El registro es esencial para quienes deseen realizar faenas artesanales con destino a autoconsumo o comercialización.
Montevideo | Todo El Campo | La Dirección General de la Granja (Digegra) y la Unidad de Descentralización, informaron que está operativo el período de inscripciones para el Registro Nacional de Faena Artesanal Predial y de Profesionales para Habilitación de Plantas de Faena, conforme a las disposiciones establecidas en las leyes 20.097 y 20.230, y en base al decreto N° 218/024, promulgado el 30 de julio de 2024.
El registro es esencial para quienes deseen realizar faenas artesanales con destino a autoconsumo o comercialización.
Los interesados deberán solicitar un usuario y contraseña enviando un correo electrónico a: registrosgranja@mgap.gub.uy con el asunto: «Solicitud de usuario y contraseña».
En el correo, se debe incluir la siguiente información:
Nombre y apellido.
Número de documento de identidad.
Celular de contacto.
Una vez enviada la información, recibirá un correo en su casilla, con usuario y contraseña donde podrán acceder al registro a través del siguiente enlace: encuestasdiea.mgap.gub.uy
“No se ha comprendido el espíritu de la ley que no atenta contra las carnicerías. En Uruguay los cambios cuestan y de esto se sale hablando, no con comunicados”.
Montevideo | Todo El Campo | El Ing. Agr. Nicolás Chiesa, director de la Granja (Digegra) respondió al Instituto Nacional de Carnes (INAC) sobre las consideraciones que la Junta Directiva de esa institución hizo sobre la faena predial.
Chiesa dijo que le sorprendió el tenor del comunicado y que la elaboración de la ley de faena predial llevó mucho tiempo y trabajo de varias direcciones del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP), con sus técnicos “y también participaron en muchas reuniones los técnicos del INAC”.
En esas oportunidades INAC siempre se mostró “en contra de la ley y de su espíritu”, pero cuando el Poder Legislativo aprobó la norma, el Poder Ejecutivo tiene que reglamentar, y “lo hizo con la mayor responsabilidad y los mejores técnicos para poder trabajar”.
“No se ha comprendido el espíritu de la ley, esto no atenta contra las carnicerías, sino que en Uruguay los cambios cuestan y de esto se sale hablando, no con comunicados a la prensa, y uno hubiera esperado que la Junta Directiva de INAC pidiera una reunión con el equipo del Ministerio, con el ministro (Fernando Mattos), o conmigo, pero nunca se comunicaron para pedir una entrevista”, expresó al programa Diario Rural (CX 4 Rural).
La ley está vigente, el decreto ya está firmado por el ministro y el presidente (Luis Lacalle), “y lo que estamos terminando ahora son las reglamentaciones que se encadenaron con el decreto” reglamentario, añadió, con los registros de productores de granja, de los técnicos, y la habilitación de los lugares de faena.
Chiesa se comunicó con el vicepresidente de INAC, Guido Machado, y le planteó trabajar juntos. “Si INAC tiene dudas o miedo, súmense, aporten técnicos, vamos a trabajar en conjunto con los productores. No dinamitar la ley o no compre esa carne porque no da garantías”.
“Si INAC entiende que la Dirección de la Granja no tiene capacidad para realizar los controles, la actitud tendría que haber sido al revés”, y en lugar de sacar un comunicado cuestionando decir, “me pongo a la orden” y “apoyo para que tengan las herramientas necesarias”.
“Digegra cuenta con técnicos, con las direcciones departamentales de todo el país y la certificación la hacen los técnicos privados, Digegra controla. Es un sistema similar a lo que ocurre con las salas de extracción de miel”, comparó.
En el caso de la miel se controla un alimento que sale a mercados exigentes, y “aquí vamos a hacer lo mismo con el apoyo de otras unidades del Ministerio”, por eso INAC debería “sumarse y apoyar”.
Chiesa también se refirió a los cambios en la UAM.
“En los hechos se podría estar estimulando la faena clandestina, al no existir un mecanismo de control y fiscalización efectivo”, dijo la institución en un comunicado.
Montevideo | Todo El Campo | La Junta del Instituto Nacional de Carnes (INAC)) realizó aclaraciones sobre la faena predial artesanal recientemente aprobada en el Parlamento Nacional por ley 20.097, que fue reglamentada por decreto 218/024.
La institución expresó que “el control del producto de la faena predial artesanal y su traslado es competencia exclusiva de la Dirección General de la Granja (Digegra) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP)”, tal como lo establece la ley aprobada y su decreto reglamentario.
En virtud de ellos, INAC exhorta a que las consultas se realicen a Digegra ya que es en esa repartición ministerial donde se podrá aportar a los interesados toda la información necesaria “respecto a la habilitación del predio, las condiciones de producción, traslado y comercialización de los productos de faena predial”.
En el mismo comunicado, INAC expresó inquietud por el cumplimiento efectivo de lo que la ley determina: “Nos inquieta la capacidad real de control y fiscalización de todos los requisitos que exige la normativa en los predios autorizados, pero, sobre todo, en aquellos que no estén autorizados o no cumplan la normativa, teniendo en cuenta que el incumplimiento de esos requisitos puede tipificar un delito de faena clandestina, además de las sanciones administrativas que correspondan”.
