El 6 de junio se reunió el Consejo Internacional de Cereales (CIG) en su 56ª Sesión.
Susan Reidy | Londres, Inglaterra | World-grain | Se espera que la producción total de granos disminuya en 40 millones de toneladas a 2.251 millones en 2022-23, lo que refleja cosechas más pequeñas de trigo, maíz y sorgo, según el Consejo Internacional de Cereales (CIG) al convocar su 56ª Sesión del Consejo realizada el lunes 6 de junio.
La reunión fue presidida por Taras Kachka, viceministro de Desarrollo de Economía, Comercio y Agricultura de Ucrania.
El consumo es solo fraccionalmente más bajo, por lo que se espera que los inventarios globales de fin de temporada se contraigan. También se prevé que el comercio mundial caiga un 3% a 404 millones de toneladas, lo que refleja una caída prevista en los volúmenes de maíz y cebada.
Sin embargo, IGC espera que la producción mundial de soja se recupere, aumentando un 11% año tras año a un máximo de 378 millones de toneladas. Se espera que los volúmenes negociados aumenten un 8% en entregas más grandes a los mercados asiáticos en particular.
Vinculado a las ganancias en Asia, la producción mundial de arroz se expandió en un 1%, a un nuevo máximo. Se pronosticó que la demanda mundial de importaciones de legumbres se contraería un 2% en 2022, ya que se esperaba que los envíos más grandes al Lejano Oriente de Asia fueran superados por entregas más pequeñas en otros lugares, incluso a la UE, África y las Américas.
Durante la sesión, la Secretaría presentó sus balances mundiales actualizados de la oferta y la demanda de etanol a base de cereales, con el fin de mejorar la comprensión del CIG de los mercados de biocombustibles y ayudar a pronosticar las tendencias a corto plazo en el uso industrial de los cereales. Esta actualización fue seguida por los debates de los miembros sobre la evolución reciente de las políticas relacionadas con los biocombustibles.
Teniendo en cuenta la situación actual del mercado, los presentes examinaron las últimas novedades en materia de políticas relacionadas con el comercio. La Secretaría también presentó su nueva base de datos sobre la evolución de las políticas nacionales relacionadas con el comercio y otras políticas. Para mejorar la transparencia del mercado, la base de datos aplica el mismo marco que han elaborado las organizaciones internacionales, a saber, la Organización Mundial de Comercio (OMC) y la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo.
El Consejo acordó un nuevo programa de trabajo para 2022-23, señalando que la Secretaría continuará concentrándose en sus actividades económicas básicas en relación con los desafíos del mercado de granos.
Los proyectos para el próximo año incluirían:
- Explorar un escenario de referencia para la producción de biocombustibles para los próximos cinco años;
- Desarrollo de seminarios web especiales sobre sostenibilidad y comercio para sectores específicos (granos, arroz, semillas oleaginosas y legumbres);
- Ampliar su trabajo sobre la información del mercado de legumbres, incluido el desarrollo de balances de oferta y demanda para habas secas y habas, así como proporcionar una gama más amplia de información sobre precios FOB; y
- Desarrollar análisis de la oferta y demanda mundial de semillas de girasol, así como el monitoreo de los mercados de productos de girasol.
Foto World-grain.
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