La gestión, la sanidad, la biotecnología aplicada y el trabajo en equipo “son cuatro aristas en una batería” que permiten mejorar “el resultado de los índices productivos”, destacó el Dr. Ignacio Arrospide.
Montevideo | Todo El Campo | Biogénesis Bagó realizó el Primer Simposio de Integración Estratégica, titulado “Impacto de la reproducción en la rentabilidad ganadera”, donde destacados expertos analizaron la situación de la cría en Uruguay y el mundo, y plantearon sus recomendaciones para obtener mejores resultados productivos y económicos.
La actividad se desarrolló el martes 23 de julio, en el local de la Asociación Rural de Florida. Los expositores y títulos de sus presentaciones fueron: Ing. Agr. Santiago Gomes de Freitas, Gestión en la cría; Dr. Emilio Machado, Manejo y situación actual en la cría; Dr. Jaime Mc Lean, Visión para un veterinario asesor; y Dr. Gustave Decuadro, IATF en ganado de carne: más allá de la sincronización de celos.
CUATRO ÁREAS ESTRATÉGICAS.
El Dr. Ignacio Arrospide, gerente comercial de Biogénesis Bagó Uruguay, valoró positivamente el resultado del simposio. “Lo quisimos orientar a la reproducción, con cuatro áreas estratégicas enfocadas en la cría, y analizar cómo esto afecta la rentabilidad de una empresa ganadera”, comentó.
La gestión, la sanidad, la biotecnología aplicada y el trabajo en equipo “son cuatro aristas en una batería” que permiten mejorar “el resultado de los índices productivos”, destacó.
“Son cuatro patas de una mesa, importantísimas para tener estabilidad. También es importante tener control y vigilar cada una de las etapas del proceso para mejorar los resultados productivos, económicos y financieros”, sostuvo.
Explicó que, a través de esta propuesta, “quisimos salir de nuestro negocio, que es la sanidad, una pata importantísima de esa mesa, para considerar la integración de las diferentes aristas. En este marco aportamos el conocimiento y la experiencia de nuestro equipo técnico-comercial, para mejorar el resultado, con sanidad animal, generando también un bienestar humano”.
UN MUNDO LLENO DE OPORTUNIDADES.
Decuadro, director de marketing estratégico de Biogénesis Bagó, comentó que “estas jornadas son una gran posibilidad de tener un encuentro con colegas veterinarios y con ingenieros agrónomos, para intercambiar novedades”.
El especialista en reproducción, con casi 40 años de experiencia, señaló que Europa “está super penalizada por un gran impacto de la ecología por un lado, y por reglamentación de la Comunidad Económica Europea por el otro. Esto hace que países de la región del Mercosur tengan una oportunidad única de proponer sus productos a los mercados”.
Sobre Uruguay, destacó que “tiene la oportunidad de garantizar, gracias a la trazabilidad, un producto con un diferencial importante”.
Recomendó a los productores “mantenerse muy alertas a los problemas sanitarios”, porque “pueden impactar mucho en los mercados cárnicos y lácteos”.
Agregó que “Uruguay está en una situación especial, porque es un país libre de aftosa con vacunación y con trazabilidad, lo que lo deja en una posición única frente a los demás actores del Mercosur”.
TASA DE PROCREO.
Decuadro planteó que “seguimos con un problema crónico: la tasa de procreo, que es el número de terneros producidos cada 100 vacas. Lamentablemente América Latina sigue en un promedio que oscila en el 60%, o sea que de cada 100 vacas producimos 60 terneros, por lo tanto, queda mucho trabajo por hacer”.
Afirmó que “hoy en día herramientas como la inseminación constituyen la posibilidad mejorar la genética de los rodeos”, y es un factor “super importante”. “Pero la realidad en América Latina es que el 80% de las preñeces corresponde a la monta natural, y muchos toros no son evaluados”, dijo.
BIOTECNOLOGÍAS.
El director de marketing estratégico de Biogénesis Bagó destacó que “hay tres generaciones de biotecnologías de la reproducción”. La más usada en el mundo es la inseminación artificial. Se hacen más de 330 millones de inseminaciones en el mundo.
Otra biotecnología es la del embrión, ya sea de trasplante clásico o fecundación in vitro (FIV). Explicó que el gran diferencial entre una y otra es la reducción en el intervalo de generaciones que logra la tecnología del embrión, que no puede lograr la inseminación. Dicho de otra forma: “lo que logras en cuatro años con inseminación, se logra en un año con un embrión”.
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