Sep 4, 2023 | Agricultura, Noticias
El equipo técnico de Dufour Commodities aporta claves para entender qué ha pasado y qué puede pasar con los insumos, para esta zafra de invierno, como par la de verano que se viene.
Dufour Commodities* | Soriano | Todo El Campo | Hoy vamos a ocuparnos de los insumos. Lo que ha sido la zafra de invierno que estamos transcurriendo y qué esperar para la venidera zafra de verano.
Recordemos que el invierno pasado estuvo marcado por el aumento de precios de los fertilizantes a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania. Por suerte, para esta zafra los precios bajaron mucho, pudiendo conseguir una tonelada de urea azufrada por debajo de los US$ 400 para aquellos que compraron temprano, en contraposición con los US$ 1.100 del invierno anterior. Desde hace un mes (o más), la oferta de urea y otros fertilizantes nitrogenados se ha visto frenada por la ausencia de producto. Los proveedores adjudican esto al retraso en la llegada de un barco. Esto hizo que el stock que había disponible subiera rápidamente de precio llegando a negociarse por encima de los US$ 500 la tonelada.
En cuanto a los principales insumos agroquímicos podemos decir que el glifosato, paraquat y clethodim fueron los insumos que más bajaron de precio versus el invierno pasado. El glifosato y paraquat se negociaron casi a mitad de precio, mientras que en el clethodim la baja fue de un 35% aproximadamente.
En este momento, la demanda está puesta fuertemente en los fungicidas. Los más buscados ya empezaron a escasear o directamente se agotaron las existencias, lo que obliga a buscar alternativas a algunos tratamientos que se pensaban hacer. El hecho de que algunos cultivos se estén preparando para una cuarta aplicación de fungicida ha causado que la oferta se vea superada por la demanda.
También cabe destacar que el objetivo de las empresas que importan productos (al igual que los distribuidores locales) es terminar la zafra con los galpones vacíos.
Resumen de invierno: el costo del paquete de insumos para invierno fue plenamente más alentador y amigable de lo que fueron los presupuestos del invierno pasado. Aunque también hay que decir que el precio de los granos invernales también ha bajado. Habrá que esperar alguna ayuda externa que haga subir el precio para capitalizar mejor lo que se termine cosechando.
EL VERANO QUE SE VIENE.
Respecto a lo que se nos viene para verano podemos decir que también se va a contar con insumos más baratos que los de la zafra anterior.
El glifosato en promedio se va a poder conseguir a US$ 3 menos, clethodim y paraquat prácticamente a mitad de precio, sulfentrazone aproximadamente un tercio por debajo, metribuzin un 20% menos, flumioxazin presenta una baja moderada.
Respecto a los fertilizantes, si bien no estamos en una época donde se cierren muchos negocios para verano, es esperable que se puedan conseguir precios más bajos que los del anterior verano.
Lo que va a contrarrestar la baja en los precios de los agroquímicos y los fertilizantes es la semilla y los seguros de rendimiento.
La semilla de maíz ronda entre los US$ 250 y los US$ 270 por bolsa. En este rubro no se generó por parte de los importadores pánico o especulación con el “comprá temprano que hay poco y se acaba”.
En el caso de la soja, la semilla, el precio va desde los US$ 1.600 a los US$ 2.100 por tonelada. En este caso sí se sabía desde hace varios meses que la seca iba a pegar fuerte en la cantidad de semilla que se iba a comercializar para el verano futuro. Al revés que, en la semilla de maíz, con la soja sí es conveniente reservar temprano para evitar el sembrar lo que hay por sobre lo que a uno le gusta. Otro aspecto a destacar en la soja es que se sabe que los productores guardaron más semilla que otros años, a sabiendas de lo que iba a pasar a futuro con los efectos de la seca.
Para finalizar, de los seguros de rendimiento solo decir que aunque hoy no tengamos un precio oficial, es obvio que el valor va a aumentar. Lo que no hay que olvidar es que los que pudieron acceder a esta herramienta, aunque tal vez no hayan cerrado el verano con ganancias, terminaron la zafra con la tranquilidad de saber que una parte importante de su endeudamiento se los iba a cubrir el seguro de rendimiento. Que para el verano para el olvido que pasamos, no fue poca cosa.
(*) Artículo del equipo técnico de Dufour Commodities.
Sep 12, 2022 | Agricultura, Noticias
El escenario de insumos se presenta sin mayores sorpresas en lo que respecta a agroquímicos y semillas, siendo los fertilizantes los que presentan la mayor incógnita en cuanto a sus precios futuros.
Gabriel Pólvora | Dufour Commodities | Las siembras de primera de verano se aproximan y siempre es importante tener un pantallazo de cómo se están comportando los insumos.
Parecería que quedó atrás la locura generada por la pandemia y el aumento de los precios, ya sea por las restricciones propias de la pandemia (en origen), por el aumento del costo de los fletes o por la especulación externa e interna. Ni hablar del descontrol que generó la invasión rusa a Ucrania en el precio de los fertilizantes, principalmente a la urea.