Si no hay un mecanismo de control y fiscalización eficientes, se podría estar “estimulando la faena clandestina”, consideró: “Entendemos que se podría en los hechos, estar estimulando la faena clandestina, al no existir un mecanismo de control y fiscalización de parte del MGAP eficiente y eficaz”.
Esa situación no permitiría garantizar “la inocuidad alimentaria en defensa de los consumidores, y la justa competencia que hace a la transparencia comercial, en defensa del complejo cárnico nacional”.
Frente a esos riesgos, “el Instituto solamente puede recomendar a los consumidores adquirir carne en carnicerías y locales de venta debidamente habilitados”, concluye.
Se permitirá hasta 200 lechones, 50 corderos, 400 pollos o 1.200 conejos al año.
Montevideo | Todo El Campo | Dos años después de su aprobación, se reglamentó la norma que permite y fijara las condiciones para la faena y comercialización de lechones, conejos, corderos y pollos a los productores familiares. El decreto ya tiene la firma del ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, y espera por la del presidente Luis Lacalle, cosa que se espera ocurra en las próximas horas.
Natalia Martínez, directora de la Dirección General de la Granja (Digegra), recordó que la ley tuvo distintas instancias de debate: La primera ley salió en diciembre de 2022 con sus primeros artículos, esa norma se modificó en diciembre de 2023 y desde entones “hemos trabajado ininterrumpidamente”.
En declaraciones al programa Informe Granjero de radio Nacional, destacó la labor desempeñada por las unidades ejecutoras competentes en el tema, que son la Dirección de Desarrollo Rural, la Unidad de Descentralización del Ministerio, Servicios Ganadero, la Dirección de Inocuidad y Bioseguridad (Digebia) y la Dirección de la Granja.
Todos “acordamos un decreto reglamentario, luego de que los legisladores, en forma unánime, aprobaran el marco legal”.
El decreto tiene un aspecto de tipo jurídico “y un anexo que define los requerimientos para la faena artesanal, predial, con todas las garantías de inocuidad del producto que va a ser comercializado al consumidor de forma directa”, explicó.
La reglamentación ya tiene la aprobación de las diferentes instancias a nivel ministerial y el ministro Fernando Mattos “ya firmó ese decreto reglamentario y su anexo y lo elevó a la consideración del presidente de la República”, Luis Lacalle.
¿CUÁNTOS ANIMALES FAENAR?
Por otra parte, Martínez dijo que el número de animales que se permitiría faenar fue “un punto controversial”.
Lo primero es señalar que el decreto incumbe a “productores familiares registrados en la Dirección General de Desarrollo Rural del Ministerio de Ganadería, y se definió para las distintas categorías un número máximo de animales por año”.
“Los cerdos, para la categoría lechón, son 200 animales por año; los ovinos categoría corderos son 50 al año; los pollos 400 y los conejos 1.200 al año como máximo de faena artesanal predial”, detalló.
REGISTRO NACIONAL DE PRODUCTORES DE ANIMALES DE GRANJA.
A los registros ya existentes, como el de productor familiar o el SNIG, se agrega el Registro Nacional de Productores de Animales de Granja para contemplar también ahí las especies que no tienen Dicose, como los conejos.
Los conejos son un caso particular: “No hay un registro de productores ni se tiene certeza de la cantidad que hay, tampoco hay datos sobre los conejos que se producen, cuántas cabañas o cuántas madres. Son datos que faltan”, expresó.
En este nuevo registro también se anotarán “los productores de pollos parrilleros que definan faena artesanal, no está pensado a los façoneros de pollos que remiten a planta habilitada porque esto no es para ellos sino para los familiares que tengan una faena que es conocida como el ‘aguinaldo de fin de año’, sobre todo previo a las fiestas de Navidad y Año Nuevo”.
Los productores de corderos y cerdos “también se tienen que inscribir”, aclaró.
También se pedirá una declaración de la intención de faena 15 días antes de iniciar la etapa de faena, para poder emitir los remitos que van a acompañar al animal faenado durante el transporte por parte del consumidor”.
El registro estaría operativo a partir de agosto.
NO SERÁ DEBAJO DEL ÁRBOL, TAMPOCO EN UN MINIFRIGORÍFICO.
La directora Martínez agregó que la reglamentación “no está pensada para la faena bajo el árbol”, sino que busca “dar garantías al consumidor”, para eso “se piden mínimas condiciones de instalación, higiene”.
“No es bajo el árbol, pero tampoco es montar un minifrigorífico en un predio de un productor familiar”, continuó.
Los galpones que los productores tienen en sus predios serán útiles y podrán funcionar como lugar de faena “con algunas mejoras como tejido mosquitero, ventanas, cortinas, algún sistema de rieles para colgar el animal, los recipientes para los residuos, que el piso sea lavable y se pueda desinfestar, que la mesa sea lisa, lavable y que resista el agua y los desinfectantes”, mencionó.