz por su lado esta inusualmente fuerte y busca alguna excusa para seguir subiendo a pesar que los fondos están vendidos (sin riesgo de clima en EE.UU. el mayor problema es Brasil) y la soja sigue con sus mismos problemas de siempre (el mercado parece haberse olvidado de 700.000 hectáreas de soja en argentina bajo agua). Dicho esto, si el mal humor de los mercados financieros se pone pesado esto le puede poner un techo a las subas, pero parece que los fundamentos intentan volver a reinar.
TRIGO.
Mirando diciembre se mantiene una tendencia alcista interesante que se explica por las heladas en Rusia, algunos problemas productivos en EE.UU. y un panorama incierto con el clima en Europa. El trigo norteamericano es el más barato del mundo en estos momentos y la demanda por trigo nuevo le da alas para subir. Veremos si se confirman los pronósticos de clima que son amenazantes pero no decisivos para el trigo. Aún con la corrección de los últimos 2 días, el trigo sigue al alza a un primer objetivo de 594 y un segundo objetivo de 606. Me mantengo en la idea de comprarlo. Hay que seguir de cerca a China que tiene una ola de calor justo cuando el trigo determina sus rindes y esto puede cambiar la imagen de la demanda.
MAÍZ.
La demanda sigue firme, pero lo que más movió al mercado fue el rumor de que parece que EE.UU. va a tener menos maíz sembrado del que pensaba. El clima muy húmedo y frío de las siembras los puso a pensar y tal vez mas acres de los originales terminan en soja. Esa fue la firmeza de un maíz que empieza a tener a los fondos vendidos de nuevo (se viene una cosecha enorme de maíz en Brasil y el mercado no ve riesgos hasta fin de año). Dicho esto, lo lógico es que corrija a la baja si el clima no asusta.
SOJA.
Contra todo lo que hacía suponer una baja la soja sigue resistiendo. El soporte sigue estando en el aceite mientras que la harina sigue dando la pelea. Me cuesta ver un mercado sostenido sin la ayuda de algo que asuste al mercado y menos me parece con más área de soja en EE.UU. La demanda sigue razonable. Mi idea es que baja a 1.040 más temprano que tarde pero no me desagrada del todo que se mantenga en 1.080 a 1.040 por un tiempo.
En Uruguay precios en el entorno de 360 con una cosecha prácticamente terminada.
ACEITE DE SOJA.
Tendré que ajustar mis expectativas porque 47 queda lejos, pero 48 o 49 no están tan mal. Sin confirmación del lado de EE.UU. en cuanto a su política de biocombustibles, es poco lo que el aceite solo puede hacer. Siguen las dudas sobre cuánto es el daño a la colza en Europa, pero semana a semana nos arrimamos a la cosecha. Yo, pensando en comprarlo entre 47 y 48.
HARINA DE SOJA.
La harina no tuvo una mala semana, el piso está en 290 y el techo en 298. Operar en consecuencia con un mercado que tiene espacio para subir un poco. La oferta de Argentina y Brasil es fuerte, pero encuentra demanda. No es mi favorita pero capaz que me animo a comprarla pensando en el segundo semestre.
La semana fue relativamente buena para los mercados internacionales y casi todo menos el trigo y el maíz subieron. Veremos cómo arranca el lunes
Ing. Agr. Gonzalo Gutiérrez | Montevideo | Todo El Campo | Con cierta cautela el mundo espera a ver cómo se desarrollan las negociaciones entre China y EE.UU. en Suiza. El mundo busca una señal de que los dos grandes se ponen de acuerdo en conversar. Trump dice que está dispuesto a bajar los aranceles al 80% lo cual es un inicio, pero no cambia el fondo de las cosas. Pero al menos hay negociaciones en curso que pone a los actores en una misma mesa y parece ser que se ha logrado un consenso para avanzar.
Mientras tanto, India y Pakistán intercambian agresiones, pero llegan a una pausa en las hostilidades bajo la mediación de EE.UU. Además, Rusia y Ucrania parece que se encaminan a un diálogo bajo los auspicios de Turquía y EE.UU. Yo quiero creer en la esperanza y en que los conflictos encontrarán una solución pero la realidad me tiene que demostrar que es posible.