Actualmente nos encontramos en un escenario de relativa calma, donde se anuncian algunas subas y bajas en distintos productos pero que de momento no parecerían ser alarmantes.
Se espera un ajuste al alza de productos como flumioxazim, clethodim y simazina. Productos en los cuales el grueso de los importadores ya está cotizando con el nuevo precio.
En el caso del glifosato lo esperable es que se estabilice o tenga alguna baja leve, lo que alerta un poco a todos los actores (importadores, distribuidores, productores) ya que nadie quiere quedar “mal comprado”. En momentos como estos es dónde las estrategias de compra y buenas negociaciones son importantes para optimizar las ganancias y minimizar riesgos.
Hay un par de productos sobre los que se dice que va a haber poca disponibilidad como es el caso del s-metolaclor y el clopyralyd. Como siempre digo, habrá que esperar al momento de uso para ver si realmente esto se cumple o no. En el caso del s-metolaclor es un rumor que viene sonando bastante fuerte.
FERTILIZANTES.
Por el lado de los fertilizantes, el mercado se ha visto perturbado por la falta de urea con entrega inmediata. La urea azufrada que se conseguía en el entorno de los US$ 700 por tonelada (contado) pasó a US$ 800 por tonelada y más. Los pocos proveedores que tienen este insumo están haciendo valer su stock y algún importador hasta volvió a tomar la medida de solo vender contado. El motivo del faltante es por un retraso en el barco que trae tanto urea como el sulfato para mezclar con la urea y formar la urea azufrada. Se supone que la mercadería estaría llegando para inicios o mediados de octubre.
Al productor no le resulta simpático que la urea haya subido por falta de oferta, pero por lo menos en este caso el precio se ajusta por las leyes del mercado. A falta de oferta sube el precio del bien y se benefician los que aún conservan stock para abastecer la demanda. Situación que difiere a lo que pasó cuando comenzó la invasión de Rusia a Ucrania donde la suba del precio de la urea dejó la sensación que respondía más a cuestiones especulativas del mercado interno que a cuestiones netamente vinculadas al precio internacional. Por lo menos los motivos que se transmitieron para argumentar la suba abrupta que sufrió el fertilizante y el cese de las ventas financiadas, dejaron ese “run run” en el ambiente.
SEMILLAS.
Abordando el costo de las semillas, tenemos por un lado que la bolsa de maíz en promedio se sitúa entre los US$ 210 y US$ 220 por bolsa. Hay más baratas y bastante más caras. Este mercado tiene varios actores lo que acerca al productor mucha oferta y variedad de materiales para poder elegir.
La semilla de soja se encuentra en el eje de los US$ 1.100 a US$ 1.400 por tonelada a cosecha. Al igual que en el maíz, hay ofertas más baratas y más caras. Y si bien la oferta no es tanta como en el maíz, hay varias marcas para elegir con distintas prestaciones y tecnologías.
Para finalizar, en lo que tiene que ver con semilla de sorgo el precio se sitúa entre los US$ 6 y US$ 7 por kilo. De este grano hay menos oferta aún, lo que es coherente con el área que se siembra.
En una zafra de verano que va a estar marcada por la tendencia que se repite año a año de ir cada vez más a cultivos de segunda, el escenario en materia de insumos se presenta sin mayores sorpresas en lo que respecta a agroquímicos y semillas, siendo los fertilizantes los que presentan la mayor incógnita en cuanto a sus precios futuros.
Esperemos que el clima y el precio de los granos ayuden y podamos transitar una zafra de verano disfrutable y sin sobe saltos.
EL AUTOR. Gabriel Pólvora, administrativo de Insumos en Dufour Commodities.
May 31, 2022 | Agricultura, Noticias
Gabriel Pólvora de Dufour Commodities realiza una actualización de la situación de los insumos, centrándose más en las novedades que en el dato concreto del precio de cada producto: Estamos en “una zafra de invierno que parecía traer estabilidad de precios y disposición de productos se vio alterada por un conflicto militar, el rebrote de Covid en China y el paro portuario”.
Gabriel Pólvora | Soriano | Dufour Commodities | Tal cual pasó con los fertilizantes cuando parecía que los precios empezaban a contraerse y el panorama se dio vuelta a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania, ahora “la pelota embarrada” saltó a la cancha de los agroquímicos. Los brotes de Covid en China llevaron (nuevamente) al cierre de uno de los puertos de mayor peso de aquel país. Lo que trajo demoras muy importantes en los envíos de mercaderías y una suba de precio en los fletes.
La suba si bien fue más moderada a las subas que ocurrieron en pleno furor de la pandemia, no deja de impactar en los precios. A su vez los retrasos en los envíos ponen en riesgo la llegada de insumos en tiempo y forma. Situación que ya se dio el año pasado con varios productos de invierno.
A esto hay que sumarle el conflicto sindical en el puerto de Montevideo, lo que imposibilita a los barcos que ingresan a los distintos muelles hacer uso del servicio de descarga brindado por los operadores portuarios. Esto genera contratiempos que se traducen en costos para las empresas importadoras. Costos que lógicamente se vuelcan al precio de los insumos.
