Además de la rapidez con la cual se llega al producto final, el producto es presentado como una solución para abaratar costos frente a los altos precios de los fertilizantes, además de reducir los gases de efecto invernadero que genera la basura.

Hébert Dell’Onte | Las subas del precio de los fertilizantes se han convertido en una amenaza para el sector productivo que debe ajustar el manejo para lograr rendimientos capaces de cerrar la ecuación en buena forma. Pero el problema no se agota en la producción, aunque es el productor el que hace uso de los fertilizantes, sino que se traslada a toda la cadena y quien termina siendo más afectado es, siembre el último eslabón de la cadena, el consumidor, que cuando va a comprar los alimentos se encuentra que los precios han aumentado.

Y de los consumidores, los más perjudicados son los económicamente más vulnerables que no que no pueden pagar y optan por productos de menor calidad para hacer rendir más su dinero.

Ese problema, descrito fácilmente en dos breves párrafos, es tema de preocupación de organizaciones locales, regionales y globales, pero también de todos los gobiernos del mundo: ¿Cómo hacer para que los precios de los insumos no terminen afectando el consumo de alimentos frescos y de calidad?

LOS NUEVOS FERTILIZANTES.

La empresa chilena Tequia podría ser parte de la solución.

Tequia creó un catalizador que desarrollar fertilizantes aptos para la producción agrícola partiendo de desechos orgánicos con lo cual libera a los productores de productos que hoy están caros y sobre los que en el corto, mediano y largo plazo hay mucha incertidumbre sobre la evolución de precios como de la disponibilidad.

Además la basura es generadora de gases de efecto invernadero, una rápida conversión de esos desechos en fertilizantes ayudaría también en el cuidado del medio ambiente.

Nos referimos a la solución “TCAS – CATA”.

Tequia está ubicada al sur de Chile, su producto acelera los tiempos en que desechos orgánicos se convierte en fertilizantes reduciendo la contaminación y nutriendo el suelo.

Cuando se señala que se reducen los tiempos, hay que considerar que naturalmente lo orgánico se convierte en nutriente en meses, pero TCAS-CATA lo hace en una hora.

Iván Vega, gerente de Tequia dijo que la innovadora tecnología es capaz de concluir el producto fertilizante partiendo de cualquier desecho de la industria.

El año pasado, el Gobierno Regional de Biobio informó que gracias a la tecnología de Tequia se logró transformar “cientos de toneladas de desechos orgánicos en un potente fertilizante para uso agrícola”, con lo cual “se evitó un grave problema ambiental en la zona”.

Un tema sobre el que habrá que investigar para conocer más sus beneficios.

Pin It on Pinterest

Compartir

Comparte este contenido en tus redes sociales!