La semana fue relativamente buena para los mercados internacionales y casi todo menos el trigo y el maíz subieron. Veremos cómo arranca el lunes, si es que se contagia el optimismo de las negociaciones y la pausa en la guerra. Lo cierto es que los granos parecen disfrutar de un cierto panorama positivo en lo productivo (cuando no algún exceso de lluvias y problemas de sequía localizados) que tienen a los principales actores expectantes sobre lo que pueda ocurrir. No es solo la situación de la oferta sino también la demanda, que tiene problemas financieros y cierta dificultad en fraccionar a pesar de los bajos precios de las materias primas.
Esta semana que comienza es especial porque tendremos el primer informe del USDA referido a la estimación de producción del año 25/26. Hay que tomarlo como lo que es, una primera foto con muchos supuestos de producción y consumo que no siempre se confirman pero representa un punto de partida. No es que el USDA sea santo de mi devoción, pero es de los pocos que hace estadísticas más o menos confiables y que mantiene una metodología.
En trigo puntualmente me preocupa la posibilidad de que se nos acumulen stocks allí donde nos duelen, en nuestro caso Argentina. Para maíz y soja, queda todo el desarrollo del cultivo en el hemisferio norte y la cosecha del maíz de segunda en Brasil como elementos centrales.
En Uruguay, luego de las lluvias la cosecha se va reanudando firme y se espera que en esta semana tenga un avance que la lleve al 80% (antes de las próximas lluvias previstas para el 17 de mayo. El productor tiene un buen resultado en promedio con los rindes, pero no siempre se siente tentado a vender por la volatilidad de precios. Todo puede pasar en una guerra comercial, pero los fundamentos por ahí nos dan alguna alegría si la cosa se complica un poco en EE.UU. con los cultivos. Mercado climático siempre hay, el tema es que se entusiasme para lograr hacer olvidar a los chinos que acá nadamos en un mar de soja.
Viene el momento de empezar a pensar en que haremos en invierno. La decisión no es fácil a juzgar por los precios, aunque la colza nuevamente tiene mejores chances de expresar un escenario positivo de precios, no solo por sí misma sino también por lo que nos depare el mercado de los aceites. A mí personalmente me cuesta creer que el trigo siga tan bajo el resto del año, porque si es así, su relación con el maíz no está donde debe y uno tendrá que ajustar.
Mi pronóstico es que llegaremos a un área levemente superior de invierno a la que tuvimos el año pasado, liderado por la colza y sus parientes mientras que el trigo y la cebada se mantienen en su mismo nivel.
Todos atentos a lo que nos depare el lunes con el USDA y el optimismo del mercado por los acuerdos comerciales.
TRIGO.
El trigo tuvo una mala semana, volviendo (una vez más) a los pisos del contrato. Los fondos volvieron a aumentar su posición vendedora. La baja se atribuye a la poca demanda, a la mejora en el clima especialmente para Ucrania y Rusia y una nota de duda a los pronósticos de lluvia para China. Europa con problemas en el norte, bien a muy bien en el este y vuelve la lluvia a Francia.
Veremos que dice el USDA. A mi gusto no hay mucho más espacio para hacer bajar al trigo (pero me vengo equivocando desde hace rato). Yo lo compraría, pero solo porque está barato.
MAÍZ.
La mejor hipótesis es que el maíz arme su soporte en 450. El mercado ya da por descontado que el maíz se siembra y que Brasil va rumbo a una buena cosecha y de momento no hay mayores problemas con el clima. La demanda sigue muy firme y los fondos no terminan de decidir hacia donde van pero viene desarmando sus posiciones de forma sostenida y están a un paso de estar netos vendidos. Motivos no les faltan si el clima es el que se pronostica.
SOJA.
Aguantando contra todo pronóstico, la soja se la banca con una ayuda del aceite que le costó un poco sostenerse. Para mí el 1051 es un exceso en este contexto. La demanda de China viene un poco lenta y no es fácil colocar los derivados, especialmente la harina que más tarde o más temprano le va a pesar a la soja. Yo apuesto a que cuando volvamos a los fundamentos mi opinión es que no puede sostenerse en estos valores. Yo la vendo.
En Uruguay precios en el entorno de 350.
ACEITE DE SOJA.
Sin continuidad en las noticias que llevaron al aceite arriba de 50, el mercado corrigió a la baja y parece sostenerse en 48. No los voy a aburrir con que no tenemos continuación en el asunto de tarifas con India ni confirmación de las policías de bio combustibles de Trump. Ergo volvemos a lo que el mercado juzgue como fundamentos. Sigue al alza, capaz que cerca de 47 lo compro.
HARINA DE SOJA.
Chatura total, en un mercado que se habla desde hace rato de la masiva presencia argentina que empieza a pesar. Abajo de 300 es nivel de compra.