También está el caso de los barcos que sabiendo del conflicto en nuestro puerto, deciden no atracar y siguen su curso hacia otros destinos para cumplir con las entregas que tienen pactadas. A su regreso, si el conflicto ya terminó, descargan la mercadería que corresponda, pero si el conflicto persiste se corre el riesgo de que la mercadería sea bajada en otro puerto, lo cual trae el problema del costo de ir a buscar el producto a otro destino (otro país), y el problema del tiempo que lleva tenerlo a disposición en nuestra plaza.
En resumen, una zafra de invierno que parecía traer estabilidad de precios y disposición de productos se vio alterada por un conflicto militar, el rebrote de Covid en China y el paro portuario.
PRECIOS.
Abordando el tema precios, actualmente se ve una leve baja en el precio del glifosato y una baja mucho más importante en el precio de la urea. Con el “diario del lunes” la mejor opción con la urea era esperar. Pero aquellos que tomaron posición pagando arriba de US$ 1.100 la tonelada, a mi entender hicieron lo correcto. Decidieron con la información que había en ese momento y se aseguraron contar con el fertilizante. Poco suma ahora lamentarse. Es como cuando el precio de algún grano viene en alza y los productores no vender respondiendo “voy a esperar que suba un poco más” y luego el precio se cae y se lamentan por no haber vendido.
Es la misma lógica pero a la inversa. En el caso de la urea, el que compró lo hizo pensando que tal vez podía llegar a subir más y se podía llegar a quedar sin producto, ya que ese era el mensaje que circulaba por parte de algunos importadores. Después se podrá discutir si la información que se transmitía era precisamente información o si se sembró nerviosismo intencionalmente para acelerar las ventas y maximizar la ganancia antes de que el precio se cayera. Pero lo cierto es que la toma decisiones lleva ese riesgo implícito de que las variables que uno toma en cuenta a la hora de evaluar un escenario cambien y el análisis previo quede sin efecto.
Por otro lado, en los últimos días llamó la atención la suba en el precio de algunos fungicidas respecto a lo que fue su precio del año anterior. Por suerte en ese aspecto la oferta es amplia y hay opciones para evaluar como alternativa.
DISPONIBILIDAD.
Para finalizar, la mayor preocupación en agroquímicos actualmente viene dada por la poca disponibilidad que hay de algunos productos. Las partidas que van llegando no son en grandes volúmenes y al ser poco para repartir entre muchos se vuelve compleja la distribución del mismo. Esperemos que esto se normalice pronto, que el conflicto en el puerto de Montevideo se solucione y que todo retome su curso normal.
EL AUTOR – Gabriel Pólvora, administrativo de Insumos en Dufour Commodities.
Abr 14, 2022 | Agricultura, Noticias
Al productor le preocupa que “deba usar insumos caros en los cultivos de invierno pero luego los granos se desplomen y tenga que vender barato”.
La Ing. Agr. Marilín Banchero (foto) es técnica de Copagrán y concentra su trabajo en el departamento de Colonia: “Trabajamos principalmente soja, hubo algo de maíz de primera que fue catastrófica porque en el período crítico del maíz no llovió, maíz de segunda y sorgo que tuvo una intensión de siembra bajísima”, expresó.
El ánimo del productor es bueno, pero a diferencia de otros años no ha visto una inversión importante en maquinaria a pesar de los precios de los granos: “El problema son los fertilizantes que dispararon sus precios y el volumen que llegará a Uruguay es poco con una demanda alta, y eso generó temor por lo que puedan pasar en el invierno”.
La preocupación está en que “deban usar insumos caros en los cultivos de invierno pero luego los granos se desplomen y tengan que vender barato lo que implicó una inversión alta”. Como forma de prevención el productor optó por “acopiar fertilizantes, comprar adelantándose al invierno”, dijo en declaraciones al semanario La Mañana.
También “están invirtiendo en análisis de suelo para calibrar mejor la fertilización y no gastar de más, están comprando algo de maquinaria como fertilizadoras variables para poder fertilizar en zonas puntuales” de manera diferenciada.
Todo eso implica una actitud de precaución que se vincula a lo que está pasando en el mundo. “Lo que veo es un panorama de productores cautelosos”, definió.
EL SORGO EN SU PEOR MOMENTO.
Sobre el estado del sorgo, Banchero dijo que “los productores no quisieron sembrar porque el año pasado se instaló el pulgón amarillo que hizo estragos y no hay una forma de control, es una plaga de la que no se conoce mucho, y todo el mundo desistió de sembrar”.
Consultada sobre las investigaciones dijo que instituciones como INIA o la Facultad de Agronomía no se están dedicando al tema. “Lo que hemos hecho en el ámbito agronómico es probar distintos principios activos para ver qué funciona, pero el porcentaje de control no es bueno y a los días se reestablece la población inicial liquidando la planta”. “El sorgo está teniendo un punto de quiebre, la coyuntura no ayuda porque los precios de los demás commodities están tentando por lo que no hay dudas que en el futuro el área va disminuir”.